BROKEN PROMISE

CAPITULO 8: ¡Tú no existes!

Si de alguna manera los sueños se vuelven realidad, las pesadillas también, el sentimiento de estar atrapado, encerrado, de no poder escapar, despertar, mirar por la ventana el hermoso amanecer y ser capaz de suspirar aliviado que todo haya terminado, pero como despertar de la realidad, sin saberlo el momento más esperado por Amity los últimos años se había dado la vuelta, como si del negativo de una foto se tratase.

~Luz: NO, no no no no, ¿qué haces aquí? Vete, si ellos saben que te volví a ver me harán daño, te pedí que te fueras, porque regresaste.

Amity totalmente confundida y aterrada por las palabras de luz, no era capaz de realizar ni el mas suave sonido, su voz, y todas sus fuerzas se habían esfumando de un momento a otro, paralizada frente a una Luz que parecía tener mucho resentimiento contra su persona, y el hecho que no fuese capaz de hablar solo hacía de aquella escena las incomoda de vivir para ambas.

~Luz: ¡tu no existes!, y si de verdad me quieres dejaras de aparecerte ante mí, para que yo pueda salir de este maldito infierno.

Luego de esas palabras Luz rompió en llanto, y con una media vuelta muy rápida comenzó a correr camino hacia uno de los edificios de la institución, Amity que aún no entendía lo que estaba pasando, solo cayo de rodillas en aquel lugar, donde había encontrado a luz, aquel lugar ha había perdido su belleza, aquel lugar que había perdido su luz.

Por aquel lugar pasaba un extraño sujeto con bata blanca de la misma dirección en la que acaba de salir luz.

~Sujeto: ¿cielos, que le hiciste a esa pobre chica?

~Amity: yo no le hice nada, solo quería hablar con ella, no la veía hace mucho tiempo

~Sujeto: pues ten mucho cuidado, ha avanzado mucho los últimos meses, y creo que en un par de semanas la dejarían salir

~Amity: ¿por qué la tienen aquí?

~Sujeto: este es un hospital

~Amity: ¿Luz está enferma?

~Sujeto: no es un hospital común, aquí no tratamos sus cuerpos, tratamos sus mentes, si no estoy mal ella es Noceda, no es mi paciente, pero he hablado con su médico a cargo, decían que hablaba por personas imaginarias, que decía que poda hacer magia, una vez escuche que escapo de casa durante una tormenta he intento abrir en portal o algo así, creo que eso fue lo que la trajo aquí.

~Amity: para no ser su doctor sabes mucho.

~Sujeto: yo creo que cada persona es una historia, y cada historia merece ser escuchada, yo solo las guardo podría decir que las colecciono. ¿Y a todo esto quién eres tú?

~Amity: yo, nadie en particular, solo vine a ayudar a una persona especial

Luego de esas palabras Amity salió en busca de Luz, vagando de un lugar a otro sin poder dar con el paradero de ella, en una habitación muy alejada de todas las demás, con una puerta semicerrada, se encontraba Luz, con lagrimas en los ojos, Amity entro con mucho cuidado y trato de no molestar.

~Amity: ¿puedo sentarme por aquí?

Pero luz no respondió

~Amity: el lugar está algo eh, acogedor, muy diferente a todo lo demás en el hospital, ¿tú lo decoraste?

Pero luz no respondió

~Amity: luz, háblame, no vine hasta aquí solo para no poder habar contigo, he pasado por mucho para poder verte.

Luego de escuchar esas palabras luz rompió en llanto y con una voz quebrada y molesta grito.

~Luz: ¿tu la has pasado mal? ¿Tú la has pasado mal? Yo soy la que ha estado encerrada aquí el ultimo año, yo soy la que las personas llaman loca, yo soy a quien nadie le cree, les hable de todo y nuca me creyeron, les hable de ti Amity, y cuando intente volver, no pude, por semanas trate de buscar la manera de volver y nada me llevaba cerca, estuve noches esperando a que alguno de ustedes viniese por mí, y nunca vivieron, 2 horribles años esperando, y nunca nadie vino por mí, me encerraron aquí, me llenaron la boca con pastillas día tras día, hasta que un día, me rendir, y acepte que todo fue una mentira, que tu no eras real, y que nada fue real. Así que déjame en paz, no quiero escuchar tu voz, no quiero volver a terapia, no quiero que ellos me lastimen más.

~Amity: Luz, mírame, aquí estoy puedes tocarme, soy muy real, prometí esperarte y eso hice, pero no podía soportar la idea de no volverte a ver, así que vine a por ti, así que perdón por no cumplir mi promesa. O mejor perdóname por no romper nuestra promesa antes.

Amity y Luz estaban llorando, cuando luz de la vuelta y mira a Amity y con ojos muy vacíos.

~Luz: perdóname, pero todo esto, ya no tiene sentido para mí, solo quiero volver a casa, ya no recuerdo nada de lo que haya pasado, ya no recuerdo nada de ese lugar, ya no recuerdo nada de ti, solo recuerdo que te esperaba y nunca viniste, así que lo siento si no puedo sentir nada.

Esas palabras quebraron el corazón de Amity, despojándola de toda esperanza de confesarle a luz lo que sentía, ¿todo había sido en vano? Nuestra querida bruja de cabello verde salía de la habitación sin hacer ruido, dejando atrás todo por lo que había luchado hasta el momento, pues había perdido el rumbo, había perdido sus fuerzas, había perdido su motivación, había perdido su Luz.