O26

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"A veces me pregunto ¿Qué hay en tu cabecita?". Desvío la mirada de la comida para ver a Mina que se sienta a mi lado con una enorme sonrisa, se me había olvidado que estaba en medio de la cafetería, de vez en cuando los recuerdos me transportaban a ese instante y se me olvida todo a mi alrededor, me traslado a aquel momento hasta puedo sentir exactamente lo que sentí.

Sacudo la cabeza y me encojo de hombros. "Un poco de todo pero casi siempre pienso en ti". Baja la cabeza y empieza a comer en silencio, no sabía que era tan fácil hacerla sonrojar o avergonzar.

Pruebo la ensalada en silencio, no quiero comenzar a hablar y que ella no me contesté porque eso es incómodo, llega a rozar lo extraño y sin sentido, es como si estuviera hablando sola que es lo que hago la mayoría del tiempo pero ahora que estoy frente a ella no le mostraré mis hábitos raros.

"Quiero decirte que en todo momento te tengo presente en mi mente incluso cuando voy a ir a dormir". Una sonrisa boba se instala en mis labios, me impresiona lo tierna que puede llegar a ser, cuando me imaginaba teniendo una relación con ella la veía más como la que decía cosas que harían que me avergonzara y es todo lo contrario. "No se cómo fui tan idiota de no decirte lo que sentía antes".

"No es necesario recordar el pasado cuando estamos tan bien en el presente". No se me da hablar del pasado y mucho menos cuando se trata de cosas que nos ocultamos mutuamente, se que también fui una idiota al no decirle nada pero siento que así está bien, las cosas pasan por algo. "Una cosa u otra hacía que no pudiéramos expresar lo que sentíamos pero fuimos una hermosa amistad que poco a poco resurgió a esto". Nos señalo y sonrío un poco. "No deberíamos hablar de nuestro pasado". Niego con la cabeza.

"Hablando del pasado y todo eso de no hablar de ello". Traga saliva, noto que no la está pasando muy bien así que dejó de comer y me concentro en sus expresiones, quiero saber lo que le está pasando pero no dice nada.

"¿Que sucede?". Pregunto esperando que me conteste, la conozco y sé que tardará unos minutos planteándose lo que dirá y luego lo hará lentamente.

"Quisiera hablar de Miyeon". Me ahogue con el agua, no pensé que sería tan directa, aunque la entiendo es más me gusta que lo sea.

"Miyeon es una chica que estudia en la misma universidad que Momo y yo". Asiente y apoya nos codos en la mesa para luego colocar el rostro entre sus manos, si que le interesa el tema. "Yo le gusto desde hace mucho pero por diversas situaciones nunca pudimos salir juntas". Explico y dejo el vaso con agua en la mesa con cuidado. "Hace poco volvió a insistir pero le dije que estaba saliendo con alguien, me dijo que todo bien".

"Me alegro que todo esté bien". Se que no lo dijo de esa manera con intención, pero sentí un toque de picante.

"Si". Me recuesto en la silla. "Tan bien que me lanzo las fresas que me iba a regalar".

"No puede ser, si quieres voy a la universidad y hablo con ella". Estuve a punto de decir que si hasta que recordé la vez que lo hizo con la chica que me rompió el corazón.

"Siento que le dirás y harás lo mismo que le hiciste a Lisa de pequeñas". No aguanto la risa, me rio tan fuerte que diversas personas voltean a verme.

"Ella se merecía todo lo que le dije". Se cruza de brazos y entre cierra los ojos. "Además...tú fuiste la que llegaste llorando a mi casa, incentivandome a ir y...".

"¿Decirle que es adoptada, que Santa no existe y que ojalá le caiga un tronco en las piernas y la deje lisiada?". Cuestiono.

"Lo del tronco fue jugando". Risilla nerviosa, toma agua y mira hacia otro lado, es tan adorable.

"Sabes que no lo fue, ni siquiera se acercaba a los arboles del colegio, también sabías que su pasión era el baile y que si quedaba sin poder caminar no bailaría nunca más". La sonrisa que hizo me dio escalofríos. "Estabas loca".

"Estaba loca por ti pero no te dabas cuenta". Me inclino un poco, veo hacia todos lados y le robo un beso, con cuidado me acerco a su oído, desde aquí puedo sentir los latidos de su corazón.

"Yo también estaba loca por ti y tampoco te dabas cuenta". Le dejó un beso en su cuello y me vuelvo a sentar recta y sigo comiendo como si nada.

off my face ; 𝗺𝗶𝗰𝗵𝗮𝗲𝗻𝗴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora