06.

267 49 1
                                    

El aire de otoño empezaba a sentirse en la cuidad y ahora era yo el que evadía a Baji, me escondía en la biblioteca para evitarlo ya que el ni de chiste entraba ahí y pasaba mas tiempo en la casa de Hina o de Takemichi para no encontrármelo en el edificio. 

Se que en cualquier momento tendremos que hablar pero no estoy listo, aun sigo como en ese desgaste emocional y estoy seguro que si tenemos esa platica voy a terminar peor. 

Así que lo seguiré evitando, al menos hasta que sienta que no me pondré a llorar como la ultima vez.

"Entonces, como me peino?" Takemichi me llamo mientra el se miraba en el espejo con un cepillo en la mano.

"Todo menos tu peinado de la secundaria" estábamos en la casa de Hina, yo hacia un trabajo en mi computadora al igual que Naoto en lo que Hina terminaba de pedir una pizza para cenar. "Era horrible"

Takemichi me miro mal, Naoto rió y siguió en lo suyo. "Tu peinado de aquel tiempo tampoco es uno de los mejores, Fuyu" me contesto mientras solo despeinaba su cabello para que se viera algo rebelde.

"Te ves bien Takemichi" le alago Hina después de colgar la llamada "A que hora se quedaron de ver Mikey y tu?" 

"A las ocho, iremos a la feria"

Nuestra amiga chillo de emoción al igual que Takemichi. "Crees que te bese en la rueda de la fortuna?" 

"No lo se, es apenas nuestra tercer cita, pero..." el rubio acomodo unos mechones de cabello "Espero que si lo haga, si no lo hace tendré que hacerlo yo"

"Uh, atrevido" le vacilamos los tres. 

( ... )


Takemichi se fue, Hina salio con sus amigas de clase y Naoto y yo nos quedamos en el departamento que compartía con su hermana.

Después de que aquel par se fue nos aburrimos de estar pegados a las tareas y para aligerar el ambiente se saco una botella de vino, dos copas y una bolsa de volitas de queso, era para pasar el rato ya que ambos aun teníamos tareas que hacer. Pero como siempre, los planes se desviaron y terminamos acabándonos la botella, yo no me sentía borracho, solo un poco mareado. 

"Fuyu-" me gire a ver al azabache y hice un pequeño ruido con mi garganta para darle a entender que le prestaba atención. "Se nos acabo el vino" el hizo un puchero y me dio tanta ternura porque su boca estaba manchada de queso.

"Oi" exclame "Vamos por mas" el apoyo mi idea y nos empezamos a levantar, poniéndonos nuestro abrigo, estaba fresco allá fuera. 

"Compremos mas volitas de queso también" Y así salimos, al dejar el edificio caminábamos agarrados del brazo porque casi me caigo al pensar que un escalón estaba muy lejos. No se de que hablamos todo el camino pero al parecer era algo muy interesante porque no paramos hasta llegar a nuestro destino, ambos recorrimos la tienda en busca de una botella de vino y la bolsa de volitas con queso.

"Y si llevamos una de queso y otras picantes?" me pregunto Naoto, arrastrando algunas palabras. "Es que ya fue mucho quesito" 

"Si, si. Tienes razón" cuando extendí mi mano para tomar la bolsa de volitas picantes una mano se interpuso. Fui de su mano hasta su cara y me encontré a una chica con pintas de querer robar mi bolsa. "Uh, son mías." 

"Yo las tome primero" se rió, que fea risa tiene, es chillona y parece a la de una bruja.

"Oye tu risa es muy fea, te escuchaste como una bruja" Oh- "Lo dije o lo pensé?" 

"Lo dijiste, idiota" maulló molesta.

"Oiga, su risa si es fea" le dijo mi azabache amigo y tomo la bolsa, comenzando a caminar a las cajas para pagar, jalando de mi brazo.

"Oye que te sucede, maldito" una cuarta voz se hizo presente, Naoto y yo seguimos sin voltear hasta que a el le tomaron del hombro, empujándolo. Casi caíamos ambos por ese empujón.

"Naoto ya me calenté" me gire y le solté un derechazo al desconocido sin ver quien era.

"BAJI" chillo la voz de bruja.

A  caray.

Yo mire sorprendido a Baji y a la chica que tomaba su rostro, examinándolo. Por lo general, estando bajo las influencias del alcohol no mido mi fuerza, le partí el labio a Baji.

La risa de Naoto resonó por el lugar haciendo que los tres lo miremos. "Fuyu eso estuvo genial" el volvió a reírse y me contagio de su risa, en el pasillo eramos dos No tan borrachos y un chico junto a una chica siendo agredidos por los dos No tan borrachos. 

Todo fue divertido para Naoto y para mi hasta que el gerente de la tienda llego con un guardia de seguridad al pasillo y nos descubrieron. 








Holis¿

Holis¿

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝐁𝐨𝐲𝐟𝐫𝐢𝐞𝐧𝐝Donde viven las historias. Descúbrelo ahora