Entre Música y Letras

»»----- Uno -----««

Asher

Me encontraba sentado unos cuantos lugares detrás de ella.

Estábamos en clase de literatura y ella tranquilamente leía en voz alta. Todos los días traía un libro, había perdido la cuenta de tantos que eran. Aún así varios de ellos no duraban más de una semana... 

¿En serio piensas en eso? Bueno, es fascinante ver como ella lo disfruta, en un segundo deja de estar aquí, y veo sus ojos, esos verdes y expresivos ojos con un brillo especial y único que solo tiene mientras lee... ¿Por qué son tan encantadores?

He tenido varias relaciones, todas diferentes y especiales a su manera, pero ella simplemente me dejó sin palabras.

—Woods, deje por favor de ver a su compañera y concéntrese en la lectura, usted tiene suficientes problemas en esta clase como para que se distraiga —varias mujeres voltearon a verme, y ella igual... No muy contenta que digamos— Alice por favor continúe con la lectura.

Tras un pequeño "sí maestra" continuó, para después darle paso a los demás. Su voz expresaba perfectamente cada cosa que venía del libro. Ahora con la mirada baja, intenté concentrarme en el libro hasta que sonó la campana.

—Lean hasta la página 300 y hagan su reporte, tienen un mes para entregarlo —varios pusieron quejas— Si quieren esperar pueden hacerlo en parejas, sin embargo yo las escogeré.

Algunos se fueron, pero la mayoría se quedó. Poco a poco se fueron juntando, por suerte bastante balanceadas a mi parecer. Solo quedábamos yo y...

—Alice sé que te gusta trabajar sola, pero a Asher le servirían algunos puntos —Dios, no sé cuándo me porte bien, pero prometo hacerlo siempre si así son las recompensas— Tú también tendrías un beneficio.

—De acuerdo —se veía calmada, pero ya fuera por tener que trabajar en equipo conmigo o por la interrupción, se veía... ligeramente apática.

—Muy bien, ahora todos se pueden retirar—me levanté con los demás para dirigirnos a la salida—Lo siento Alice, tengo una junta y esta vez no te podrás quedar aquí. ¿Por qué no aprovechas para quedar de acuerdo y hacer el trabajo con el Señor Asher?

—Perfecto... —y tras despedirse se dirigió a mí— Pásame tu número, ¿Qué día tienes libre? Son bastante más páginas que otras veces y no quiero que lo dejemos para último momento... Y tampoco quiero regalarte calificación —Lo último lo dijo tan bajo que me costó escucharlo. ¿En serio tiene tan mala imagen de mí? Nunca habíamos hablado, mucho menos trabajado juntos. No sé de donde tiene esa imagen de mí. Debo aprovechar esta oportunidad, puede que después de esto no me vuelva a hablar, o más bien intente evitarlo.

—Si me esfuerzo, puede que lo acabe el domingo, ¿tienes el lunes libre? Podríamos hacerlo en la biblioteca.

—Bien, hasta el lunes —Y en el mismo instante siguió su camino, probablemente al patio a seguir leyendo el ladrillo que carga de lectura.

—Asher, estamos armando los equipos desde hace rato, ¿no vendrás? —Estábamos en receso y usualmente jugamos basquetbol en este.

—Lo siento, era lo del proyecto, iré en un momento Will —Volví la mirada hacia donde ella se había retirado.

—Se nota que te gusta.

—¿De qué hablas? —Está hablando en serio ¿fui tan obvio?

—Soy tu mejor amigo, te conozco mejor que nadie —Cruzó su brazo sobre mis hombros para recargar su peso— Y tu cara de idiota es de aún más idiota.