Harry Potter y su T-Shirt de la NASA

Afecto

• Charlie Weasley & OC •

Payaso de Rodeo - Caballo Dorado

Charlie no estaba muy seguro de cómo era estar en un rodeo de uros*. Pero conocer a Nick y dejarse convencer para ir a uno sería de las experiencias más locas que tuvo en su vida.

El lugar era enorme y las túnicas habían quedado atrás, ahí todos los magos llevaban pantalones de mezclilla y camisas. Era lógico, las túnicas eran muy estorbosas.

Su amigo era un estadounidense que conoció en su viaje de mochilero por Europa. Ambos habían conectado bien, los dos amaban la naturaleza y las criaturas peligrosas.

Charlie le habló de su empleo como domador de dragones y Nick le contó sobre su trabajo en un rancho de uros, unicornios y caballos alados. Además de su pasión por el rodeo.

Ese rancho era el más grande del país y se dedicaban a la conservación de uros, unicornios y caballos alados. Le gustó ver como a pesar de la locura de montar bestias de categoría XXXX, las personas los cuidaban con mucho recelo. 

Era como estar en el santuario de dragones. 

Charlie se separó de Nick unos momentos para que su amigo se preparara para ser payaso de rodeo.

No sabía muy bien cómo funcionaba ese trabajo, pero Nick aseguraba que era lo mejor del mundo. Le decía que era igual de increíble que domar dragones. Tenían que ayudar a los jinetes y se paraban en la arena para distraer a la criatura en cuanto el uro hiciera caer al jinete.

Nunca se usaba la magia y Charlie pudo entender porque a su amigo le gustaba todo eso. La adrenalina era palpable en ese lugar.

Más alejado de la arena pudo ver a los unicornios y diferentes tipos de caballos alados que también eran para las competencias.

Charlie vio a su amigo tras la barda de la arena mientras un mago se preparaba para montar. El uro se movía mucho y se veía enojado.

Charlie no entendía nada de eso, a nadie se le ocurriría montar a un dragón así como así y menos a un dragón enojado. De verdad estaban locos en ese país.

Sonó la campana y abrieron la compuerta donde estaba el uro y Charlie vio como empezaba a moverse tratando de quitarse al jinete de encima. Solo pasaron unos segundos y pronto todos empezaron a vitorear al jinete y vio a su amigo correr en su ayuda.

- Solo 7 segundos, estuvo muy cerca.- Charlie escuchó atento al hombre parado en una tribuna.- Un aplauso para Steve.

La multitud empezó a aplaudir y a gritar su nombre para animarlo.

Así vio a muchos otros intentar durar más de 8 segundos sobre el lomo de un uro más enojado que un dragón protegiendo su oro.

No quería mentirle a Nick pero le pareció más entretenido ver las competencias con los caballos alados que las de los uros.

- Una maravilla ¿no?

El evento había terminado y Nick y Charlie ya estaban cenando unas hamburguesas que para el pelirrojo eran de las mejores que había comido en su vida.

- Yo diría más bien...- Charlie hizo una pausa dramática.- Una locura maravillosa.

Nick soltó una carcajada contagiando a Charlie y éste solo podía pensar que haber conocido al extraño de su amigo Nick había sido una de las mejores cosas que le pasaron en la vida.

- Recuérdame nunca llevarte con mis dragones, porque de ahí no sales vivo.

Otra vez se unieron en una risa y Nick le prometió que mañana le enseñaría a montar un Aethonan* y que lo dejaría alimentar a los unicornios.

•••••

Uro: Bestia mágica nativa de los desiertos de Norteamérica y el Lejano Oriente. Esta criatura es extremadamente rara, parecida a un buey gigante con piel dorada. La sangre de uro da una enorme fuerza al bebedor durante un tiempo limitado; sin embargo, ya que la demanda supera la oferta, y la obtención de la sangre en primer lugar es muy difícil, rara vez se encuentra a la venta en el mercado.  

Aethonan: es un tipo de caballo alado, un zaino popular de Gran Bretaña e Irlanda

Charlie es un aventurero sin remedio. Lo quiero mucho.

Espero que les haya gustado.

- Boris.