Capitulo 8

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"Reencuentro."

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La luz penetró entre las cortinas para despertarlo, era una cálida sensación a la cual todavía no se acostumbraba, después de todo siempre se despertaba al aire libre y ahora estaba ahí, en una cama gigante donde antes dormía El Maestro. El lugar era encantador a pesar de tener todavía polvo en sus muebles vacíos, tenían mucho trabajo ese día a pesar de que Matt había estado trabajando el día anterior durante la espera. Pasó sus manos por su rostro para terminar de despertarse y finalmente levantarse, el colgante rebotó en su pecho recordándole lo que era y lo que había hecho aunque en esos instantes no le importaba en absoluto, ahora tenía una nueva vida con nuevos amigos y estaba ansioso por empezar.

Fue directamente a la cocina pasando por el cruce que conectaba todos los cuartos y lo que debía ser el baño, no había tenido tiempo para investigar la casa ya que ayer se había quedado dormido mientras comían y la única vez que se despertó fue en mitad de la noche, el ardor del collar se había vuelto insoportable, para su suerte aquella sensación agradable lo envolvió nuevamente. No sabía cómo describir esa sensación mas sabía que era buena por la manera en cómo lo abrazaba.

Tom se encontró con un Matt despierto haciendo el desayuno, varias tazas de leche con lo que debía ser cereales multicolores, seguramente los habría comprado ayer.

-Entonces, ¿esto es Espinblud? -Preguntó llamando su atención, se había estado haciendo esa pregunta desde que llegaron, lo único que recordaba era ver muchos puntos de luces anaranjados.

-Springblood -le corrigió dando una suave sonrisa-, solo has visto una parte, Tim, además, creo que habían cosas nuevas por la ciudad así que podríamos salir a verlas, así aprovechamos a comprar cosas como comida, ropa, trabajo también.

-¿Trabajo? -Se sentó en el mismo asiento de ayer.

-Sí, para mantener la casa. -Le dejó la taza con una cuchara- Es algo difícil de explicar ahora mismo pero básicamente es para tener un lugar donde vivir.

El menor asintió todavía sin entender del todo pero decidiendo que era mejor no seguir con el tema, cogió su taza con cuidado empezando a comer en silencio siendo observado por el narcisista, parecía estar esperando al tercero.

-¿Y Edd? -Finalmente preguntó mirando hacia donde debía estar sentado.

-Creo que está durmiendo, en la noche él no pudo dormir bien, lo escuchaba moverse de un lado a otro, de seguro estaba tirando las cosas de... -Se quedó callado de golpe, como si se hubiera acordado de un detalle- Las cosas antiguas, hay que colgar las fotos y tengo que buscar a los chicos.

-¿Qué? -Tom no podía estar más confundido que ahora, empezó a sentir que integrarse en ese modelo de vida iba a ser difícil.

-Sí, hay muchas cosas que explicarte -soltó una pequeña risa más cómodo y empezó a desayunar- pero lo haré a su debido tiempo.

Volvió a asentir ante lo que dijo, todo era extraño pero podría acostumbrarse y si se lo iban a explicar las cosas tal vez podría ser más temprano que tarde. Desayunaron sin Edd, el de morado le guardó la taza en la nevera que tenían, no necesitaban cambiarse de ropa al carecer de ella así que salieron de la casa no sin avisar antes mediante una nota.

Matt lo agarró de la mano para asegurarse de no perderlo, saludó al vecino de al lado que no conocía, quien lo miró confuso, antes de caminar con tranquilidad por la acera. El de azul se dedicaba ir detrás suya observando su alrededor lleno de curiosidad, la ciudad era mucho más activa que la suya y pensó que a lo mejor antes se veía así, con edificios diferentes pero llena de actividad y de personas, tenía que aferrarse a su brazo para que la corriente de personas no se lo llevara a cualquier parte, al principio no entendía porque caminaban por ahí cuando tenían un camino más ancho justo para su lado o al menos así pensaba hasta ver como empezaban haber muchos vehículos que con sus pitidos lograban agobiar al menor y aquel humo tóxico sólo empeoraba la situación. Empezó a sentirse encerrado y en cuestión de segundo acabó por soltarse de Matt, aquello era muy distinto a donde solía vivir, todo estaba contaminado y no había la misma tranquilidad que había en el ambiente. Empujaba a la gente con suavidad para pasar hacia el primer hueco que había hasta acabar tropezando y caer a la primera tienda que encontró, un aire fresco pero comprimido lo inundó mientras una puerta se quedaba apoyado en él, se quedó en el suelo intentando terminar de procesar la información, era reconfortante que el ambiente ya no fuera asfixiante.

Power (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora