Antes de salir al campo Jackson se despidió de nosotras para irse a cambiar, cuando llegamos ya estaba la mayoría del equipo practicando solo faltaban los compadres y el reptil, que al ver sus ojos me recordaron a uno y hablando del rey de roma y que se asoman, hay venia del lado de los vestidores de los chicos hablando, no sé de qué porque al controlar mis sentidos puedo tenerlo al igual de una persona normal, mientras nos sentamos en unas gradas, Scott miro a Allison por unos segundos y ella le respondió con una sonrisa. Pero la mirada no duro porque le hablo su entrenador y le lanzo un casco y un palo con la red más grande manándolo a la portería, hablaron unos minutos que termino dándole un golpe en el brazo y animando a los demás que seguían en práctica y fue sin nada más que hacer se fue a donde lo mandaron.
—¿Quién es el? – pregunto después de verlo unos segundos.
—¿El? No estoy segura, ¿Por qué? - pregunto mirándola.
—Estaba en mi clase de inglés – dijo nerviosa, tratando de hacer olvidar el tema.
—Se llama Scott McCall, es uno de mis dos mejores amigos, nos conocimos prácticamente desde pañales – dije, espero no arrepentirme después de esto.
Se escucho un silbato que su sonido fue demasiado fuerte para mí y también para Scott que se llevó las manos al casco, pero al estar quejándose no vio que un jugador lanzo una pelota y por estar quejándose del ruido le pego en el casco haciendo que se callera y se rieran todos hasta el entrenador.
—¡Lo atrapaste con la cara McCall! – dijo burlándose uno y deje salir mi lado mexicano.
—¡Cállate idiota! – dije enojada levantándome mi asiento sobresaltando a Lydia y a Allison, gracias a Dios que tengo un excelente control por qué sino no me molestaría dejarlo sin arrancarle garganta con mis dientes.
—Mejor ven a callarme con tu boca muñeca.
— Lo siento mi vida, a mí me gustan los maduros, pero de cerebro, algo que a ti te falta querido - le di mi mejor sonrisa falsa y le enseñé el dedo del corazón – Es lo único que te voy a dar para ver si queda por donde no te da el sol.
—¡Altamira-Deaton! – me regaño el entrenador.
—¡Y usted no me diga nada profesor que usted mismo escucho lo que me dijo, si no le pongo un alto quien lo hará, así que tenga los huevos para decirme en la cara que miento!
El profesor Finstock le llamo la atención y le dijo que tenía que hacer un trabajo del tamaño de un libro para poder pasar su materia, mientras que Scott se levantó, pero con una mirada de determinación. "Eso es mi cachorro" dije mentalmente como toda una mama orgullosa. Le pasaron la pelota a otro y la lanzo, pero esta vez la atrapo, miro la red con una sonrisa y volteo a verlos y ellos también, escuché a Stiles decir: "¡Si!". Despues atrapo 4 seguidas a esta se escuchaban gritos de emoción del pequeño grupo que estaba presente, Allison le dijo algo a Lydia que no le puse atención, estaba más concentrada en mi cachorro, sabía que usaba sus nuevos sentidos super desarrollados para atrapar las pelotas. Pero la alegría no duro mucho porque el reptil se coló en la fila la lanzar y eso hizo, corrió para darle más velocidad al lanzamiento, pero con movimiento a la izquierda la atrapo y escuche a Stiles gritar de alegría por la magnífica atrapada y me levante y me dirigí hacia él, que estaba a unas cuantas bancas y no fue el único también las demás personas estaban como el, con excepción del entrenador que estaba sorprendido y Jackson alias el reptil que miraba a todos por la magnífica demostración que dio Scott y se quedó mirando atrás con el ceño a dirección a Lydia, mientras que yo celebrada a Scott con Stiles.
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The Mexican and the Wolf | Derek Hale [Editando]
FanfictionMarilén Itayetzi Altamira-Deaton, ese es mi nombre tras terminar mis estudios mágicos en la academia Tezcatlipoka en mi natal México decidí (claro con el permiso de mis papás) ir a vivir al pueblo donde viví toda mi niñez Beacon Hills que para mejor...