Capítulo 28

280 43 17
                                    

Amy

Saliendo de la Universidad me vine a recoger a los chicos de sus escuelas pues iremos al Supermercado. Así que ahora conduzco con Marc como copiloto y Zaid en los asientos de atrás, les cuento lo que paso hoy con Lía y ellos piden detalles emocionados felicitándome por defenderme y dándome concejos por si se presenta algo similar.

-Le hubieras partido la madre- se queja Marc- No entiendo porque Sean te detuvo.

-La violencia no es buena- justifico.

-Pero si se lo tenia bien merecido- habla Zaid- Mira que no me gusta insultar a las mujeres, pero se me ocurren varios para ella pues no tenia porque contar tu secreto- frunce el ceño demostrando cuanto aborrece la idea.

Pienso en la noche en la que fui a una fiesta con Sean y Sky en donde la estaba pasando muy bien hasta que ella me entrego esa bolsita con cocaína y me dijo cosas hirientes. Nadie aparte de Sky sabe eso y me alegro pues si los chicos lo supieran buscarían la manera de dañarla y eso es algo que yo no quisiera.

Llegamos al supermercado así que me estaciono, bajamos del auto y caminamos hacia la entrada. Marc toma el auto, pero Zaid se queja de que el lo quiere llevar y yo los ignoro adentrándome en lugar. Empiezo a ver que es lo que llevaremos, lo primero que tomo es tortillas de harina integral, pan integral normal blando y otro tostado, tostadas deshidratadas y otros cereales buenos para la digestión.

Los chicos no aparecen y a mi no me caben mas cosas en la mano por lo que tomo un carro que encontré solo en un pasillo, vacío las cosas que traigo en las manos dentro del carrito para después avanzar hacia los refrigeradores en donde agarro leche light, claras de huevo, yogurt griego entre otras cosas.

-Agarra lechitas con sabor- pide Zaid quien viene colgado del carrito que esta lleno de frituras, dulces, jugos y un montón de comida chatarra. Es paseado por Marc el cual le contesta que se baje del carro y lo haga el. Se acercan a mi y fruncen el ceño al ver lo que llevo yo en el carro.

- ¿Qué es eso Amy? - cuestiona Zaid con una mueca de asco.

-Comida saludable- los miro molesta- No vamos a llevar todo eso- apunto su carro.

- ¿Por qué no? - indaga Marc- Que cada uno compre lo que quiera y ya- niego con la cabeza.

-No- zanjo de mala gana- cuidar de nuestra salud física y mental es una prioridad.

-Si Amy, pero no hace falta dejar de comer rico- siento que los ojos de Zaid saldrán de su cara de tan abiertos que los tiene.

No dejan de quejarse y yo de explicarles que solo los fines de semana comeremos comida chatarra pues yo debo de seguir con mi proceso de mejora y los pienso arrastrar conmigo ya que somos un equipo lo cual Marc acepta y a Zaid no le queda de otra más que ceder también.

-Que sepas que habíamos agarrado tus chocolates favoritos- me saca la lengua.

-Puedes llevar algunas de esas cosas solo para comer los fines de semana- explico- pero solo la mitad.

- Piri sili li mitid-pone los ojos en blanco.

Terminamos de hacer las compras, pagamos y subimos todo al carro. Los dejo en casa ordenando que acomenden el mandado pues yo me tengo que ir a trabajar. Soy recibida por un montón de trabajo y cosas con las que me debo poner al corriente por lo que salgo de trabajar tarde.

Al día siguiente preparo unos burritos de pollo a la plancha con vegetales y tortilla de harina integral los empaco para cada uno y al de Zaid le agrego un jugo de los que compro.

Las clases avanzan con normalidad sin embargo lo que nos para nada normal es el actuar entre Sean y yo pues no está bien claro en qué términos estamos. Debemos de hablar por lo que le pido ir a tomar algo saliendo de clases. Así que ahora estamos sentados en un pequeño restaurante de jugos naturales y snacks.

-¿De qué quieres hablar?- me pregunta luego de que la mesera deja lo que ordenamos.

Lo pienso algunos instantes y ahora no me siento nada valiente pues no se como decirle que cada vez que lo veo quiero comerle la boca.

-Supongo que nos debemos una charla- me encojo de hombros- no nos vimos durante 4 meses.

-Si- sonríe nostálgico- era lo mejor- se vuelve a hacer un silencio un tanto incomodo en el que solo nos vemos de reojo varias veces.

- ¿Aun te gusto? - pregunto en un susurro casi inaudible con la mirada en el piso. Sus dedos viajan inmediatamente a mi mentón, lo levanta obligándome a verlo.

-Me encantas- afirma con una mirada profunda que transmite demasiado.

- Y tú a mi – asiento repetidamente pues la ilusión a llenado cada parte de mi ser.

Nuestros cuerpos están inclinados sobre la mesa, llevo mi mano a su mejilla y la acaricio por lo que el hace lo mismo moviendo la mano que tenía en mi mentón hacia mi mejilla.

-Entonces- muerde su labio inferior- ¿Quieres tener una cita conmigo?

-Si- retiro mi mano de su rostro-Bien- hace lo mismo- ¿estas disponible esta noche? - asiento- paso por ti a las 7 ¿ok?

-De acuerdo- sonrió ampliamente.

Platicamos sobre como me fue en el centro, que hizo el durante ese tiempo, entre otras cosas antes de que yo me tenga que ir al trabajo. Durante el camino le marco a Sky para contarle sobre la cita y pedirle de favor que arregle ella por lo que al salir de trabajar me voy directo a su departamento en donde hace magia conmigo.

Uso unos jeans blancos de tiro alto junto con un crop top negro en la parte de arriba que resalta mi busto. Dudamos sobre que calzado debo de usas y al final de cuenta me decido por unos botines cortos negros.

- ¿A dónde crees que me lleve? - le pregunto.

-No tengo idea- responde- a lo mejor a cenar.

Pongo una mueca pues la idea de ir a un restaurante no me convence, pero no tengo tiempo de pensar en otro sitio porque el timbre suena anunciando la llegada de Sean.

Dejándote Ir...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora