PRÍNCIPE. ©️

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑰: 𝐸𝑙 𝑃𝑟𝑖𝑛𝑐𝑖𝑝𝑒 𝑦 𝑒𝑙 𝑒𝑠𝑐𝑙𝑎𝑣𝑜.

Su cuerpo recibía golpe tras golpe.
Gruñidos del dolor era lo único que obtenian de respuesta, estaba enfadado con el mismo por haber actuado tan estúpido, moriría en mano de estos violentos hombres y luego irán tras su madre y el no podía hacer nada al respecto. Y cuando iba a recibir otro golpe fueron interrumpidos por la puerta que se abrió bruscamente.

-¡Louis!.- Vincent entró muy enojado e irritado. Aunque dudaba que ese hombre sea capaz de mostrar otra expresión que esa.

Louis se alejó suspirando molesto.

-Hola padre, estoy bien ¿y tú? Me alegro.-Reclamó el muchacho sentándose en su sofá, enojado por la actitud asquerosa de su padre hacia él.

-¿Has sacado algo de información de esta bolsa de basura?-Lo ignoró por completo y fue directo, preguntando lo que realmente le interesaba.-¿Te ha dicho si es él hermano de Alexander?.

-¿El hermano?.-Preguntó incrédulo, corrió su cabeza y miró por detrás de su padre a él, supuso que mirando su apariencia.-Creí que querías que le saque información, pero si es el hermano de Alexander...

-Eso harás.-Lo detuvo, lo ordenó de tal forma que hasta él sintió la obligación de obedecer.

El ojiazul pasó de ser a un hombre con actitud y autoridad hasta que Vincent apareció, ahora parecía un cachorrito perdido y nervioso, desde lejos se le notaba la incomodidad y sobre todo la frustración.

-Creo que tenemos una muestra de sangre en la base de Alexander, podríamos hacer una prueba de ADN de hermandad.-Habló Louis, caminando hacía él y rodeandolo con sus pasos, pensativo.-¿Ya le has avisado a Bruce?.

-No, y no sabrá de él. Nosotros nos encargaremos.

El pánico inundó en su cuerpo, sólo rogaba sobrevivir, pero no creía lograrlo, no tenía ninguna información valiosa que entregarles, lo torturarían hasta el cansancio y cuando caigan a cuenta de que no tenían motivo por el cual dejarlo vivo, lo iban a descartar sin ni siquiera pensarlo.

-¿No puede simplemente llevártelo?, haz lo que quieras con él. Nunca lo quise en el primer lugar. Es tuyo, tu y tus hombres pueden sacarle toda la información que quieran, yo no quiero ser parte de ello.-Louis se resignó con amargura, jugaba con el pliegue de su sudadera para evitar mirar a su padre.

-Maldito cobarde. ¿Acaso te da miedo?, ¿Eres un maldito marica?.-Vincent lo provocó con los insultos.

-¡No!.-Louis reaccionó exaltado.

-Estonces no actúes como uno. ¿Serás un hombre?.

Louis gruñó de respuesta.

-Soy un hombre.-Le respondió, su ceño estaba fruncido y una vena de su cuello resaltaba con furia.

-Genial, entonces muéstrame hijo, muéstranos a todos quién realmente es Louis Rider.-Se acercó a su hijo que se encontraba sentado en el sofá sin ninguna expresión en su rostro,no quería ser parte y no le interesaba la situación en absoluto.-Muéstranos porqué te tenemos que respetar hijo mío, se el hombre.-Alentó el padre del muchacho. Puso su mano en el hombro dando dos golpes en este en modo de animo.

Louis se levantó frotando su cien frustrado y se acercó lentamente y cuando se inclinó le susurró:-Estás jodido.

Podía ver la desesperación en la mirada de los ojos verdes, como un corderito sabiendo que iba directo al matadero.

Los hombres lo levantaron del suelo sentándolo en una silla y lo ataron a ella. No forcejeó, no tenía sentido, sería una pérdida total de energía, no había escapatoria de ese lugar y lo había aceptado.
Louis miraba extraño y sorprendido como el muchacho no se oponía a ser torturado. Los ojos verdes de Noah estaban clavados en él con odio, y no podía evitar sentirse culpable. Él no quería nada de esto, este era su trabajo y debía cumplirlo.