Capítulo 5: " Un Futuro Músico"

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Andrew Kreiss

Una melodía me despertó, es extraño son las 8 de la mañana, me levanté y empecé a hacer el desayuno, pero ya sé quien toca, al parecer Antonio tiene un gusto por la música desde pequeño, eso hace que se vea mas adorable.

Andrew: ¡Antonio, el desayuno!- empecé a servir y en poco tiempo estaba en la mesa, en todo el rato que comimos estuvo tranquilo, cuando ya terminamos, él siguió con su violín mientras yo me arreglaba.

Desde que Antonio se convirtió en un niño, adolescente, bueno, yo le digo niño, porque es un niño para mi,  descubrí que es algo sensible, no en el sentido en el que no se le pueda negar algo, solo digo que percibe mucho las cosas, y la forma de expresar orden, tranquilidad y amor es tocar su violín, es lo que más le gusta, y veo que de verdad lo hace feliz, lo dejo practicar todo lo que quiera, con las pausas del desayuno, el almuerzo y la cena, porque después de comer se va a dormir, y si, duerme conmigo, al principio pensé que le iba a incomodar, pero no, le gusta, eso no me lo esperaba.

El día de hoy empezó normal, revisaba mis cosas y me di cuenta de que mi pala ya no está tan bien como estaba, se oxidó, y lo raro es que no debería estar así, miré mis demás palas....no quiero decir más, me toca ir al pueblo si o si, no tengo opción, al menos si puedo conseguir unas idénticas...

Andrew: Antonio, voy a salir, ¿necesitas algo o estás bien?- miró su violín, después pensó un tiempito.

Antonio: Estoy bien, que te vaya bien- besó mis labios, esa costumbre tampoco se la quitó, quise evitarlo pero no pude, mi fuerza de voluntad en estos casos es casi nula.

Salí de la casa de una vez, empecé a mirar en donde podrían hacer la replica de mis palas, me tocó traerlas todas en una maleta grande que tengo, menos mal aún la conservo o no sabría que hacer, después de casi cinco horas caminando, hasta me tocó hacer una pausa y merendar algo, logré encontrar un lugar en el que me las dejarían como nuevas, y la mejor parte es que puedo venir en la noche a recogerlas, me dijeron que debo mantenerlas alejadas del sol y la humedad, en mis palabras, me toca dejarlas en mi armario, no tengo un lugar seguro desde que Antonio es un niño, corre por todos lados, es un lío pero puedo controlarlo.

Regresé corriendo a casa, le dejé comida a Antonio, pero hay veces en las que no come a menos que yo le diga, y me preocupa que esté aguantando hambre por ensayar su bella música, entré y lo primero que vi fue a Antonio almorzando, inmediatamente me calmé.

Antonio: ¡Andrew!- me abrazó- ven a comer conmigo, te extrañé- tan adorable.

Andrew: Gracias, en la noche iré por mis palas, así que no quiero que te acuestes tarde, ¿de acuerdo?- asintió con la cabeza, a la hora de dormir si es puntual.

En la noche

Antonio

Estaba terminando de ensayar como era habitualmente, pero cuando una nota sonó extraño, pensé en volver  a ensayar esa parte....toqué las cuerdas...¿por qué no siento una cuerda?, miré el violín y rompí la cuerda de mi, nooo, ¿qué hago?, no sería capaz de pedirle el favor a Andrew, me da mucha pena, además él hace mucho por mí todos los días, sería una carga extra y no quiero eso para él, dejé todo y me acosté temprano..

Andrew: ¿te vas a dormir tan pronto?

Antonio: Am, si, me dio sueño y pensé en terminar antes- me dio un beso en la frente y me fui a dormir, no sé como voy a hacer mañana porque me la paso ensayando todo el día, aunque puedo leer un libro de música y decir que quiero investigar sobre una canción o algo así, ¿pero en qué estoy pensando?, se va a dar cuenta, bueno, esperaré a mañana a ver como pasa el día, no quiero pensarlo...

Al día siguiente...

Desperté, y fui a la sala de música a ver que se me iba a ocurrir para que Andrew no note lo del violín, lo miré una vez más y, las cuerdas estaban enteras, corrí a la habitación y lo desperté.

Antonio: Andrew...- abrió los ojos, jamás había visto algo mas bello en mi vida que verlo así- ¿qué le pasó a mi violín?

Andrew: Cuando fui a buscar mi maleta, resultó que estaba en tu cuarto de música, vi que a tu violín le faltaba una cuerda y compre 11 por si volvía a pasar- me acarició la cabeza- no te preocupes, la próxima dime las cosas, no tengo problema, después de todo, yo estoy cuidando de ti hasta que vuelvas a ser adulto- me acosté a su lado y pensé en dormir más con él.

Antonio: Gracias.

Hasta el próximo capítulo....

Back to Youth- Especial de Halloween Identity V IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora