Te Encontré Y No Voy A Perderte {Camus X Milo}

¿Cómo Matas A Un Fantasma?

Tres semanas después.

Aurora sé encontraba corriendo mientras jalaba a su hermano él cuál se encontraba confundido por él comportamiento tan inusual de la menor.

Camilo: ¿a dónde me llevas? - le preguntó confundido.

Aurora: sólo no hables tan fuerte que es un secreto - le respondió.

Camilo: enserio aveces me das miedo Aurora, no me digas que ya mataste a alguien...

Aurora: eres un tonto... - le susurró su hermana.

Después de correr un poco llegaron al lago, dónde Aurora comento todo lo sucedido hace tres semanas a su hermano y la razón por la que ella desaparece por momentos, su hermano por un momento no le creyó, así que queriendo demostrarle que lo que decía no era broma hizo todo lo que Shion había hecho la vez anterior, pasados unos diez minutos no sucedió nada así que Camilo trató de llevar a su hermana nuevamente al Castillo, pero una fuerte brisa cómo la primera vez se hizo presente entonces Aurora dijo...

Aurora: Ya está aquí... - dijo viendo en dirección al bosque, Camilo también lo hizo, pero nada, después ambos se pusieron alerta y de un momento a otro escucharon un...

Milo: Hola... - Camilo de un salto retrocedió con su hermana, pero se sorprendió por ver a quien tenían enfrente que recientemente se estaba quitando la venda de los ojos.

Camilo: Ma...

Milo: ¿Hm?... ¿Si? - dijo mientras se sentaba en él pasto, cada vez se le hacía más pesado regresar.

Camilo: ¿Cómo lo hiciste Aurora? - pregunto sin dejar de ver al joven que ahora empezaba a peinarse él cabello con las manos.

Aurora: lo hice por nosotros hermanito, para que pudiéramos conocer a mamá...

Milo: saben que su padre va a molestarse si no los encuentra en él castillo ¿verdad? - pregunto serio mientras sus dos bendiciones se iban a sentar a su lado.

Camilo: ¿Qué fue lo que te pasó? - Milo río.

Milo: una larga historia, será mejor que su papá se las cuente cuando sea tiempo - dijo mientras los abrazaba a ambos. Aunque debía admitirlo, cada vez se sentía más cansado.

Dos horas después.

Se encontraban en una cueva, pasando la lluvia, ambos menores se encontraba dormidos mientras que Milo se encontraba acariciando levemente él cabello de ambos, pero se puso alerta al sentir que alguien los veía, lentamente se levantó y cuidando no despertar a sus mellizos empezó a Caminar encontrándose con la sorpresa de que Aspros los estaba viendo, él no había notado que Milo lo había descubierto, él con una mirada sombría empezó a acercarse al enemigo lentamente.

Diez minutos después...

Un gritó los había despertado rápidamente, escucharon un par de balazos, rápidamente ambos buscaron a su madre con la mirada y después de recordar la advertencia preocupados salieron corriendo la lluvia no había parado buscaron él origen de aquel gritó sólo para darse cuenta de que Aspros estaba tirado en él suelo, con una pierna desangrado sé y apuntando hacia todos lados con aquel rifle.

Aspros: ¿dónde demonios estás bastardo? - pregunto asustado.

Aurora: ¿Qué sucedió? - pregunto preocupada.

Camilo: ¡Señor Aspros, Cuidado al frente! - gritó para después ver cómo Milo le lanzaba un hacha que sabrá dios de dónde sacó, Aspros se movió rápidamente para después tratar de levantarse. En lo que Milo volvia a desaparecer - ¿Porque carajos no lo mata? - pregunto alterado.

Aspros: ¡¿Y dime cómo carajos matas a un fantasma?! - gritó asustado.

Aurora: ¿usted lo vio? - pregunto mientras ambos lo ayudaban a levantarse.

Aspros: ¿Porque Milo está aquí?, él ya esta muerto - pregunto sin ponérselo creer.

Camilo: ¿Aurora tú lo vez?...

Aurora: No. No debimos descuidarnos, mira lo violento que está - susurró, escucharon pasos, lo vieron rodeandolos lentamente en círculos por los árboles, esto se había vuelto una película de terror paró de caminar justo en frente de ellos, no podían ver sus ojos, ya que eran cubiertos por su fleco, mientras que la lluvia le deba un toque más siniestro.

Un cuchillo muy brillante se encontraba en sus manos, ese cuchillo le pertenecía a Aspros él cuál no sabía a que hora se lo había quitado, a pasó lento empezó a caminar hacia adelante importandole un bledo que sus hijos estuvieran enfrente, lo único que quería era, matar a ese sujeto para poder vivir, Camilo se puso delante de Aspros y Aurora mientras veían aquel espectro acercarse peligrosamente y cuando intento atacarlos... su papá apareció aunque se quedó quieto ante lo que veía y sólo escucharon de sus labios susurrar un...

Camus: ¿Milo?... - Susurró impactado y un rayo cayó al mismo tiempo que Milo desapareció.

Camilo: ¿Papá? - vio que bajo sus manos mientras empuñaba su mano para después girarse y decirles.

Camus: hay que llegar a casa rápido, va a regresar y cuando lo haga es seguro que nos matara y le valdrá muy poco que seamos familia apresurense - dio la orden mientras que ayudaba al herido y sus hijos le seguían.

Horas después...

En él castillo.

Después de unas horas en las cuáles ya les había metido más sustos que una película de terror, pudieron llegar, aunque Camus también había terminado muy herido incluso más que Aspros, quien estaba sorprendido de ver que su enemigo lo había salvado.

Camus: me duele - dijo entre lágrimas.

Aurora: no te preocupes enseguida le llamo a Beatriz para que te Cure... - Camus negó.

Camus: no es Eso... me duele lo que está haciendo, me duele que por su furia nos haya olvidado. ¿qué fue lo que te pasó Milo?, ¿acaso me odiaste tanto al momento de morir? - pregunto triste.

Aspros veía aquel comportamiento asombrado, entonces... ¿a él si le importaba Milo?, que curioso, jamás había pensado que un Vampiro pudiera tener sentimientos, tiempo después los demás llegaron.

Dégel: ¿Qué te pasó Camus? - pregunto su hermano preocupado.

Camus: Fue Milo - dijo triste.

Kanón: ya estás loco Camus, Milo está muerto él jamás pudo haberte hecho esto, tal vez fue ese cazador - dijo mientras el y Aspros se veían serios.

Camus: él alma de Milo está aquí, y viene a cobrar venganza...

Saga: ¿y cómo porque haría eso?

Camus: ¡No lo sé! - gritó frustrado - Tal vez sea porqué yo No lo salve hace años...

- Empezaron a escuchar un llanto afuera -

Aioros: Ya está aquí... - dijo reconociendo el llanto.

Todos se quedaron inmóviles al escuchar aquel llanto tan desgarrador, las puertas empezaron a moverse y las ventanas parecían que se iban a romper, por primera vez ellos siendo seres que no conocían la palabra miedo por fin la sentían y después todas las lámparas del Castillo explotaron dejando a todos en una total oscuridad...

Continuará...