La llegada.

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Era un dia normal dentro de lo que cabe, en realidad nada ha sido igual luego de desconocernos, dejar mi vida en busca de respuestas que ahora me parecen imposibles de encontrar.

Desperté de mala manera y lo único que me tranquilizaba era pensar en la conversación de anoche con Mica, estaba cansada mentalmente como toda adolescente, bajé a tomar un café para poder despertar y enfrentar mi día.

━¡ Buenos días querida Ava! Mi madre me toma por sorpresa, es que estoy vagando por mi casa como un alma en pena, no logro conciliar el sueño, y si lo hago la voz no me deja, me atormenta, todo esto está saliendose de control, no puedo contenerme más y ocultar a mis padres lo que sucede, ellos tienen derecho de saberlo, de conocer a quienes resguardan en su hogar pero no puedo correr el riesgo de que eso pase, mis hermanos, yo... Mica estaría en riesgo, nos tomarían como conejillos de laboratorio y no podría soportar ver a mis hermanos sufrir de esa manera.

━Hola madre, la saludé tajante y con el seño fruncido, no tenía ganas de hablar con nadie, ni siquiera con ella, no tiene la culpa, necesito estar en mi burbuja juvenil almenos hasta que todo esto acabe y ojalá sea rápido.
Asi que tomé el café en manos, lo coloqué en un copo desechable, tomé mis pertenencias y las llevé conmigo.

Era día de instituto asi que tenía que sacar mi  mejor cara y poner en marcha mi plan de *ser amiga de la hermana del chico que me moja las pantys.*

Para mi suerte, maravillosa suerte, llegué tarde por culpa del bus, es que parece que nadie tiene prisa, en especial el conductor, me puso peor al ver cómo se discutía con una señora mayor por querer cobrarle el boleto hacia otra esquina, la gente aveces se olvidan de los valores, en especial del respeto asi como lo hice yo hace diez minutos, estaba claro que este no sería mi día porque mis hermanos llegaron antes que yo ya que me abandonaron, me las van a pagar.

Tenía clase de historia de la fotografía, la amaba tanto pero hoy no mucho, era cansador escuchar algo que ya sabía, sí, es lo malo de que tu carrera te guste, saber toda la historia y que tu profesor te aburra, no tenía nada en contra de él pero hoy no podía aguantar asi que tomé mi bolso y salí de la clase, eramos muchos en sala y aproveche que el maestro comenzó una proyección de montones de fotos viejas, nadie se dio cuenta.

Me encontraba explorando el pasillo, no había nadie más que yo, eran las pruebas para los atletas del último año y se encontraban en el ala del gimnasio, todos los corpulentos, sudorosos y sexys se encontraban allí compitiendo uno con otro, lo que más me gustaba era que incluían el boxeo, eran muy buenos por lo que escuché y todos tenían un candidato, asi que me dirigí hacía ahí para distraerme un rato y follarme con la mirada a algunos de ellos, quién sabe, quizas me consiga a uno.

Entré al lugar, olía a sudor y mucha testosterona, el salón estaba dividido en seis categorías, los de natación eran de peso ligero por lo que no lucían tan trabajados como el resto, el equipo de voleiboll eran unos chicos delgados pero bonitos, estaba el equipo de básquetbol que eran definitivamente los más altos del lugar, divisé al equipo de fútbol americano hablando con el entrenador ellos estaban hechos unas bestias sin duda eran los más grandes pero no practicaban en el salón sino en el campo de juego de la institución, también estaban los tenistas de mesa que se ha iniciado este año por lo tanto no tenían aún ni lugar, estaban recolectando personas para sus equipos y por último el ring, donde se encontraban cuatro hombres bien trabajados y corpulentos sin mencionar lo calientes que se veían con la ropa pegada al cuerpo, sudorosos atrayendo mi atención por completo, tenían bendadas las manos y por lo que veía estaban a punto de comenzar una pelea.

Me senté en uno de los bancos para que nadie notase que estuviese ahí observándolos, cada boxeador estaba guiado por un hombre mayor que ellos y se situaban en cada esquina, el boxeador de negro era mucho más grande que el de ropa gris por ende el de negro ganaría pues no tendría oportunidad ante él su oponente.

Entre las Sombras +21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora