II. La huida de Lan JingYi [ZhuiYi]

Dos

Algunas aclaraciones: He puesto la historia como post canon, es decir, lo que sucede después de la novela, me baso más en el libro que en el live action, sin embargo, obviamente en un mundo donde hay donceles. El tema es SiZhui. Seguiré el canon, es un Wen de sangre, Wei Ying aquí puede ser doncel o no, pero SiZhui no es su hijo biológico, (ni de Lan Zhan) sólo porque no quiero que él y JingYi sean primos sanguíneos (aunque lejanos).  Pero como la familia no es estrictamente tu sangre, él sí considera a Wei Ying y Lan Zhan sus padres. 

Espero se entienda, estoy teniendo problemas para expresarme. 

Pd: Gracias por el apoyo a esta historia. 

Lan SiZhui

Gusu Lan

—Necesito hablar con él —Dijo Sizhui sin controlar la desesperación que llevaba creciendo en su interior desde hacía dos semanas y que se notó en su voz. Wei Ying se acercó y le sobó la espalda—. No quiero ir a la reunión. Necesito hablar con JingYi. Tengo que ir donde ZiZhen.

Habían pasado dos semanas desde la última vez que vio a JingYi. La primera semana la pasó en vela. La segunda, estuvo en la misma situación.

Llevaba quince minutos allí, contándole a Wei Ying y a Lan Wanjin sobre la reunión de la misma forma que hace una semana estuvo ahí y les contó lo sucedido con JingYi después de que Wei Ying había intentado hacerlo comer porque SiZhui había bajado 6 kilos en solo siete días. SiZhui recuerda con aplomo las palabras de Wei Ying después de escucharlo.

—Heriste sus sentimientos, SiZhui.

SiZhui se había retorcido bajo la seriedad de Wei Ying en ese momento.

—No puede ser. Fui claro con él.

Wei Ying hizo una mueca.

Una semana después de eso había logrado localizar a JingYi. Pero no podía ir por una reunión importante. Hace dos semanas JingYi había huido de él. Creyó haber entendido por qué. No lo quería, no correspondía sus sentimientos. Estaba claro ya que había huido tras pedirle matrimonio. SiZhui apenas había comido desde entonces y apenas era capaz de dormir. Y todo fue en picada cuando hace una semana Wei Ying le hizo ver que esa no era la razón. SiZhui aun recuerda su explicación.

—Yo podré ignorar muchas cosas, pero ustedes los Lan necesitan un buen curso de palabras, y eso que eres el mejor de todos, pero aquí te has quedado corto. En serio ¿Cómo mencionaste a Jin Ling en ese momento? ¿O el honor? ¿Es que no aprendieron nada de mi declaración a Lan Zhan?

SiZhui volvió al presente, frente a Wei Ying una vez más.

—¿Crees que pueda ir a verlo? —Inquirió—. ¿En cuanto termine la reunión?

—Claro que sí. Y podrás solucionar todo. Tranquilo. —A su lado, Lan WangJi asintió.

Wei Ying le apretó la mano con fuerza y SiZhui sintió un dolor en el estómago. Esbozó una sonrisa tensa. Ahora sabía lo que podría estar pasando por la mente a JingYi. SiZhui estaba demasiado enfadado consigo mismo. Sin embargo, y sólo por motivos diplomáticos, se había esforzado en comportarse de manera civilizada y aceptar ir primero a la reunión con Zewu-Jun, pero en esos momentos solo quería ver a JingYi, hablar con él y hacerle entender la realidad de su situación.

—Ven, tómate un té —le dijo Wei Ying, soltándole la mano. El hecho de que estuviera invitándole un té y no sonrisa del emperador decía lo grave que era la situación—. Necesitas calmarte y una clase de lo que debes decirle a JingYi en cuanto lo veas. Ah, y comer. Creo que has bajado otros 6 kilos.

Era probable. SiZhui no podía pasar bocado por los nervios.

