A M N E S I A 「AkuAtsu」

🍢 ଓ OO2

Una semana había pasado desde qué se había "mudado" con aquel par de hermanos. La pequeña Gin le solía dar problemas, pero nada grave, era normal en una niña de esa edad.

En ese tiempo pudo observar que la relación entre Gin y Ryunosuke era muy unida, y qué esté último hacía el papel de padre para la pequeña. También supo que los hermanos detestaban a los canes, cosa qué se le hizo extrañamente familiar, cómo si ya hubiera escuchado eso mismo antes.

Sus recuerdos seguían perdidos en algún lado, no le molestaba... Tanto. De vez en cuando se frustraba por no saber ni siquiera que era lo que le gustaba, o su color favorito pero Ryunosuke sabía calmarlo de una manera u otra, claro qué a su modo.

—Tigre, ayúdame con ésto. —Ordenó Ryunosuke entregándole una cesta con cosechas.

Al no conocer su nombre el azabache solía llamarle así, era cómo su nombre postizo.

—¡De acuerdo!

Ryunosuke solía tener un carácter un tanto difícil de tratar, incluso varios de los vecinos de la zona le miraban con lástima (no entiende el porqué de esto) pero detrás de esa fría apariencia había un corazón amable y bondadoso dispuesto a proteger a los que apreciaba.

Vivir con los Akutawaga fue la mejor cosa que le pudo haber pasado en su actual situación.

«Ryunosuke dice que vayamos al pueblo, hacen falta cosas para la casa. »

—Esta bien, Gin. Deja voy a dejar ésto y voy con ustedes.

La azabache asintió y salió corriendo, seguramente a dónde su hermano. Llegó a la cocina y dejó la cesta sobre el suelo, se estiró escuchando así sus huesos tronar.

—Ay, no puede ser, ni siquiera soy tan viejo. —Se dijo en voz baja mientras lloriqueaba. A lo lejos escucho cómo el Akutawaga mayor le gritaba que se apurará, tan impaciente pensó con una ligera sonrisa— ¡Ya voy!, ¡Ya voy!

Arreglo rápidamente su ropa y salió de la casa, dónde ambos Akutawaga le esperaban.

—¡Lamento la tardanza, podemos irnos!

Cómo era costumbre en sus salidas al pueblo, paso su brazo alrededor del de Ryunosuke para evitar perderse mientras que con su brazo sobrante tomaba la pequeña manita de Gin. El albino comenzó a conversar alegremente, siendo escuchados atentamente por los dos azabaches.

Fueron recibidos por los campesinos yendo y viniendo del lugar, las personas conversaban entre ellas de manera amigable. El albino sonrió y trato de salir corriendo, ésto fué impedido por el agarre que le dio el azabache en su brazo.

—Pero quiero ir a ver más cosas, ¡Siempre que vengo vemos lo mismo! —Se quejó frunciendo el ceño, cosa que fue ignorada completamente por Ryunosuke— Ah, adelanté, ignorame, no me importa.

Siguieron recogiendo puesto por puesto, se quedaban unos charlando (El albino era el que hablaba, claramente) por unos minutos y seguían al siguiente, así sucesivamente.

Llegaron a un puesto relativamente pequeño, no había muchas cosas por vender y hasta parecía qué no había nadie atendiendo.

"Tigre" miró confuso a Ryunosuke, era la primera vez que él venía a ese mini local. En primer lugar, ¿Qué era lo que vendía?

—Señor Poe, ¿Está aquí?

—¿Ah?, ¡Oh! Akutagawa, cuánto tiempo... Bienvenido, ¿Necesitas algo en específico? —Preguntó un tipo alto, parece haber salido de las sombras pues este asustó al pobre albino— Y vienes acompañado, bienvenido.