Sinopsis

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Un día le pregunté a la vida porqué me entregó lo que creí lo más hermoso del mundo pero me quedé allí, viendo un punto fijo, sin recibir respuesta alguna.

Al otro le renegué el porqué me quitó lo que más amé y seguiré amando en mi corta existencia. Y después no sé porqué lo que aún me queda, no es como quisiera.

Y finalmente no entiendo nada.
Me quedo perdida sin recibir respuesta alguna, sin entender el porqué o para qué de las cosas.

Siempre he pensado que la vida es tan tremendamente incomprensible y para completarla termina siendo injusta, dura y triste.
Y así mismo me quedé yo, porqué un día a la vida se le ocurrió la terrible idea  de quitarme a la persona que más amaba en el mundo y me dejó sola, pero sin entender nada, otro día me ilusionó  entregandome a quién creí que estaría  siempre a mi lado y como queriendo enzañarse conmigo también decidió apartarlo de mí dejándome otra vez  la vida triste.

Y si, se fue y dolió tanto que la única forma de seguir era aceptarlo.

Hoy me pregunto si la vida es así con todo el mundo o simplemente se encapricha por hacer sufrir a unos más que a otros.

Hoy aún no le encuentro respuestas a nada y sigo flotando entre mil preguntas.

Pero resulta que hoy también decido olvidar todo, perdonar, ser feliz como si nada más y tratar de seguir mi vida ignorando el sufrimiento que alguien más me ha causado.

Hoy decido por fin darle respuestas a mis preguntas y aunque no sé si sean las correctas y no esté segura de equivocarme o dar al blanco elijo cerrar ciclos para dejar que mi vida fluya con más tranquilidad y paz porqué simplemente ya no quiero perder más y mucho menos quiero sentir el impulso de dejarlo todo, incluso dejar de existir.

Otro día quise borrar esa terrible idea de mi mente y solo dedicarme a sanar.
Sabía que no iba a suceder de la noche a la mañana pero dolía menos cuándo me imaginaba sonriendo y feliz por haberlo logrado, en el fondo estaba segura que ese día en algún momento llegaría.

Y como en la vida nada es entendible un día me di cuenta que no hace falta entender lo que lastima, y por eso hoy simplemente quiero resistir y ser más fuerte que ayer, más fuerte que hoy.
Simplemente porqué todavía me quedan mil cosas por las que vale la pena vivir.

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