—De acuerdo —Le respondió, aun sabiendo que no podría ingerir nada.

Le dolía el estómago y la cabeza de pensar en lo que pasaba por la mente de JingYi, lo que debería de estar sufriendo. Wei Ying le había explicado que estaba seguro que JingYi correspondía de sobra sus sentimientos, el tema había sido las palabras, las suyas, para declararse.

Una gota de sudor corrió por su espalda, se sentía aturdido por la frustración y la culpa. Entonces, mientras atravesaba la puerta de la habitación de sus padres, todo se volvió borroso. De hecho, tuvo que detenerse.

—SiZhui ¿Qué...?

Oyó la voz de Lan Wangji que salía a su encuentro y se obligó a poner rectas las rodillas y a enderezarse, pero sus piernas se negaron a obedecerlo y cayó hacia delante. Sintió los brazos de Wei Ying al igual que su voz, ordenando la presencia de un sanador.

***

SiZhui parpadeó, confundido al ver las lujosas cortinas y aspirar aquel aroma a sándalo. Giró la cabeza y vio a una mujer de mediana edad vestida con una túnica blanca y una firme cinta alrededor de su frente. La mujer se levantó y se inclinó sobre él, le comprobó la temperatura y sus signos vitales, y él se sintió profundamente decepcionado.

«No está aquí. Huyó de ti ¿Recuerdas?».

Por un breve segundo creyó que JingYi estaría allí.

JingYi

¡Tenía que verlo!

—¿Qué sucedió? —Preguntó con la garganta seca.

—Se desmayó —le respondió la sanadora—. Está muy nervioso, debe calmarse.

Se había desmayado como un idiota, por los nervios y la desesperación. Cambió de postura e intentó levantarse. Tenía que salir de aquella cama, tenía que ir a una reunión y visitar a JingYi. Pero la sanadora apoyó una mano en su pecho y volvió a tumbarlo sin ningún esfuerzo.

—No debe moverse, debe descansar —le dijo en tono compasivo, lo que le hizo sentirse todavía peor. Él se fijó en el techo y luego en la ventana en una esquina. Afuera estaba oscuro y estrellado. ¿No había llegado allí por la tarde? ¿Cómo era posible que fuese de noche? ¿Llevaría horas allí tumbado?

—¿Cuánto tiempo llevo aquí? —Preguntó.

—Una semana.

La noticia lo horrorizó.

—¡Sizhui, por fin estás despierto! —Wei Ying entró en la habitación y lo tomó de la mano—. ¿Cómo está? —Preguntó , en dirección a la sanadora.

Ella dio una explicación en jerga médica, y SiZhui entendió que había sufrido un pico de nervios, básicamente, producto de las horas sin dormir, la poca alimentación, pero ahora estaba bien. Todo gracias a la energía que sus padres se habían turnado para cederle, algunas hierbas y jugos hidratantes que le hacían beber cuando despertaba mareado y desorientado (SiZhui no recordaba esos momentos).

Pero él no se sentía bien, se sentía destrozado. Había pasado una semana.

《JingYi》

SiZhui tenía que levantarse e ir a buscarlo.

La confusión de haber despertado empezó a convertirse en determinación. Estaba mejor, era hora de encontrar a JingYi. Si tenía que comer lo haría.

Wei Ying se sentó y se inclinó hacia delante.

—Tranquilo. Sé lo que estás pensando. JingYi sigue en casa de ZiZhen. Lo veras, tranquilo. No quiero otro colapso. Antes, Lan Zhan y yo queremos hablar contigo. Zewu-Jun nos mandó noticias interesantes. Ah, y comerás.

Sin opciones, SiZhui asintió. 

Nota: Esto de que SiZhui no supo expresarse se me vino a la mente con la parte, que creo sucede en todas las versiones, donde hay una discusión sobre Wei WuXian y Xue Yang, y SiZhui y Jin Ling entran en una discusión y SiZhui pide disculpas por no saber usar bien sus palabras.