Capítulo 4: El Dolor de un Niño/Me Preocupo por Ti/Lo que Me Hace Feliz

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La felicidad es la finalidad última de la existencia humana

-Aristoteles

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Podemos ver en una escuela primaria, el lugar donde los niños corren y juegan sin parar, dónde aprenden y se divierten para empezar a crear su camino como estudiantes y dónde socializan y hacen amigos desarrollando sus habilidades sociales.

Justamente en ese momento podemos ver en el fondo de el patio de juegos, un punto alejado de los demás niños que estaban jugando, podemos ver a un pequeño niño rubio de ojos dorados que estaba viendo una hoja que tenía una carita triste y un 0 al lado.

El pequeño niño solamente suspiro para bajar la hoja junto con la mirada que demostraba su tristeza.

Izuku: Mamá se enojara conmigo otra vez, -Dijo con tristeza en su voz- ¿Por qué no puedo tener notas como las de Nee-chan? Tal vez así mamá no estaría enojada siempre conmigo.

El niño solamente se quedó en su burbuja sin darse cuenta que un grupo de niños se acercaban a él y no precisamente con intenciones para invitarlo a jugar con ellos.

Izuku seguía pensando en que podía hacer para mejorar su rendimiento en la escuela y tal vez así hacer que su madre lo felicitara como hacía con su hermana. El solo pensamiento de su madre felicitándolo y abrazándolo mientras le decía que había hecho un buen trabajo le emocionaba, quería eso, haría cualquier cosa por eso.

Sin embargo los pensamientos del niño fueron interrumpidos al momento en el que su cabeza fue golpeada por una pelota provocando que al estar distraído no pudiera sostenerse y cayendo de la banca donde estaba quedando en el suelo.

Cuando el niño abrió los ojos después del aturdimiento del golpe, vio como un grupo de niños lo rodeaban cosa que lo intimidó, pero una voz bastante conocida para él lo asustó más.

¿¿¿¿: Mira que eres un inútil Deku, tu cabeza golpeó mí balón.

De entre los niños que lo estaban rodeando se puede ver cómo un niño de cabello cenizo de alrededor unos 5 años de ojos rojos que lo miraba con burla y con un balón en su mano.

Izuku: K-Katsuki. -Dijo con claro miedo en su voz-

Katsuki: Vaya Deku, es que ni siquiera como portería sirves, es que no hay algo en el que seas bueno? Eres un asco en los deportes, no sabes jugar ninguno de los juegos y ni siquiera sabes hacer tus tareas, es que acaso eres retrasado? -Dijo con fingida sorpresa para luego sonreír con burla- Oh! Espera, ya recordé, si eres un retrasado.

Eso provocó que los demás niños se empezarán a reír por el chiste del niño mientras Izuku solamente apretaba los puños mientras sus ojos se empezaban a cristalizar.

Izuku: ¡N-No soy retrasado! ¡L-Lo que tengo se llama d-déficit de atención! S-Solo me cuesta aprender algunas cosas eso es —-

El niño no pudo continuar ya que una pelota impacto en su rostro haciendo que volviera a caer al suelo.

Katsuki: No me interesa como se llama la mierda que tienes, eres un inútil y siempre serás un inútil, tienes un don que solamente sirve para llamar a las aves y insectos, no eres nada comparado conmigo -Dijo mientras mostraba como pequeñas explosiones salían de sus manos- eres inferior a mí Deku.

Los niños empezaron a burlarse de Izuku que solamente apretaba los puños y las lágrimas salían de sus ojos empapando sus mejillas.

Pero en su mirada se miraba el enojo, por lo que al ver la pelota que anteriormente lo golpeó no dudo ni un segundo.

Una Bestia para Cinco PrincesasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora