Profundo dolor... 2

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Saliendo de los túmulos funerarios iba un chico de túnicas blancas cargando entre sus brazos a su alma gemela, quien contrastaba su vestimenta con túnicas negras con rojo, pero desgraciadamente aquel color no solo era de la misma vestimenta pues desde que habían sacado aquella espada no dejaba de recurrir aquel líquido rojo sobre las pulcras túnicas de su compañero.

-- ¡Wei Ying! -- Lo llamo al notar como poco a poco cerraba los ojos.

-- Tengo sueño -- Susurro en un hilo de voz tras soltar un suspiro y no mentia, no del todo, la pérdida de sangre había sido muy notoria pues su cuerpo exigía recuperar energías con una buena siesta y el estaba desacuerdo... Pero solo con algo, cerrar los ojos...

-- No duermas -- Sonó como una orden, aquella voz había salido con una notable preocupación y desesperación, sentía de alguna manera que si lo dejaba cerrar los ojos sería la última vez que los vería y ese sentimiento lo asfixiaba, el solo pensar que jamás volvería a ver esos hermosos ojos grises lo hacía volverse loco.

Inconscientemente se aferro más a el al subir a bichen, suspirando de alivio al sentir su pulso, si era débil, pero estaba y eso era algo que agradecía, detrás de ellos, Nie Huaisang cargaba al pequeño niño, quien no dejaba de ver en dirección de sus padres o de quien el consideraba su familia.

-- ¿A-Niang va a estar bien? -- Pregunto con sus ojitos aún llorosos sin dejar de mirar la espada en donde iban ellos.

-- Lo va a estar, no te preocupes -- Le susurro acariciando su cabello, suspirando al ver la espada elevarse.

Nie Huaisang había subido con Jiang Cheng ya que su núcleo no se había fortalecido lo suficiente como para montar una espada, pero era más que notable la molestia que sentía al ver a Nie Husisang cargar a ese... Niño, por no decirlo de otra forma, no le gustaba, no le gustaba ver a ningún perro Wen, aun que fuera niño.

-- ¿Por qué A-Niang no despierta? -- Pregunto aferrándose al Nie soltando ligeros sollozos, estaba tan jodidamente asustado.

-- Por qué está cansado-- Respondio arruyando al niño entre sus brazos, con la esperanza de que se durmiera en el viaje y no molestar al ya estrenado líder de secta.

-- Pero va a estar bien ¿Verdad? -- Volvió a preguntar, realmente le preocupaba su Xian-gege

-- Si, va a estar bien -- Respondio.

El resto del camino había sido en silencio, pues nadie quería perturbar al líder de secta enojado y a un Jade preocupado, quien solo se concentraba en dos cosas, el pulso de su alma gemela y el control de energía en su espada.

La piel de Xiao Zhan se estremecio cuando un viento helado lo golpeo, lo supo, ahora sabía a donde habían llegado, los resesos de las nubes ese lugar en el que Lan Wangji había causado un fuerte "terremoto", ese lugar que ese pequeño revoltoso se encargo de poner todo de cabeza y milagrosamente no haber sido expulsado... O eso hasta la pelea.

Xiao Zhan lo recordaba, ese lugar realmente era idéntico al set de grabación en el que el que estuvo grabando y jugando con su alma gemela, hermoso, frío, grande, tranquilo y lo que a el más le gustaba en ese momento... Silencioso a sus ojos era un lugar perfecto para meditar, para pensar... Para descansar.

Miro de nuevo a quien lo llevaba en brazos y suspiro subiendo con dificultad su mano aún manchada de sangre fresca hasta el pecho del otro intentando alejarlo, intentando caer, alejarse, pero el mayor no lo permitía, se aferro aún más a el pegandolo a su pecho.

--La-Lan Zhan Por-Porfavor -- Suplico con gran dificultad, a estas alturas incluso respirar le era doloroso.

-- No hablar -- Ordenó, no lo negaría, amaba oírlo, amaba escuchar su pequeña voz riendo, jugando, burlándose de él, pero ese tono de voz no le gustaba, no de él, no le gustaba escuchar la voz agonizante del amor de su vida, lo hacía sentir impotente, dolido, le hacía sentir que a pesar de  terror terror sus brazos se alejaba cada vez más... Y eso dolía como el infierno.

-- Deberías hacerle caso -- Sugirió el líder de secta Jiang mirando con gran resentimiento al chico que el segundo Jade llevaba en brazos -- Si no lo sueltas ahora dejara en el clan Lan las mismas desgracias que trajo para los Jiang -- Su voz salis fria, como veneno y no podian culparlo.

Habia perdido mucho, sentia que su hermano lo habia abandonado y lo veia como el causante de todos sus males, lo veia como el asesino de su secta, de su hermana, de su cuñado "Todo es tu culpa Wei WuXian, todas las desgracias de la secta Jiang son por tu culpa" Habia gritado Madame Yu al sacarlos de aquel lugar... Ahora comprendia ese sentimiento... Ahora sabia que su madre tenia razón.

Lan Wangji solo le dedico una mirada gelida "No debes odiar" decia una de las reglas del muro en la secta Lan, regla que el segundo Jade estaba rompiendo con creses con la sola existencia del lider de la secta Jiang, desvio de nuevo la mirada, suavisandola al pasarla al joven en sus brazos, estaba temblando, su piel se estaba poniendo fria, ¿Que podria hacer el en un lugar asi? ¿Como podria defenderse en un lugar donde la energia espiritual era la principal forma de lucha? ¿Como se defenderia en un lugar donde todo mundo lo queria muerto? ¿Como?.

No tenia nucleo, no sabia contralar la energia demoniaca... Y estaba cansado... De luchar, de ir contra corriente... Solo queria dejarse llebar por la oscuridad.

--Lan Zhan porfavor -- Volvió a rogar ahora en un susurro pero de nuevo resivio una respuesta negativa.

Ellos solo querían que aquel lugar oscuro los abrazara y ya no sentir nada... No sentir los brazos rodeándolos de aquellos que se asemejaban a sus personas amadas, pero ellos lo sabían... Sabían que no eran sus almas gemelas y ese... Era su peor dolor.

-- Wang.. Yibo -- Llamo el chico desde la cama al despertar y darse cuenta de que aquel intento desesperado por desaparecer no había funcionado.

Suspiro al no escuchar nada mas que el pitido de la molesta maquila que segun habian dicho los doctores "monitoreaba su corazon"

-- Esta dormido... No se habia separado de ti y finalmente lo convensi de descansar -- Escucho una voz conocida, era esa misma voz que momentos antes había escuchado llena de odio, esa misma voz que había maldecido si nombre por lo más alto -- Xiao Zhan... ¿Estas bien? -- Intento acercarse para tocarle el hombro a su amigo, pero el ptro se alejo lleno de panico por ver a su hermano... No... Al lider de secta Jiang frente a el, Zhuo Cheng se asusto, abriendo los ojos impactado por la accion de su amigo -- ¿Xiao Zhan? -- Pregunto al ver como el otro se bajaba de la cama para evitar su contacto o siquiera su sercania importandole poco si las agujas en su cuerpo lo desgarraban al quitarselas de golpe, no queria, no queria escuchar de nuevo esas palabras tan irientes, no queria volver a escucharlo gritarle... No podria soportar de nuevo esa mirada.

Contigo Siempre Estaré (YiZhan/WangXian)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora