off my face ; 𝗺𝗶𝗰𝗵𝗮𝗲𝗻𝗴

OO9

Toc Toc

Toques en la puerta que le hacen levantarme y caminar hacia ella no sé de quién se trata ya que no iría a la casa de Sana, más nadie sabe mi dirección y los vecinos no me visiten porque casi nunca estoy además que no tengo ningún tipo de amistad con ellos.

Con un suspiro cansado abro la puerta y veo a Mina con las mejillas rojas y gran parte del rostro cubierto de su propio cabello, con ambos zapatos en las manos y su ropa llena de lodo. Le doy un pequeño espacio para que pase, no se ve para nada contenta y es que yo tampoco lo estaría si llego a una casa toda sucia.

"¿Que te pasó?". Balbuceo, no se qué preguntar, he estado demasiado ocupada pensando en ella que ya que la tengo en frente no se qué decirle ni cómo tratarla.

"Momo me dio tu dirección pero no dijo que había un gran hueco por el que hay que estar pendiente". Recuerdo la vez que caí en el, no fue para nada lindo y tener que aguantar las risas de los demás fue humillante. "Caí arriba de el y salí corriendo creyendo que nadie me había visto hasta que la vecina me dijo que debería tener más cuidado". Suspira y se quita los calcetines. "La muy hija de puta se rió en mi cara".

Como me gustaría reírme ahora mismo, desvío la mirada a la puerta escuchando las carcajadas de la vecina y ahora se le une la risa del chico de su lado. El rostro de Mina parece que está a punto de explotar en mil pedazos por la vergüenza o por otra cosa, no lo se.

"No se cómo no te reconocieron". Me mira y lanza la mascarilla al suelo, también está empapada eso sí que fue lo que derramo el vaso, apretando mi boca contra la puerta trato de no reír pero es imposible, comienzo a reírme como si no existiera otra cosa que supera hacer, aprieto mi estómago y cierro los ojos creyendo que eso hará que deje de reír.

Me he reído por tanto tiempo y tan fuerte que se me olvida como respirar, empiezo a sentir que me falta el aire y presiono mi pecho tratando de buscar aire, no le pedire ayuda a Mina porque puede que me deje morir y se ría luego en mi funeral.

"No es para nada gracioso Son". Cuando escucho mi apellido dejo de reír al instante, está enojada y prefiero que no lo este, es una de las primeras personas que visita y se supone que debo tratarla bien, odio que me hayan criado tan bien.

"Lo siento mucho es que a mí me pasó lo mismo". Cuento y me recuesto en la puerta de brazos cruzados. "Ve a bañarte y usas mi ropa, creo que tengo una que te puede quedar". Camino hacia el baño, al no sentir que está detrás de mí me doy la vuelta incentivando a que me siga, ella asiente y lo hace, no recuerdo que fuera tan lenta.