🅅🄴🄸🄽🅃🄸🅄🄽🄾

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Tan pronto despertó sintió un mareo extraño, estaba junto a Inosuke en su cama abrazándolo, se separó un poco de él para poder despejarse y terminar de despertar, pero sus ojos se pasaron por el cuello y espada de Inosuke el cual tenía señas de mo...

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Tan pronto despertó sintió un mareo extraño, estaba junto a Inosuke en su cama abrazándolo, se separó un poco de él para poder despejarse y terminar de despertar, pero sus ojos se pasaron por el cuello y espada de Inosuke el cual tenía señas de mordidas y algunos rasguños dispersos.

Descubrió su cuerpo retirando la cobija que le cubría y pudo ver más de aquellas marcas distribuidas en todo su cuerpo, intentó recordar lo que pasó la noche anterior pero solo llegaban a él escenas aleatorias parte de lo que habían hecho toda la noche anterior

Era obvio que él había hecho todo eso y ahora se sentía culpable por dejarse llevar y hacerlo de manera tan descuidada aun cuando no fue intencional al no estar en sus cinco sentidos.

Cuando despertó Inosuke no se encontraba en mejores condiciones, su cabeza dolía y sus energías estaban agotadas, además de estar molesto por confundir aquel licor con jugo, justo por eso evitaba el alcohol a toda costa, por los efectos que tenía en él al siguiente día además de hacerle olvidar todo, simplemente odiaba su poca resistencia y terminar ebrio al poco rato.

A pesar de hacer todo lo posible para poder pasar tiempo con Tanjiro y hacer más llevadero aquel mal momento, el peliburdeos parecía evitarse y entendía muy bien la razón, aun que para nada estaba molesto con todas las marcas que quedaron en su cuerpo, prefería mil veces que el resultado de aquello fuera que terminaran cogiendo como nunca en su vida a que hubiera culminado haciendo alguna idiotez.

Cuando tomó las suficientes fuerzas para levantarse, se dio un baño y de inmediato fue al sofá donde se encontraba Tanjiro viendo de manera desinteresada el televisor, cuando vio a Inosuke acercarse quiso irse de ahí, aun no se sentía bien y pidiéndole disculpas no le haría sentir mejor, pero un peso sobre sus piernas le hizo permanecer en su sitio.

Inosuke tomó la mano ajena y la colocó sobre su cabeza, dándole a entender que requería de sus caricias, Tanjiro no se negó y comenzó a jugar con sus cabellos, revolviéndolos y acariciando su cabeza.

-Perdón por emborracharnos, creí que era jugo – Se giró para abrazarse a la cintura del peliburdeos sonriendo al sentir como este se agachaba un poco a besar su mejilla.

-Yo lo lamento por hacerte ...- Fue callado por el dedo índice de Inosuke que se puso sobre sus labios.

-Lo que haya pasado, estoy seguro que yo te lo pedí, el otro día en la cocina...lo disfrute bastante – Se levantó solo para terminar sentado sobre las piernas de Tanjiro y abrazarle con uno de sus brazos por el cuello mientras con su mano libre acariciaba su mejilla – Lo único que me molesta es no recordar nada de lo que pasó anoche, seguramente fue increíble.

- Pero estas lleno de mordidas, incluso tienes moretones – Le abrazo por la cintura recargando la cabeza en su hombro – Prometo no volver a hacerte daño.

-Pues te hare romper la promesa, porque cuando me regresen las energías te pediré que me dejes más mordidas en lugares donde no me alcanzo a ver – Tanjiro estaba a punto de reprochar por lo que junto sus labios apenas unos segundos – Solo deja de pensar tonterías.

30 Días  [ Inotan - TanIno] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora