¿Qué me impide ser perdonado?

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Finalmente, hace un par de horas terminé aquel lugar subterráneo, que no me demoré mucho en construir, unos dos días fue el tiempo en el que lo hice. Durante ese plazo de tiempo, no me dedique a nada más que trabajar en el escondite, XD fue la única persona, quiero decir "ser" que vi en este tiempo mencionado.

El me ayudo bastante, pero yo también puse un gran esfuerzo.

El lugar quedó casi igual a una habitación común y corriente, solo que tenia una especie de "sala de estar" y claro, es una subterránea escondida. La ambientación del lugar tiene el mismo estilo que el de mi casa en general, me refiero a una habitación rustica de madera, ladrillos de piedra y derivados junto con plantas y hongos que formaban parte de la decoración. Tengo que admitir que quedo muy bonito.

En cuanto terminé de barrer el polvo seguido de acomodar los muebles, lo primero que me puse a hacer sin que tuviera relación con la habitación, fue a tomar una buena siesta. Todo ese trabajo la verdad si fue agotador y yo necesitaba descansar aunque sea un poco.

Quiero sacar a Dream mañana o pasado mañana, no me queda nada más que hacer en su escondite pero necesito arreglar unos últimos detalles. Después de eso quedaría el caos. ¿Acaso es normal que un peligroso prisionero desaparezca de la nada? Obviamente no y todos por seguridad empezarían a buscar a Dream inmediatamente.

También tengo que hacer mis propias cosas personales, así no parezco alguien sospechoso que estuvo 3 días encerrado en su casa sin que nadie supiera nada de el en ese periodo de tiempo.

Cuando terminé de consumir mi desayuno, se me ocurrió la idea de visitar a Sapnap y Karl, quizás pueda analizarlos un poco y si dan buenos resultados le podría pedir que me ayudaran con lo del escape de Dream. Así que de inmediatamente fui a buscar mi abrigo para el frio clima de allá afuera y salí de mi casa en camino al lugar donde se suponía que estarían ese famoso dúo.

Hacia bastante frío. Con cada paso que daba se me congelaba el cuerpo a pesar de que traía un abrigo puesto. Últimamente en estos últimos días habían estado bastante, bastante fríos, lo cual es muy extraño pues no estamos ni siquiera en la época de invierno. Para mi fortuna, mi casa es cálida y se calienta rápido, así que estando dentro de ella no siento tanto frío a comparación del exterior.

Después de un rato de fría caminata, llegué frente a la puerta de la casa de Sapnap y Karl aquí en Kinoko kingdom. La "golpeé" con mi puño cerrado unas cuantas veces creando una especie de melodía que señalaba que había alguien esperando que le abrieran allí fuera de su hogar-

—Hola George! Ven pasa!—Me recibió mi amigo con cabello color azabache, mientras yo entraba—¿Quieres algo, café, te o algo para calentar tu cuerpo? Hace frío allí afuera.

—Un café caliente estaría bien—dije mientras me sentaba en su sofá que se situaba frente a su cocina de estilo americana rustica que me permitía ver como Sapnap preparaba el café. —Cuéntame, ¿Cómo han estado? apropósito...— mire alrededor como si buscara algo.. o alguien—¿Dónde esta Karl?

—Bastante bien, todo ha estado bastante tranquilo gracias. Karl no esta aquí en la casa como te habrás dado cuenta, ahora el está en la biblioteca.—Respondió mientras servía el agua caliente en esa taza—¿Que hay de ti gogy?

—Estoy bien, no ha pasado nada interesante que pueda contar así que puedo decir que todo ha estado tranquilo.

—Escuché que fuiste a visitar a Dream el otro día. ¿Como te fue con eso?—esas palabras me dejaron impresionado.

— Espera..¿Cómo?...¿Cómo lo supiste?.— pregunté algo alterado, me esperaba de todo menos esa pregunta

—Karl me dijo que te vio mientras estabas entrando a la prisión, eso es todo.—Comentó mientras venia caminando donde yo estaba con la taza de café en la mano, a lo que yo se la recibí mientras el se sentaba a mi lado.

—Uhm, okay... Bueno no paso nada importante en realidad—paré de hablar para sentir el amargo sabor del café en mis labios.— Y antes de que preguntes, le dije que merecía estar en prisión por todo el daño que el causo y que nuestros lazos se rompieron completamente— Noté que Sapnap me miraba con una mirada de confusión y sorpresa.

—¿En verdad le dijiste eso? —Parecia impresionado.

—Púes.. ¿Si?

—George...No creí que le dirias eso a Dream, siempre pensé que tu aún le querías aunque sea un poco.

—Si... yo tambien.. al menos eso creía hasta cuando lo vi, pero por suerte, recapacite completamente.— Respondí mientras le dirigía una sonrisa, la cual era falsa, pero mi amigo no la notaba.

—¿Y el.. acaso te habló?—Preguntó.

—Pues..¿Si?—Respondí confundido a esa extraña pregunta, ¿Por qué Dream no me hablaría?

—¿Te dijo algo importante? Recuerdo que cuando yo lo visite no me hablo casi nada.—Me comentó mi amigo de cabello azabache. —Igual, si te hubiera dicho algo relevante lo más probable es que me hubieras contado.

—Así es, nada importante me dijo ese día, así que quédate tranquilo con eso sapy napy-—respondí mientras bromeaba a mi amigo moviendo mi mano en su cabello haciendo que este se alborote.

De la nada, sentimos como alguien o algo entró rápidamente a la casa. Yo y Sapnap nos miramos confundidos y ambos nos paramos a ver que o quien era, nos llamó la atención porque todo eso fue muy rápido . Nos asomamos cautelosamente para evitar ser vistos.

—No, no no no no...— Escuchamos murmurar a aquel chico mientras veía las paginas de su cuaderno apresuradamente—Hay que evitar esto.. Les tengo que decir a los demás...— Susurraba para si mismo —Antes de que sea demasiado tarde..

Voltee a ver a Sapnap mostrando confusión en mi cara dando a entender que buscaba de alguna respuesta de su parte, lo que no esperaba era de que el también hacia lo mismo.

El me hizo una seña para que me devolviera a la sala- cocina en donde habíamos estado anteriormente, le hice caso y ambos nos devolvimos con cuidado para sentarnos en donde estábamos antes fingiendo no haber escuchado nada de lo que no debíamos..

—Hola chicos....—Entro en donde estabamos para suspirar mientras nos miraba a los ojos con una grande expresión de preocupación en su rostro— Tengo malas noticias.