𝓟𝓮𝓪𝓴𝔂 𝓑𝓵𝓲𝓷𝓭𝓮𝓻𝓼 /𝑴𝒊𝒄𝒉𝒂𝒆𝒍 𝑮𝒓𝒂𝒚 [PAUSADA]

Capítulo 2

𝓐𝓾𝓻𝓸𝓻𝓪 𝓢𝓸𝓵𝓸𝓶𝓸𝓷𝓼

"—Tu le gustas"

Al escuchar lo que me había dicho Finn mientras estábamos ebrios en mi habitación no se me podía salir de la cabeza, pensé que al despertar no iba acordarme de nada. Pero estaba equivocada, me acuerdo exactamente de todo.

El ambiente de Michael y la mía ha cambiado demasiado, ahora soy yo la distante con el. Ósea, si se entera que se que le gusto sin duda no tardará en matar a Finn. Michael ha estado con muchas mujeres y hay una específica que es su novia se llama Charlotte, aún que no me importa meterme con nadie, no quiero intervenir entre ese noviazgo.

Si no le caigo tan bien a Michael, o, al menos eso pensaba, si arruinó su noviazgo con ella con más razón me va a odiar y esta vez sería en serio. No sería para engañarme, si me iba a odiar en serio.

Había estado evitando a Michael, cada vez que se acercaba yo me alejaba, en este momento estaba con los caballos con Charles. A el le encanta los caballos y a mi también, me encantan los caballos y todos los animales.

—¿Aurora? –La voz de Michael se escucha atrás de mí haciéndome voltear- ¿Qué hacés aquí?

—E-estoy con Charles –Me empecé a poner un poco nerviosa- ¿Tú qué hacés aquí? ¿No debes estar trabajando?

—Sólo estoy pasando por aquí –Se poné a un lado mío mirando los caballos- Son lindos

Sin duda me esta incomodando un poco esta situación, por lo menos antes podía estar con el y no sentirme tan incómoda —Sí, son... Lindos. ¿Por qué me estas hablando? Pensaba que te caía mal

—Me cae mal la idea de casarnos, tu me caes bién. Muy poco, creo

—Hambre –La voz de Charles hace que lo mire y deje de mirar a Michael-

—Vamos, Charles –Lo cargue y camine para adentro-

Sin duda Charles me salvó de esa incómoda escena. La que trabaja en la casa de Tommy le dio algo para comer y me senté a su lado esperando que terminara.

—Gracias por salvarme de esa incómoda escena, Charles –Acarició su cabello sin esperanza que me contesté-

Fue así, nunca me contestó y solo se quedó comiendo lo que le dieron. Apenas sabe decir una que otra palabra así que era muy obvió que no iba a responder.

—¿Qué hacés aquí, Aurora? –Grace se sienta a mi lado cargando a Charles-

La miro seria, pero luego sonreí —Solo estoy pasando un rato con Charles. ¿Hay algún problema?

Ella negó varias veces con la cabeza —Claro que no, pensé que ibas a estar con los demás en Birmingham

—¿Por qué? No trabajo con ellos y no tengo nada que hacer en esa ciudad

—Debes estar con tu comprometido

—Michael tiene su novia. Lo que Tommy quiere, nunca se cumplirá. A ninguno de los dos nos gusta la idea de casarnos

—Sabes, cuando conocí a Tommy trabajaba con la policía... –Antes que siguiera la interrumpi-

—Ya se lo que pasó, Grace. Me la cuentas millones de veces. Trabajabas con la policía para atraparlo, al final te enamoraste de el. Yo no tendré esa historia con Michael. Nunca nos vamos a enamorar –Tal vez yo no me enamore de el o el de mí, Finn estaba ebrio tal vez estaba diciendo estupideces y una de esas era que Michael estaba enamorado de mí-

—El futuro es impredecible, Auro. No sabes lo que pasará

—Pero sí se lo que pasará en estos momentos. Michael me va a odiar, no se va a quierer casar conmigo y yo tampoco. Odió que me metan en los asuntos de mi padre, de la vida que tiene mi padre. Yo no quiero esta vida, no quiero ser una gánster. No quiero ser una Shelby

—Ya somos dos. Yo tampoco quiero esta vida, no quiero que mi hijo tenga esta vida y quiero que Tommy la dejé. Y no serás una Shelby, serás una Gray

—Es lo mismo, Grace

—No es cierto, los Shelby son un família y los Gray son otra familia. Shelby es de unos hermanos, que son los más temidos y los Gray son dos personas que no son tan temidos como los Shelby.

—Para mi los Shelby y los Gray son los mismos. Son la mismas família –Me quedó jugando con las manos de Charles-

—Tal vez no conozca tanto a Michael como tu, pero lo que si se es que es un buen hombre. Y no importa si tiene novia, ustedes dos se van a casar. Nadie te obligara, será por tu propia cuenta porque en el fondo lo amas y el te ama a tí. Pero es un niño idiota que no lo quiere aceptar al igual que tu, pero tu no eres idiota. No lo aceptas por todo lo que te a pasado, con lo de tu madre.

—No quiero hablar sobre mi madre

—Lo siento, Aurora.

Nota de la Autora: El segundo capítulo de esta historia, espero les guste demasiado.