Capítulo 45 -Envió de proposiciones

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Le pedí a Yan Wanqiu que hablara conmigo sobre los gatitos. Yan Wanqiu estuvo de acuerdo sin dudarlo y le pidió su opinión a Yan Kongshan. Ella era la parte defensiva y yo defensiva. Los dos nos prepararon para una batalla.

Resultó que Yan Kongshan sorprendentemente bueno para hablar..

"Está bien", dijo, "de hecho, hay muchos ratones en la tienda, así que está bien tener dos gatos".

Antes de que pudiera reaccionar, Yan Wanqiu ya había comenzado a bailar felizmente. El nuevo hogar de los dos gatitos se determinó de esta manera. Ya cuando sean mayores, serán destetados y enviados a la tienda a trabajar.

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La renovación del circuito electrico se completó según lo programado. El viejo Zheng me llevó a inspeccionarla, diciendo que la renovación había ido muy bien, y que no tendría miedo de usar aparatos de alta potencia en el futuro, aunque hiciera funcionar el aire acondicionado en las tres habitaciones de arriba y abajo..

Hablando, sacó el control remoto, lo "soltó" y encendió el aire acondicionado vertical en la sala de estar.

La brisa fresca sopló mis mejillas, me quedé atónito y pregunté: "¿Quién compró este aire acondicionado?"

"El presidente Yu lo compró."

Asentí con la cabeza y no dije nada, pensando en mi corazón que mi papá lo estaba haciendo de manera decente esta vez.

Después de firmar el formulario de aceptación, el viejo Zheng y los demás se fueron. Según la lógica, dormí bien esa noche e incluso pude respirar el aire acondicionado fresco de mi habitación. Pero debido a todo tipo de deseos indescriptibles, finalmente dormí en la casa de Yan Kongshan., me mezclé con él en el baño por la noche, y luego ambos nos acostamos en la gran cama y nos abrazamos para dormir.

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Al día siguiente tomé una licencia y no fui a la tienda, así que me quedé y esperé a que el abuelo regresara a casa. El abuelo y su avión aterrizaron alrededor del mediodía, y fue el hijo del tío Zhang quien fue al aeropuerto a recogerlos. Cuando llegaron a Qingmeiyu, eran casi las tres de la tarde.

Despidiéndose del tío Zhang y los demás frente a la casa, el abuelo arrastró su maleta y se detuvo frente a su casa por un momento, miró a ese viejo amigo con el que se había encontrado después de mucho tiempo y, al cabo de un rato, su ánimo decayó e hizo un comentario.

"¿Por qué todavía está tan roto?"

¿Tal vez sea porque sólo ha habido una renovación de circuito en nuestra casa, y no una pintura de la pared externa?

"Si crees que está roto, le pediré a mi padre que le pida a alguien que vuelva a pintar la pared." Levanté la maleta y estaba a punto de entrar a la casa, pero no la levanté de una vez.

"......"

La segunda vez que me preparé mentalmente, respiré hondo, tensé los músculos de mis brazos, levanté la maleta del suelo, para rápidamente entrar a la casa.

No era mi ilusión, esta maleta es muy pesada y no es solo un poco demasiado pesada.

"Abuelo, ¿Qué compraste? ¿Por qué pesa tanto?"

El abuelo le echó un vistazo, vio el aire acondicionado, se le iluminaron los ojos y asintió con satisfacción: "Por fin, todavía hay un poco de conciencia". Al oírme preguntarle, corrió y abrió la maleta frente a mí. "Oh, acabo de comprar unos souvenirs, todos son prácticos, mira Mianmiam".

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