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Ashton Irwin no era el chico perfecto, pero para Eva si lo era. Ella le daba todo el cariño que podía pero Ashton le resultaba muy sofocante que su novia fuera demasiado empalagosa.
Ahora la chica se encontraba acurrucada en el sofá de su casa que comparte con Ashton, mientras veía The Big Bang Theory. La puerta de la entrada fue abierta y los ladridos de su mascota se hicieron presentes.
—Hey...— se levantó y fue hacia su novio para darle un beso casto que no fue correspondido, acción que dejo un poco confundida a la chica—. ¿Qué hicieron los chicos y tú?— preguntó sentándose en la mesa de la cocina, ignorando el gesto anterior
—Pues comimos y jugamos videojuegos, lo de siempre— respondió un tanto cortante para luego irse a la sala de estar
—Que bien, me gustaría verlos— el baterista asintió levemente en modo de afirmación
Eva se encontraba confundida y empezó a preguntarse el porqué del comportamiento de su novio. ¿Acaso hizo algo para hacerlo enojar? ¿Habrá tenido un mal día? ¿Se peleó con alguno de los chicos? Muchas preguntas empezaron a formarse en su cabeza que comenzaban a carcomerla, así que decidió preguntarle.
—.Cariño, ¿estás bien?
Ashton quitó la vista de su celular para verle con el ceño fruncido.
—Si...— respondió. Eva se sentó a su lado y acarició su espalda
—Se que no lo estás, te conozco como la palma de mi mano. Dime, ¿estás bien? ¿Te peleaste con alguno de los chicos?
—¿No te cansas de ser tan fastidiosa?— ella lo miró frunciendo el ceño
—Y-yo...no.
—Déjame decirte que me tienes harto, necesito espacio Eva, y tú ni siquiera me lo das.
—Claro que si te lo doy— Ashton soltó una risa sin gracia
—Solo, dame espacio— se levantó pero la chica lo agarró de la muñeca
—No te vayas, no hemos terminado de hablar— el de rizos se soltó bruscamente de su agarré. Eva tenía sus ojos cristalizados y en cualquier momento rompería en llanto
—No tenemos nada de que hablar, te he dicho que me des espacio.
—Ashton, tú no eres así. ¿Qué pasó con el dulce y risueño Ashton?— el oji-hazel solo se limitó a rodar los ojos dejando a la chica dolida por su comportamiento
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El chico se encontraba acostado en su cama, acariciando a su pequeño perro mientras miraba a un punto fijo. Pensaba en como había tratado a su novia anteriormente, y se sintió mal al tratarla así. Ya había pasado una semana de lo sucedido y las cosas ya no era como antes, por ejemplo, de que ella siempre lo abrazaba por las noches y se acurrucaba en su pecho, ya no sucedía, la chica solo le daba la espalda.
También, solo se limitaba a ignorarlo siempre que se levantaba en las mañanas, tardes y noches. La culpa carcomía completamente a Ashton, porque él quería volver a sentirla por las noches, quería volver a sentir sus suaves y carnosos labios, porque Eva apenas y le daba besos cortos en las mejillas.
Así que decidió que era hora de hablar con ella. La vio sentada en su jardín leyendo un libro, se acercó y se sentó a su lado.
—Hola...— dijo, ella solo movió la cabeza en modo de saludo—. Y-yo...en- enserio...lo siento— susurró lo último agachando la cabeza mientras jugaba con sus manos de forma nerviosa
—Bien por ti.
—Vamos, Eva.Ya te pedí perdón, en serio lo siento, si es necesario hasta me pongo de rodillas y te rogó por tu perdón—bromeó un poco, lo que hizo reír levemente a su novia
—Tú me pediste espacio, te lo di.
—Pero extraño que me abraces por las noches, extraño que me beses cada vez que despierto o...— se acercó a su oído relamiendo sus labios—. Las veces que te he hecho gemir mi nombre— las mejillas de la chica tomaron un color rojo fuerte
—¡Ash, dios!— tapó su cara con sus manos mientras reía
—Algo así— dijo sonriendo, la chica destapó su cara—. En serio lo siento amor, de verdad extraño todo eso y...no sé porque me comporté de esa manera ese día, tal vez estaba estresado por el nuevo álbum, ya sabes que siempre me pongo así cuando sucede eso. Pero no eres fastidiosa, eres la mujer más maravillosa del mundo— agarró sus mejillas haciendo que su cara se hiciera como la de un pez y empezó a repartir besos por toda su cara haciendo reír a la chica, termino dándole un beso en los labios
—Te amo, rizos— murmuró Eva sonriendo
—Yo te amo más— se fundieron en un tierno beso donde demostraban todo el amor que se tenían
De tierno se volvió a uno salvaje, por lo que la chica dejo aún lado el libro y se subió al regazo de su novio, las manos del rizado se colocaron en el trasero de su chica. Se levantó con ella en brazos mientras que la chica enredaba sus piernas alrededor de la cintura de Ashton
