𝐌𝐞 𝐄𝐧𝐬𝐞𝐧̃𝐚𝐬𝐭𝐞...

06. 𝐒𝐨𝐥𝐞𝐝𝐚𝐝

Narra Cinco

Y así pasaron dos semanas, no he hablando con nadie en este tiempo, salvó por los maestros.

Me concentro en la escuela, estudiar para algunos laboratorios y en todos saco un 10.

Los maestros se sorprenden de mi inteligencia, piensan que soy un niño prodigio, lastima que no es así, todo lo que se es porque tuve demasiado tiempo de estudiar en el apocalipsis.

Algunas chicas me coquetean o intentan llegar a "algo más" conmigo, me invitan a salir pero yo simplemente las rechazo.

Kendall no me habla para nada, no me quejo pues yo se lo pedí, aunque algunas veces es aburrido estar ahí sentado sin hacer nada ni platicar con nadie.

-Cuéntame ¿cómo vas en la escuela? -pregunto mi hermana Vanya-.

-Bien, me gusta demasiado.

-Me alegro ¿y ya tienes amigos?

-Ou si, deberías invitar a tus amigos a la casa -dijo Klaus emocionado mientras aplaudía rápidamente-.

-Si, eso sería genial Cinco -apoyó Allison-.

-Podrían pasar un buen rato y así nosotros podríamos conocerlos -siguió Diego-.

-La verdad es que, no tengo amigos -confesé tranquilamente,-.

Todos se quedaron en silencio mientras me miraban confusos.

-Y no tienes amigos por qué...

-Porque no quiero tenerlos, no los necesito.

-Cinco, no te cierres en decir "no los necesito" -imitó mi voz Klaus-.

-Concuerdo con Klaus, deberías conocer gente -me señalo-.

-Cinco... Solo piensa, estuviste muchos años solo en el apocalipsis ¿Quieres estar solo nuevamente? -dijo Luther-.

Su comentario me dejó pensando.

¿Quiero eso nuevamente? 

*****

Miércoles por la mañana, me encontraba caminando por los pasillos de la gran escuela en dirección a la aula de calculo. 

-Buenos días -saludé serio entrando al salon-.

Al llegar a mi lugar pude visualizar a Kendall, quien miraba su reflejo por la pantalla de su celular y arreglaba su cabello. 

Me senté a su lado y ella me ignoro por completo, al igual que yo, lo mismo que estas dos semanas.

¿Quieres estar solo nuevamente?

El comentario de Luther comenzó a resonar por mi mente y la respuesta ante ese pensamiento es no... no quiero vivir en soledad nuevamente, quiero que mi vida sea totalmente diferente a la que tuve en el apocalipsis y el tiempo trabajando en la comisión.  

-Hola Kendall -saludé amable-. 

-¿Hola? -aplicó brillo labial a sus labios-.

-¿Como has estado? 

-Bien? Cinco que quieres? -pregunto y me miro con un semblante serio-. 

-Entablar una conversación contigo -Alce los hombros-.

-Si bueno, le recuerdo Hargreeves que usted CLARAMENTE dijo -aclaró su garganta-. No me dirijas la palabra.

-Si... en cuanto a eso... -juguete con mis dedos- cambie de opinión. 

-Y ahora solo porque cambiaste de opinión en cuanto hablarme ¿yo debo olvidar lo patán que te comportaste y ser amigos? -claramente estaba enojada-.

-Se escuchaba mejor en mi cabeza... lo siento si?

-Sientes ¿que? -pregunto inocente-. 

-Siento comportarme como un patán, mira... yo... la verdad -titube-. 

Claramente no sabia como justificar mi comportamiento inaceptable, no podía decirle "estuve la mayor parte de mi vida solo en un apocalipsis, mi única amiga y novia fue una maniquí, no tengo ni idea de como socializar". 

Si le digo eso me tomaría por loco.

-Dame una buena excusa para justificar tu comportamiento. 

-Es complicado Kendall -suspiré y baje la mirada-. 

Ella se quedo en silencio, mejor dicho ambos nos quedamos en silencio, solo podía sentir su mirada clavada en mi.

-Bien, te perdono... con una condición -alzo sus cejas y apachurro sus labios-. 

-Te escucho. 

-Hoy debes acompañarnos en el descanso a la cafeteria, para almorzar y charlar -hablo entusiasmada-. 

En este tiempo pude notar que Kendall es muy amable con la gente, no le gusta hacerla sentir mal amenos, que se lo merezcan. 

-¿Acompañarnos? -pregunto confundido y alce las cejas-.

-Si, Dariana ira con nosotros, siempre almorzamos juntas y apartir de ahora eres parte de nuestro pequeño grupo social. 

-No prometo llevarme bien con ella, sin embargo hare un esfuerzo -asentí levemente con la cabeza-.  

-Sabes, me he dado cuenta que los descansos simplemente compras tu almuerzo y regresas al salon -cambio de tema mientras sacaba algunas cosas de su mochila-.

-Si bueno... como ya dije no soy muy social y me causa aturdimiento estar en la cafeteria. 

-Eso se acabo... yo te ayudare a socializar y poder estar tranquilo en la cafeteria y otros lugares con mucha gente -sonrió y saco su celular-. 

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Hola bellas

¿Les esta gustando la historia? 

¿Creen que Cinco y Dariana puedan tener una amistad? 

¿Como le sentara este nuevo cambio a Cinco? 

No olviden votar si les gusto el capitulo y comenten, amo sus comentarios. 

Bye