"La lluvia," dice Harry.
Louis asiente, lentamente.
"Es como..." Harry hace una pausa, buscando la palabra correcta.
"Crujiente," dice Louis.
"Exacto" dice Harry, asintiendo.
"Casi como..." Louis frunce el ceño, "¿rojo, quizás?"
"Mayormente," dice Harry. "Con un toque de naranjo."
"Naranjo, exacto." Louis apunta a Harry. "Eso es. Siempre se me olvida ese."
"Aunque muchas cosas son naranjas, eso sí," dice Harry, frunciendo el ceño.
"No en el lugar de donde vengo," dice Louis oscuramente. "Todo es negro-azul allí."
Harry hace una mueca de dolor. "Ni siquiera puedo imaginar eso."
"No lo hagas," Louis dice firmemente. Niega con la cabeza, "Ni siquiera lo intentes."
A Harry le dan escalofríos. "Créeme, no quiero hacerlo."
Louis asiente. "Bien". De repente se sienta correctamente, ladeando la cabeza.
"¿Viene mi mamá?" pregunta Harry. Louis asiente, poniéndose de pie.
"Sé discreto, ¿está bien?" Louis pregunta cerrando la puerta del closet.
"Está bien." responde Harry, al ahora-vacío cuarto.
Se oye un pequeño tap en la puerta, antes de que su madre aparezca.
"¿Qué haces, Harry?" pregunta la madre de Harry, observando.
"Hablo con Louis," le dice Harry. De inmediato se arrepintió de haber dicho cualquier cosa.
"Harry," dice su madre, suspirando. "Louis no es real, ¿recuerdas? Ya hemos hablado sobre esto antes."
"Cierto, mamá," dice Harry, asintiendo. "Lo siento."
"Harry, yo..." su mamá hace una pausa, luciendo insegura. "No te disculpes, ¿está bien? Es sólo que Louis no existe."
"Okay," le dice Harry, esperando a que ella se vaya, para que Louis pueda volver.
Su madre lo observa, hay algo amarillo-azul-rojo en sus ojos. A él se le olvida como lo llama la gente. Louis sabría.
"Harry, tienes una cita mañana, ¿recuerdas?" Dice la madre de Harry. "Con el Dr. Paulson."
El Dr. Paulson tiene muchos marcadores, un tablero de damas, y uso libre de un cajón lleno de dulces, para que Harry no le cuente a nadie acerca de esa vez en la que todo sabía a metal y jabón y magenta bañado en cera de vela.
"Está bien," dice Harry, asintiendo.
Su madre se muerde el labio. "Bueno, Harry," dice ella. "Recuerda comer, ¿de acuerdo?"
"De acuerdo," repite Harry, y ella cierra la puerta.
Louis inmediatamente abre la puerta del closet.
"Dr. Paulson," dice él, con un tono de disgusto.
"¿Por qué no te gusta?" le pregunta Harry, observando como Louis se pone cómodo en la estantería.
"Suena tan..." Louis se muerde el labio, buscando las palabras. "Diría morado-verde, pero me falta algo, ¿no es cierto?"
"Rosado," Harry dice de inmediato.
"Eso, eso," dice Louis . Hace una mueca. "No me gusta cuando vas allí."
"¿Preferirías que volviera donde el Dr. Craig?" Harry hace la oferta.
Louis se retracta lo mejor que puede, mientras se encarama en un estante.
"¡No!" exclama Louis. "No, no, ¡nunca!"
"Estaba bromeando," Harry dice, tumbándose en la cama.
"Vaya broma," Louis murmura, sonando irritado. "No bromees con eso, ¿okay?"
"Okay," dice Harry, quien de repente se ha acordado de su madre con la conversación. El sonido de la mantequilla siendo esparcido en una tostada, amable, y morada-roja aceptación.
"No, en serio," dice Louis, bajándose de la estantería para poder tomar la mano de Harry. "No bromees con eso. Eso fue... malo"
"Lo fue," Harry concuerda, y Louis presiona sus labios a la mano de Harry.
"Por favor no bromees con eso, Harry" Louis murmura.
Y Harry está tan embobado con la forma en la que la boca de Louis pronuncia su nombre, que asiente enseguida.
