Como varios lo pidieron, he aquí la parte dos del libro de imaginas. Activen la imaginación y dejenla volar. Dejen que Michael se encargue de todo
~Mmh~ah~si así
~Hazlo como a mí me gusta
~Se mi chica mala por hoy, lindura
~Esta noche te daré ta...
Hoy era mí cumpleaños, hace mucho que no lo festejaba y hoy no sería la excepción, lo único que haría sería un auto-regalo, hacerle el amor a mi lindura. No podía esperar a la noche
**Más tarde, en la noche**
Tocaron la puerta y supuse que era mí baby. Camine a la puerta y la abrí, aunque no vi a nadie, estaba por cerrar la puerta pero escuche una hermosa voz
—De la vuelta. Queda arrestado, Sr. Jackson —sonrei y me di la vuelta poniendo mis manos en mi nuca—
Bajo mis manos y las esposo, puso su mano en el centro de mi espalda y con su otra mano tomo mis manos, me dirigió al interior de la casa, cerro la puerta me dio vuelta dejandome ver su cuerpo y el conjunto que tenía, oh Dios... Me va a volver loco
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Me encantaba su trajecito erótico, ella seguía con su papel
—Oh, belleza. ¿Me permitirá cometer un crimen en mi cama con usted? —Sonrei picaro—
—Es muy atrevido, Sr. Jackson —se acerco a mis labios con la intención de besarme pero no lo hizo, quedo a centímetros con sus labios entreabiertos y su mirada en mis labios— Puede guardar silencio, todo lo que diga, puede y será usado en un juzgado
—¿Ah sí? Y dígame, bella señorita... ¿Donde queda ese juzgado? —seguia sonriendo pícaro—
—Esa es información confidencial que pronto será develada —sonrio traviesa—
—Lleveme, soy culpable de todos mis crimenes
Me dio la vuelta—: Avance, Sr. Jackson
Seguí su jueguito y llegue a una habitación, ya allí me tiró a la cama, mordí mi labio y la mire, se subió sobre mi sacándome las esposas y tomando una de las esposas la paso por mi pecho hasta que la ato al espaldar de la cama, todo muy lento. Mi temperatura iba subiendo junto a la temperatura de la habitación, intenté besar sus labios pero ella me lo impidió
—Dejame cometer un crimen más, linda —miraba fijamente sus labios—
—Va en contra de la ley, Sr. Jackson —saco un sobrecito rojo con el dibujo de un conejito playboy (un preservativo) y luego lo paso sensualmente por mi pecho bajando a mi abdomen—
—La ropa me causa escalofríos, ¿Se la puede quitar?
—¿Le da miedo?
—Asi es —mordi mí labio—
Ella empezó a quitar sus prendas, primero quito su sombrero y lo arrojo a algún lado de la habitación, lo mismo pasó con su trajecito, lo unico que quedó fue ese cuello con esa corta corbata, era igual de sexy con y sin ropa. Se empezó a rozar contra mi bulto y yo tire mí cabeza atrás para soltar suspiros y unos par de jadeos leves
—Esto está muy duro
—Lo está por usted, señorita mmh~
Me quito toda mí ropa suavemente, se posicionó sobre mi pene y lo acomodo para bajar lentamente, sus gemidos lentamente aparecieron, tan tiernos y delicados como siempre, saltaba lo más rápido que podía y cuando se cansaba de saltar se movía en circulos
—C-Como es tu cumpleaños, p-ponme en todas las p-posciciones que quieras mmh~aah~ —sonrei, todo esto era su regalo para mi—
Bese sus dulces labios mientras cambiaba de posición, mi era enterrado con fuerza en ella y ella gritaba de placer, amaba tocar todo su cuerpo desnudo, estaba completamente transpirado al igual que yo, acaricié su cabello haciéndolo una coleta y tirándolo un poco, contemos con que había cambiado de posición y ahora ella estaba en posición de perrito
—¡M~Michael!~aah~
Eso es lo que más disfrutaba, escucharla gemir mi nombre, eso me encantaba porque sentía que yo de verdad la estaba haciendo mía, me vine varias veces y ella... Ni hablar, creo que es la primera vez que nos corremos tanto en un polvo
—¡Aaaah!~ —solto su último gemido fuerte y se dejó caer a mi pecho rendida—
Rei por su gesto—: Gracias por mí regalo de cumpleaños, cariño —pase mis manos por su espalda—
