»»----- Dieciseis -----««

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Nadie realmente quería irse, así que aprovechamos una red y el balón que hace unos momentos estaban usando Dalila y los demás. Jugamos durante un tiempo voleyball. Aprovechando que, a pesar de ya haber anochecido, el ambiente todavía se mantenía cálido.

La parte de las parejas, por otro lado, resultó ser un problema. Will al instante se autodenominó el equipo invencible con Asher como compañero. Y Emma al momento literalmente saltó a Dalila para escogerla. Y hubiéramos quedado así, de no ser porque Asher dijo que no sería justo. Por más que no nos gustara, había que admitir que los equipos mixtos serían mejores… Y más divertidos. Ahí, claro, empezó una discusión otra vez.

Entre que no se decidían y como sería más justo que quedáramos por cuestión de… ¿Altura? ¿Fuerza? ¿Conocimiento? Realmente no entendía, pero definitivamente era entretenido ver como Dilan y Asher intentaban destrozar el argumento del otro, no entendía otra vez el porqué (¿Algún día podré entenderlo?) pero de un momento a otro nos voltearon a ver y los otros empezaban a cansarse de eso.

—Will, haz equipo con Alice, Asher quedará con Emma y yo con Dalila.

—¡Eso es, Reina! Los hombres no saben lo que quieren, rayos, yo solo quería jugar. —Dalila se acercó a Dilan, y de un momento a otro, la competitividad nata de Dalila se logró ver. Ambos juntaron su diestra en algún tipo de saludo que… ¿De dónde lo sacaron y por qué lo conozco? No tengo idea ¿Por qué no puedo describirlo? ¡Es muy raro!— ¡Hay que derrotarlos!

—Así se habla.

—Asher, te encargo mi supervivencia. —Emma se veía tranquila, si bien no era mala en los deportes, tampoco podríamos decir que es su fuerte. Él asintió y chocó los puños con ella.

—Que yo recuerde. —Empezó Will, aún estoy debatiendo si tengo suerte o me tocó la peor pareja de todas. Continuó mientras me escaneaba de arriba a abajo.— Eres buena para adaptarse, haremos eso, intentaré recibir todo lo que no puedas.

Bien, no será tan malo… No sirve mentir. ¿Qué hay de divertido en hacer nada? Él debió percibir mi incredulidad, porque al instante volvió a hablar.— Por más que quieran, no podrán ganarnos, somos el mejor equipo. Y esto es un juego de equipo, no sería divertido si lo hiciera solo.

Bien, al menos ganaremos. Le sonreí de vuelta y comenzamos a ver cómo iniciaremos. Dalila se veía muy, muy emocionada por jugar. Y Dilan no se quedaba atrás. A pesar de su semblante tranquilo, se veía tan, o más, emocionado que Dalila.

Al final, empezamos nosotros contra Dilan y Dalila.

—No creas que tendré piedad, Alice.

—No esperaba que la tuvieras. —Mentira, obvio que quería piedad, mi amiga es una bestia en los deportes.

—Will, esta vez te derrotaré.

—Ya lo veremos, Dal. —Con una cara burlona por parte de Will, y la concentración en su máximo esplendor por parte de Dalila, comenzamos esto.

El único que tenía algo de piedad, y eso cuando veía que ni de chiste Will podía recibirla, era Dilan. ¿Will y Dalila?

Diosito, permite que salgamos vivos si siguen jugando así. Un par de veces llegué a sentir algo de incomodidad en las muñecas.
En un ligero descuido, Dalila lanzó con fuerza la pelota. Iba a ir por ella, claramente Will se atravesó, prácticamente se lanzó, y terminó por regresarla… regresarla a medias, porque llegó a la red y no pasó de ahí. Will en el suelo maldijo y se levantó.

—¡Jamás le podrán ganar al equipo buena maravilla explosivo escuadrón alfa lobo! —Dalila nos gritó con orgullo, burlándose muy explícitamente de Will.

Entre Música y LetrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora