SEXO O AMOR

Capitulo 11

Llegamos a la cafetería que mas me gustaba, cafetería Piora, propiedad de Mark. Nos sentamos en la terraza mientras Mark pedía el desayuno y yo me fumaba un cigarro, estaba muy agobiada con esa situación.

-         Que escondidito te lo tenias hermana y no me extraña ¿de dónde lo has sacado?- suspire y puse mis ojos en blanco- se que odias que te pregunte pero no lo puedo remediar

-         Es un amigo, nada mas- ella bromeo con su rostro- hace poco que nos conocemos y punto, no hay nada mas

Tire mi cigarro para poder saborear el desayuno que me trajo Mark, el se sentó junto a mí y enfrente de mi hermana.

-         Bueno  Mark, he intentado sacarle información a mi hermana pero es imposible- la mire con una ceja levantada mientras saboreaba el capuchino- ¿hace cuanto que te la estas follando?-en ese momento escupí el café

-         Pero como eres…tan….- Mark sonrió- ¡estúpida!- mire a Mark- y tu señorito, mas te vale que te calles a la pregunta impertinente de mi hermana

-         Somos muy buenos amigos- respire- pero nos encanta compartir la cama cada noche desde hace una semana-pise su pie con fuerza mientras él se quejaba yo sonreí burlándome de el

-         Así que desde hace una semana, espero que con mi presencia aquí durante una semana, no os estropee la vuestra- la mire con una sonrisa falsa

-         Podemos dejar este tema, por favor- me sentía incomoda, no me gustaba que mi hermana supiera mucho de mi vida personal porque jamás lo entendería

-         Esta noche me marchare de viaje, por trabajo y os dejare tranquilas que disfrutéis de Italia- era tan educado, que me ponía enferma

-         Qué pena que no pueda verte más tiempo, podíamos ir a mirar algo por Italia así tendré más tiempo para conocerte-  ¿y ese interés repentino de mi hermana con Mark? Qué cruz de hermana y lo peor es que Mark le seguía la corriente

Después de disfrutar del desayuno, fuimos a dar una vuelta por roma. Era precioso, nunca me cansaba de ver sus monumentos en cada rincón. Cuando llegamos al coliseo, me quede mirando cada piedra, cada escultura y cada arco. Me encantaba observarlo y tocarlo, pero siempre he deseado poder estar dentro estudiándolo sin que nadie me interrumpiera.

-         ¿Por qué tienes tanta admiración hacia el coliseo?- las vibraciones de sus voz en mi oído, hizo que se erizara la piel

-         Porque es mi proyecto de carrera- me miro extrañado- estoy estudiando en la universidad de roma arquitectura gracias a una beca

-         Dejaros de cuchicheos y vamos ver la fontana de Trevi- era preciosa y lleno de magia para pedir deseos

Mientras caminábamos hacia la fontana de Trevi, me di cuenta que Mark no me conocía, solo mi cuerpo y mis deseos sexuales. Mark y Mari, mi hermana, tenían una conversación muy entretenida y yo seguía con mis pensamientos. ¿Necesito conocer cosas de su vida para poder acostarme con él? “Solo era sexo” pensé.