23.

112 15 0
                                    

Febrero acabo en un pestañear y llego marzo, un mes que con el pasar de los día se volvió pesado.

Me tope a Keisuke teniendo una discusión con su madre en el pasillo de nuestro piso, me detuve en cuento escuche sus voces en tonos de molestia. Maldije internamente a todo el universo por mi inoportuna suerte. No quise revelar mi presencia y me escondí detrás de una pared, saque mis audífonos para ignorar la riña entre mi novio y su madre, justo iba a ponerle play a mi playlist hasta que oí como me mencionaban.

Recargado en la pared escuche a la madre de Baji decirle de forma tajante "Deja ya tu teatro y regresa a casa, piensas que estarás aquí con el para siempre? Ese chico a lo que me has dicho de el, tiene metas, el sabe lo que es y lo que quiere... ¿Acaso crees que esperara por ti, por alguien que ni quiera sabe ni como se siente o quien es, alguien con tan poca perseverancia y que con la mínima piedra en el camino tira todo por la borda?"

Después de eso Kei tenia mal humor, comenzó a evitarme y cuando le pedía explicaciones solo me respondía un "No te evito, solo estoy algo cansado". Me pidió que dejara de acompañarlo a sus citas semanales con la psicóloga, inclusive empezaba a ignorarme en la universidad.

Nos estábamos distanciando y yo solo miraba como su mirada se apagaba cada vez mas.

A finales de mes yo solicite una cita con la psicóloga, no se lo mencione a nadie solo fui y ya. Hable tanto ese día, le termine pidiendo algún consejo que fuera de ayuda. Ella sugirió que lo hiciera hablar de como se sentía, que saliéramos.

Tuve la creencia que esa sugerencia me serviría de ayuda pero olvide mencionar que era de Keisuke del que hablábamos, pues cada que intentaba hacerlo abrirse conmigo me construía una enorme muralla de acero. Al final no quise rendirme y seguí de persistente cada que podía claro, pues intentar que mis notas siguieran estables y buscar soluciones al estado de la persona que ocupa un lugar enorme en mi corazón parecía trabajo de tiempo completo.

Esos intentos no obtuvieron el resultado que esperaba pues con cada insistencia Baji parecía irritarse mas y esto hizo que dieran inicio a las discusiones entre nosotros.





( ... ) 




Camine por los pasillos solitarios de la universidad, hoy como ya se esta haciendo costumbre, llegue solo. Iba a la oficina de la rectora, me mando llamar. No miento, siento que la he cagado estas ultimas semanas y siento que probablemente me llame para que me expulsaran o algo así.

Iba muy desanimado con la cabeza abajo, cuando una voz femenina me hizo levantar la vista del suelo.

"Joven Matsuno, justo lo estaba yendo a buscar" era la rectora, iba con un traje gris opaco de dos piezas, bien peinada y sus tacones de punta que resonaban por los suelos. Era como una cabeza mas baja que yo pero lo que lo faltaba de altura lo recompensaba con todo lo demás en ella. "Bueno, ya que estamos aquí le iré comenzando a platicar del porque le hable en lo que vamos a mi oficina" yo mordí mi labio nervioso, mas bien ansioso.

"¿Me va a expulsar?" se me salio, eran mis nervios hablando por mi mismo. Ella solo rió bajo, no supe como interpretar su risa, eso significaba algo bueno o algo malo?...

"Para nada, le vengo a mostrar una propuesta magnifica para su futuro" suspire aliviado, le seguí el paso ya con mas calma "Sus notas han sido impecables desde que ingreso a esta institución, eso no se me ha pasado por desapercibida en lo absoluto" me miro de reojo mientras seguíamos caminando. "A mi ni a los programas de becas extranjeras"

𝐁𝐨𝐲𝐟𝐫𝐢𝐞𝐧𝐝Donde viven las historias. Descúbrelo ahora