[2] Hola, señor mayor general

Capítulo 279: El sacrificio del amor

La atmósfera en la sala de recepción se volvió helada de inmediato.

El general Ji y el presidente Long no parecían felices.

Acababan de extender una rama de olivo al Primer Ministro debido al hecho de que el desliz de Dou Qingyan no había tenido "consecuencias graves", ¡y ahora se vieron obligados a comerse sus palabras!

Los dos miraron al primer ministro Dou.

¡Habían sido completamente humillados, y todo fue por culpa del Primer Ministro!

El rostro de Huo Shaoheng se puso solemne. Se inclinó cortésmente ante el general Ji, el presidente Long y el primer ministro Dou, antes de decir con gravedad: "Por favor, discúlpeme, tengo que lidiar con la pérdida de dos de mis soldados. Informaré tanto al ejército como al parlamento una vez que termine mis investigaciones ".

Las Fuerzas de Operaciones Especiales formaban parte de las fuerzas armadas. Huo Shaoheng tenía que informar al Consejo Supremo militar y al Senado, pero en realidad no tenía que informar al Primer Ministro.

Solo se había dirigido al Primer Ministro para ser cortés.

El primer ministro Dou no pudo evitar que la vergüenza se reflejara en su rostro.

Había preparado un pequeño discurso, pero fue interrumpido por la noticia de la muerte de dos de los soldados de Operaciones Especiales.

El rostro del primer ministro Dou se ensombreció. Dio un puñetazo en la mesa de café. "¡Sí, tienes que realizar una investigación exhaustiva! No podemos permitir que nuestros propios hombres se maten y se apuñalen unos a otros. Sabes muy bien que ... "

Huo Shaoheng frunció el ceño cuando interrumpió al Primer Ministro. "Primer Ministro Dou, mis hombres de Operaciones Especiales solo actúan ante amenazas externas. Nunca intentaríamos matar a los nuestros. Por favor tome asiento. Ahora, si me disculpas ... "

Se volvió y se fue sin decir una palabra más.

El general Ji y el presidente Long se pusieron de pie. "Ahora que tenemos una situación entre manos, tenemos que volver a nuestra oficina y hacer los preparativos necesarios. Disculpe, primer ministro Dou ".

Los dos hombres asintieron levemente al Primer Ministro, antes de salir juntos de la habitación.

El primer ministro Dou entrecerró los ojos al ver sus espaldas en retirada. Se sentía incómodo.

El día anterior, había llamado a los dos hombres y les había rogado que lo ayudaran a hablar bien con Huo Shaoheng. Al principio se habían mostrado reacios, pero finalmente accedieron a ayudarlo. Ahora que hubo bajas, inmediatamente le dieron la espalda a su promesa. Se enfureció por dentro, pero se consoló con la idea de que ninguno de los dos sería capaz de ganarle en una elección. Él era el Primer Ministro, mientras que el General Ji era solo el comandante de las fuerzas armadas, y el Presidente Long era solo el presidente del Senado ...

...

Las Fuerzas de Operaciones Especiales tenían un departamento dedicado a ocuparse de las muertes de sus soldados.

Antes de que Huo Shaoheng llegara al Aeropuerto de la Capital Imperial, los hombres de ese departamento ya habían cerrado todo el aeropuerto y habían llevado a todos los pasajeros que habían estado en el mismo vuelo que el difunto a la sala de recepción especial del aeropuerto para interrogarlos.

Media hora después, el automóvil de Huo Shaoheng llegó al Aeropuerto de la Capital Imperial.

Llevaba su uniforme negro de oficial y una gorra militar sobre las cejas. Se había puesto un par de gafas de sol, oscureciendo la mitad superior de su rostro. Todo lo que nadie podía ver de su rostro era su nariz, que parecía pertenecer a una hermosa escultura griega, y sus labios perfectos, que ahora estaban apretados con fuerza.