Capítulo 23.

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Llegamos a un hotel y me sentía bastante nerviosa.

Inyeop estaba loco...literalmente.

No tardó mucho en aparecer con las llaves de una habitación mientras sonreía.

—Realmente acabas de hacer la mayor locura de la historia...

Dije riendo.

Este asintió y nos subimos en el ascensor.

—Por tí haría cualquier locura.

Dijo casi en un susurro.

Yo decidí hacer como si no hubiese escuchado lo que acababa de decir.

Estuvimos en silencio hasta que llegamos a la planta 5 y nos dirigimos a la habitación.

Una vez habíamos entrado todo estaba limpio y ordenado.

En mi cabeza me reí al pensar lo poco que duraría aquel órden.

Inyeop se empezó a desnudar y a ponerse una toalla alrededor.

Yo esquivé la mirada en cuanto se acercó a mí.

—¿No te apetecia ducharte?

Dijo con una sonrisa pícara.

Yo rodé los ojos y me acerqué más a él.

—Prefiero darmelo sola.

Este se río un poco y se separó.

—Tú te lo pierdes.

Dijo para meterse en el baño.

Suspiré algo aliviada pero mi yo interior quería...estaba en un momento crítico de necesidad pero debía mantenerme fuerte.

Nuevamente volví a mirar mi móvil y me mordí el labio inconscientemente.

Mierda...MIERDA.

Puse el móvil en la mesilla y me levanté de la cama decidida.

Me importaba una mierda, ¿Desde cuando le das tantas vueltas a las cosas Yeeun?

Abrí lentamente la puerta del baño y comencé a desnudarme.

Sonreí un poco y abrí lentamente la cortina para ver a un Inyeop con los ojos cerrados mientras se aclaraba el cabello.

Le toqué los hombros y este se giró algo confuso.

Me miró de arriba a abajo y sonrió relamiendose los labios.

—¿Al final te pudo la tentación Jang?

Dijo acercándose a mi rostro.

Yo hice lo mismo y sonreí.

—Puede...o puede que solo quiera ahorrar agua...

Este me agarró de la cintura y tiró levemente de mi para pegarme más a él.

Podía sentir su miembro rozar con el mio.

Le agarré del cuello y tiré un poco para juntar nuestros labios mientras el agua caliente caía sobre ambos.

Inyeop no dudo ni un segundo en intensificar el beso.

Se separó lentamente de mi y sonrió.

—Vamos a terminar de ducharnos anda.

Dijo para poner un poco de champú en su mano y comenzar a masajear mi   cabeza suavemente.

Yo cerré los ojos algo divertida.

No era propio de Inyeop comportarse así...siempre era violento desgradable y un mujeriego...

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