Capítulo 9

74 12 2
                                    

Respire una bocanada de aire y me moví por todos lados quitándome todo lo que tenia a mi alrededor.

Golpeaba todo sin sentido, pero lo único que pensaba era salirme corriendo.

—Hey, hey... Tranquila... Estas bien... —me dijo April calmándome con una sonrisa.

—P-Pero... l-la persona... corrió hacia mi... s-sangre... había mucha sangre —comencé a decir cosas incoherentes.

—Creo que alguien ha tenido un mal sueño —April seguía con su risa. Debo de haberme visto demasiado ridícula tartamudeando y diciendo esas cosas.

Me sorprendió mucho donde me encontraba, algo que no había puesto atención.

—¿E-Estoy en el hospital? —dije suspirando agitadamente.

Me encontraba en mi habitación y todo se encontraba ordenadamente.

No había nada de sangre en la puerta. No había nada en el suelo, pero tampoco estaba la lampara que se había roto.

¿Que había pasado? Todo era diferente a como estaba en la noche.

—Si... Estas en el hospital... ¿Que acaso no recuerdas eso? —me pregunta con una ceja levantada y cara de preocupación.

—Si... Si lo recuerdo, lo siento... Fue un momento...

—Hola... ¿Como te encuentras? —la doctora Miller, con su cabello rizado de color marrón entró a la habitación interrumpiendo nuestra platica.

—B-Bien... —respondí mientras ella me sonreía y dejaba un par de cosas.

Mi mirada se desvió segundos después, y me quede ida pensando en todo.

Todo lo que había pasado no era un sueño... No podía ser un sueño...

Había pensado que eran mis últimos segundos de vida cuando aquella persona había corrido hacia mi. El miedo es lo único que me hacia saber que no había sido solo una pesadilla... ¿O si?

No podría dudar de eso, pero despertar así de repente y ver todo normal... Era extraño... Tal vez si fue solo mi imaginación... Deberá ser algún efecto del golpe...

Pero todo parecía tal real...

—Déjame checar como te encuentras... Y ya en un momento te podrás ir —La Dra. Miller me guiñó un ojo cuando dijo eso—. ¿Te sientes mejor? ¿Alguna molestia?

—Si... Es decir... No tengo molestia... Me siento perfecto. —no podía pasar otra noche en este hospital, aunque eso solo haya sido un sueño.

—Bien...

Después de haberme hecho un par de preguntas y algo con las maquinas. Se dirigió a mi y me sonrió.

—Parece que estas perfecta. Te podrías ir a tu casa, pero debes comprar estas medicinas —me entrega una receta medica—, tomártelas en tu horario y debes tener cuidado con el golpe en tu cabeza.

—Esta bien —hago un intento de sonreírle, pero creo que fue algo como una mueca, pero de disgusto. Aun no me encontraba bien por lo que creía que había pasado en la noche.

—Si, yo le recordare tomárselas —dijo April—, ¿Te ayudo a levantarte? —asiento ligeramente mientras me acomodo.

—¿Me podrías pasar mis zapatos? —le pedí a ella.

—Claro... —me respondió mientras me los daba.

Me senté en la camilla y me los puse, posteriormente me puse de pie y una ligera molestia sentí en la pierna derecha.

—Bueno... Las veré después... Si ocupan algo o si sientes la mas mínima molestia Jane, no dudes en marcarme —me dice la Dra. Miller rebuscando en su bolsillo y sacando una tarjeta—. Aquí tienes...

Era su número. La tomé y le sonreí levemente.

—Gracias Dra. Miller... —le dije mientras daba un paso.

—Dime Jennifer...

—Oh... Gracias Jennifer... —le dedico una sonrisa de verdad y April y yo salimos por la puerta, con la compañía de Jennifer a nuestras espaldas.

—Por cierto... ¿No tenías una lámpara cuando nos retiramos ayer? —me dice April mirando extraño al mueble donde había estado eso...

GoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora