DOS.

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Llegó la hora del almuerzo, Aisuru se sintió bastante nervioso, no debía ser tan difícil acercarse a las personas, además ya era amigo de Hitomi, no había razones para estar nervioso, o al menos era eso lo que repetía una y otra vez en su cabeza mientras caminaba en dirección a la cafetería, tratando de no desanimarse más de lo que ya se encontraba; durante las clases no tuvo la oportunidad de acercarse a nadie y se preguntó a si mismo si ya era demasiado tarde para hacer amigos, se sentía tan excluido y la idea de mantenerse al margen de todo hasta el final del año no era algo de su agrado.

—¡Hey, Kei! —la voz de Hitomi sacó a Aisuru de sus pensamientos, agradeciendo que ella estuviera ahí para salvarlo de un almuerzo solitario.

—Hitomi —la saludó con alegría notando como venía arrastrando a Shousuke detrás suyo— ¿Él está bien? —cuestionó con una pequeña preocupación, si no viera como su pecho se inflaba al respirar podría apostar que estaba muerto.

—¿Él? Pfff, por supuesto, él está genial ¿No es así Shousuke? —Hitomi miró a Shousuke por sobre su hombro, aún no daba respuestas por si mismo, pero eso no importaba, ella estaba ahí para salvarlo.

—Sí, me encuentro genial —respondió Hitomi, imitando la voz de Shousuke, Kei ni siquiera notó que era ella quien hablaba.

—Vayamos a una mesa antes de que se acaben.

Luego de decir aquello los tres se acercaron a una mesa libre y tomaron asiento, Hitomi les indicó que se sentaran y la esperaran ahí, que ella se encargaría de ir por el almuerzo de los tres, deseaba que Shousuke fuera capaz de mantener una conversación por su cuenta; Kei quiso aprovechar aquel momento para poder entablar una amistad con Shousuke, como mínimo poder tener una conversación donde, quizás, podrían intercambiar dos palabras.

—Estoy algo nervioso ahora mismo —admitió mostrando una sonrisa—, estoy consciente sobre que llegué algo tarde al año escolar y ahora no estoy seguro de ser capaz de integrarme al salón.

No hubo respuesta alguna por parte de Shousuke, Kei mantuvo la sonrisa en sus labios a pesar de ello, trató de hablar una vez más, pero, en cuanto abrió su boca para decir una sola palabra, Shousuke se levantó del asiento dispuesto a irse, no obstante, Kei no fue capaz de permitir aquello, se levantó de golpe tomando la manga del chico para evitar que diera un paso más.

—Espera, por favor, si dije algo incomodo, déjame empezar de nuevo —un nudo se formó en la garganta de Kei, estaba seguro de haber sido cuidadoso con sus palabras ¿Acaso era que su simple presencia molestaba a Shousuke?

Shousuke solo se soltó de su agarre y lo miró un instante, era solo una molestia más, un segundo Hitomi y no quería eso en su vida, aprovecharía esa oportunidad que tenía para alejarse y así lo hizo, sin decir nada se dirigió a la salida de la cafetería para dejar a Kei en la banca a solas, lo cual generó que Aisuru se sintiera realmente nervioso, una emoción familiar recorrió su cuerpo, estar tan fuera de lugar, esa sería la descripción que le daría.

Hitomi finalmente llegó y dejó la comida sobre la mesa, miró a Aisuru un instante y rápidamente buscó a Shousuke con la mirada hasta que lo encontró saliendo por la puerta de salida que daba a los pasillos de la escuela.

—Espera aquí, iré por él, solamente es un poco tímido —sonrió un tanto nerviosa estando a punto de irse, Kei la detuvo.

—Está bien, él dijo que iría al baño —mintió con una pequeña sonrisa.

—¿De verdad? ¿Él lo dijo? —Ella mostró una gran sonrisa al decirlo, totalmente distinta a la nerviosa que anteriormente mostraba.

Aquello dejó confundido a Kei, no obstante, decidió no realizar ninguna pregunta al respecto.

—Sí, eso dijo, creo que podemos comenzar con el almuerzo.

Con esas palabras, Hitomi tomó asiento y comenzó a almorzar junto a Kei, durante los primeros minutos, Aisuru no fue capaz de sacar las reacciones de Shousuke de su cabezal, quería preguntarle directamente si había algo que lo incomodara, pero, a pesar de aquellos pensamientos, no deseaba ser una fuente de molestia para Komi. Por suerte, conforme más platicaba con Hitomi era capaz de olvidarse un poco de la situación y relajarse, hasta que un pensamiento fugaz cruzó por su cabeza; Hitomi era amiga de Shousuke así que probablemente lo conocía mejor y de esa manera podría obtener una respuesta sin que fuera necesario preguntarle a Komi directamente.

—Oye, Hitomi ¿Crees que pueda estar incomodando a Komi de alguna manera? —preguntó directamente mientras jugaba un poco con los restos de su almuerzo.

—Pero qué dices, en lo absoluto ¿Qué te hace creer eso? Shousuke es simplemente malo haciendo amigos, es bastante tímido, pero tengo la seguridad de que él está más que feliz de ser tu amigo.

—No lo sé, ya es la segunda vez que dice que ira al baño cuando yo intento hablarle —continuó con su mentira, Shousuke ni siquiera había dado excusas, solo se levantaba y se iba lo cual lo hacía peor.

—Hmmm... Vale, te diré un secreto, pero no le digas a nadie ¿Está bien? —Kei asintió repetidas veces, Hitomi se acercó a su rostro para poder susurrar y Aisuru se acercó a ella para poder escuchar— Shousuke es bastante popular aquí, pero él siente que no encaja bien, es bastante inseguro, pero ese no es problema porque yo estoy aquí para ayudarlo, por eso soy su amiga; estoy segura que si lo ayudas él también te considerará un amigo como a mí.

Kei miró a Hitomi con asombro y alegría, ella verdaderamente conocía a Shousuke a profundidad, o ese era su pensamiento; lo que Kei desconocía era el hecho de que todas aquellas palabras dichas por Hitomi no eran más que simples deducciones erróneas a las cuales ella llegó por las razones equivocadas.

¡BUENOS DÍAS, SHOUSUKE! | KOMI SHOUSUKEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora