Solo era una broma [Santiago Ormeño x Christian Cueva]

Evidente

Lapadula: "Creo que a él también le sucede algo similar."

Cueva: "¿Cómo lo sabes bambino?"

Lapadula: "Sucedió en el partido de hoy"

Cueva: "Dime, ¿Qué sucedió? Dímelo por favor."

Lapadula: "Veo que estás muy ansioso por saberlo."

Cueva: "Ya. Apura please. Antes que vengan los demás y empiecen a joder."

Lapadula: "Jaja. Bueno, luego de que fuera cambiado por Farfán me senté al lado de Ormeño. Puedo asegurar que se encontraba muy atormentado, como si algo le estuviera fastidiando."

Cueva: "Asu, ¿Sabes por qué?"

Lapadula: "Te mentiría si te digiera que sé la respuesta. Lo que pude enterarme es que el entrenador había dicho que sea él quien me reemplazara. Pero parece que algo sucedió con su ánimo y prefirió comunicar que no se sentía bien para entrar. Debido a esto, Farfán ingresó en su lugar."

Cueva empezó a sentir culpa de lo que le está pasando a Ormeño. Sabe que desde esa discusión que tuvieron algo cambió en el mexicano.

Cueva: (Con curiosidad) "¿Y te dijo algo sobre mi?"

Lapadula: "No. Ormeño estaba callado durante todo el partido."

Cueva: "Oh... Esta bien."

Cueva agachó su cabeza luego de escuchar eso. Realmente quería escuchar algo de Ormeño... y no se estaba percatando de esto.

Lapadula: "Pero..."

Cueva: "¿Ah? ¿Qué?"

Lapadula: "Noté que su mirada a veces te empezaba a seguir. Te estaba prestando atención durante todo el partido."

Ese comentario provocó un leve sonrojo en Cueva.

Cueva: "Ya veo."

Lapadula: "Dime con toda la sinceridad cholito. ¿Algo sucedió entre tú y Ormeño?"

Cueva: "¿A parte de la broma de ayer?"

Lapadula: "Sí. ¿Hay algo entre los dos?"

Cueva: "No."

Hubo una breve pausa entre los dos futbolistas. 

Lapadula: "¿Y tú quieres algo con él?"

Esa pregunta tenía que llegar tarde o temprano. ¿Estaba él preparado para poder contestarlo?

Cueva: "No lo sé bambino"

Lapadula: "¿No lo sabes? ¿O no quieres admitirlo?"

Cueva realmente se sentía seguro con Lapadula. Era alguien a quien pueda confiar.

Cueva: "Siento que me sucede algo con él."

Lapadula: "¿No te gusta verlo triste como el día de hoy, cierto?"

Cueva: "No. Viste que perdió toda esa magia que trasmite. Puta webon. Antes lo encontraba extraño. Ahora me parece que es su encanto."

Lapadula: "¿Su encanto?"

Cueva: "Sí. Algo que lo hace especial webón."

Lapadula: "Entiendo perfectamente lo que te sucede."

Cueva: "¿Qué?"

Lapadula: "Estas enamorado de Ormeño."

Para Cueva, aunque ya muy obvio a este punto, era algo que necesitaba que otra persona confirmará sus sentimientos por el mexicano. 

Hubo un largo silencio entre los dos. 

Lapadula: "Veo que te quedaste mudo amigo mio."

Cueva: "Creo que tienes toda la razón bambino amigo."

Lapadula: "¿Y el está enamorado de tí?"

Cueva: "Puta no creo. Se le nota que no le entra a esas cosas."

Lapadula: "Con una broma como la que quisiste hacerle ayer a Yotún, una persona que 'no le entra a eso' te hubiera dicho que no en este momento."

Cueva no quería hacerle ilusiones al respecto, pero Lapadula tenía un buen punto de vista.

Lapadula: "Además, hay que ser sinceros. Siempre se nos pasa por la mente la idea de relacionarse con otro compañero de tu equipo."

Esa respuesta también le pareció muy extraña.

Cueva: "¿Te ha pasado?"

Lapadula: "No realmente, pero creo que a Yoshi le sucede."

Cueva: "¿También lo sabes?"

Lapadula: "No me lo ha dicho, pero creo que es algo obvio."

Cueva: "Jajajaja yo pensé que estaba prendido de Ormeño."

Lapadula: "Yoshi quiere moverle el piso a Aldito"

Cueva: "¿Cómo lo sabes?"

Lapadula: "Pensé que era evidente."

Cueva: "Yo no estaba enterado amigo. Me causó una sorpresa."

Lapadula: "Sí. Ojala que el bebito pueda animar a Yotún luego de hoy. Creo que sus palabras lo ayudaría muchísimo a sentirse mejor."

Cueva: "Ojala."

Hubo un breve silencio entre los dos jugadores luego de esa breve conversación.

Lapadula: "Creo que Ormeñito también necesita tus palabras."

Cueva: "¿Las mías?"

Lapadula: "Sí. Yo creo que él también siente algo por ti amigo."

Cueva: (Sonrojado) "Es que no estoy seguro..."

Lapadula: "No pierdes nada intentándolo. En el peor de los casos, no sucede nada y quedan como buenos amigos. Creo que así podías justificar tus constantes pensamientos por Ormeño y de paso ambos vuelven a hablarse como antes."

Cueva: "Creo que lo haré mano."

Lapadula: "Perfecto amigo mio. Debo irme. Aun no terminó de alistar mis maletas para el viaje de regreso a Perú. Te veo más tarde amigo."

Cueva: "Nos vemos bambino."

Lapadula le dio una palmada en la espada a Cueva y se retiró a su cuarto.

Cueva estuvo pensando por un momento las palabras del italiano. Era necesario hablar con Ormeño cuanto antes. Ambos se iban a ir a sus clubs de al día siguiente y su duda y problema estarían presentes por mucho tiempo.

Cueva decidió ir al cuarto de Ormeño para hablar con él directamente. Toco la puerta para poder afrontarlo.

"Tranquilo Cueva, todo saldrá bien.", pensó mientras se ponía cada vez más nervioso.

No había respuesta aun. Al parecer Ormeño no estaba en su cuarto. Luego de esto, Cueva decidió irse a su cuarto a descansar un rato. Su idea era ganar valentía para hacer algo que, por lo general, sería mal visto en el futbol. Pero en este momento, era necesario para encontrar su tranquilidad.