Capítulo 31.

171 19 2
                                    

En el funeral de mi madre estuvieron todos mis amigos, nuestra mismísima banda y por supuesto Inyeop.

Mi padre solo estaba en silencio mirando la imagen de mamá con los ojos llorosos.

Yo no pude evitar no llorar nuevamente pero no iba a derrumbarme tenía que ser fuerte.

Me giré levemente para mirar a Inyeop y este solo asintió.

Inconscientemente hice contacto visual con Yibo quién estaba mirándome también apenado y algo confuso.

Cobra estaba dándole palmaditas a este en la espalda.

Fue una despedida dolorosa pero poco a poco la gente se fue yendo a sus casas después de dar el pésame.

Yo me quedé sentada en el suelo mientras seguía mirando la foto de mamá. Aquella sonrisa deslumbrante que fue apagada...

Alguien se sentó a mi lado haciendo que le prestase atención.

—Deberíamos irnos nosotros también Yeeun.

Soltó mi padre aún dolido.

Yo solo apoyé mi cabeza en su hombro y suspiré agotada.

—Solo...quiero quedarme un rato más aquí. Dije con la voz debilitada.

No tardó en aparecer Inyeop por la puerta mirándome a mi y a mi padre.

Este se levantó y se acercó a este susurrando algo que no alcancé a oír.

Inyeop se arrodillo delante de mí y me miró fijamente tocando mis manos suavemente sin decir nada solo acompañandome.

Estuvimos bastante tiempo ahí en silencio hasta que el encargado vino para avisarnos que tenían que cerrar ya.

Nos fuimos ambos andando tranquilamente por la calle sin decir nuevamente ninguna palabra. Agarré suavemente la mano de Inyeop entrelazandola y provocar un leve cosquilleo para ambos.

Le miré y este sonrió un poco para detenerse.

Sus ojos se llenaron de lágrimas pero aparto su mirada para luego aclararse la voz.

Tiró suavemente de mi y seguimos caminando hasta llegar a mi casa dónde nos despedimos.

Lo miré alejándose y así provocar un nuevo suspiro que salió inconsciente de mi boca.

[...]

Después de un mes la cosa iba un poco mejorando aunque Inyeop y yo no manteniamos la misma relación que antes pero se sentía bien tenerle cerca.

Aún seguíamos intentando sacar mas pruebas para culpar al padre de éste.

Últimamente ni siquiera pasaba las ncohes ahí, prefería dormir en su nuevo apartamento.

—¿Y si simplemente se lo decís a la poli?

Soltó Ah Ra algo preocupada y yo negué.

—Es complicado Ah Ra, tiene que haber algo más...

Me levanté de golpe causando un leve susto a Ah Ra.

—Mi padre.

Solte sorprendida por aquella brillante idea.

Mi padre podría saber bastantes cosas incluso donde vivía mi madre anteriormente después de huir.

Corrí a casa y me choqué con Yibo que estaba bastante...serio.

Tragué saliva y este me miró analizandome.

—¿Donde vas con tanta prisa Yeeun?

—A casa...verás tengo que resolver algo y eso.

Unpredictable Donde viven las historias. Descúbrelo ahora