Capitulo 3: Mi razón de Seguir/Mi Motivo de no Amar/La chica de la Sonrisa

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Sonríe aunque sólo sea una sonrisa triste, porque más triste que la sonrisa triste, es la tristeza de no saber sonreír.

-Anónimo

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Podemos ver a un niño no más de 6 años que estaba en la cocina de su casa viendo el horno y como dentro de este estaba una bandeja de galletas.

Sus ojos se miraban algo cansados y bostezaba algunas veces pero no apartaba la mirada de el horno.

Izuku: Solo un poco más.

El rubio solamente se quedó viendo el horno esperando que su contenido terminará de calentarse lo suficiente pero el niño se miraba bastante cansado y estaba cabeceando varias veces.

El niño estaba apunto de caer de cara al suelo pero unas delicadas manos lo sostuvieron antes de que su cara impactará con el suelo.
Para luego las misma manos cargarlo con cuidado haciendo que el niño se despierte para ver a la responsable o por lo menos creer ver una silueta.

Izuku: Mami? -Dijo para después fregarse los ojos-

En ese momento ya al haberse aclarado la vista el niño vio que la persona que lo tenía entre sus brazos no era su madre, sino que era una mujer de cabello rubio cenizo y ojos verdes muy hermosos y lo que más resaltaba era la hermosa sonrisa que la mujer tenía y que le dirigía a Izuku.

En ese momento ya al haberse aclarado la vista el niño vio que la persona que lo tenía entre sus brazos no era su madre, sino que era una mujer de cabello rubio cenizo y ojos verdes muy hermosos y lo que más resaltaba era la hermosa sonrisa que la...

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El niño al verla solamente abrió los ojos para abrazar a la mujer.

Izuku: ¡Nana Licita! -Dijo abrazando a la mujer-

La mujer ante eso abrazo al pequeño dándole varias vueltas mientras le daba un buen abrazo.

Licita: ¡Hola mi pequeño dragón, cómo estás?!

La mujer se separó para ver mejor al pequeño pero al momento de verlo se asustó.

El pequeño estaba con los ojos hinchados, ojeras, un parche en la mejilla, vendas en los brazos y había una curita en su nariz y la expresión cansada de su linda carita.

Licita: ¡Izuku ¿Qué te pasó?! ¡Ven te voy a revisar!

La mujer cargo al pequeño hasta llevarlo a la mesa donde lo vio mejor para revisarlo tratando de ver mejor lo que tenía.

La mujer le quitó el parche de su mejilla viendo cómo había un gran moretón en su cara la mujer se asustó ante eso y rápidamente se fue por el botiquín de primeros auxilios para empezar a curar esa herida ya que se miraba como si no la hubieran desinfectado bien.

Licita: Pequeño que fue lo que te pasó? -Dijo preocupada-

El niño solamente se quedó en silencio mientras jugaba con sus dedos.

Una Bestia para Cinco PrincesasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora