Capítulo II

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Mi primer día de escuela, yei... La gente me ve raro, ni siquiera lo disimulan; además de que un chico me gritó hoy por un libro, ¡un libro! No puedo creer que la gente sea así, parece que estoy condenada a pasarla mal en cualquier instituto al que vaya.

— Am, disculpa —mientras caminaba por los pasillos escuché a alguien detrás de mí, parece que me hablaba a mí así que me di la vuelta para ver de quién se trataba— ¿Estrella, cierto? —me preguntó.

—Soy yo.

— Me presento, soy Minutsuki, la presidenta de las clases 3-A y 3-B, es un gusto conocerte —mencionó extendiendo su mano.

— Ah... Un gusto, supongo —le contesté mientras aceptaba su saludo.

— Bueno, fue una sorpresa saber que tendríamos una nueva alumna en tercero —sonrió mientras me miraba pero tras mi mirar calló y prosiguió— Pero verás, quería saber sí te interesaba algún club o sí aún no sabes a que unirte, puedes ayudar con el festival de invierno, nos gusta anticiparnos y estamos viendo quién se ofrece a ayudar —mientras me explicaba sacaba hojas de una carpeta que traía consigo y me las extendió a lo que yo no hice más que tomarlas para echarles un ojo— Toma, ahí podrás ver información sobre clubes y en esta otra hoja está todo sobre el festival.

— Interesante —musité.

— No tienes que escoger algo ya, pero sería bueno que lo consideraras. Y si tienes alguna pregunta o duda sobre las clases u otra cosa, puedes hablar conmigo, de momento no hay un vicepresidente, pero anoté mis datos en el reverso de la hoja de clubes por si los llegas a necesitar —me sonrió gentilmente mientras sostenía su carpeta.

— Ou... pues, gracias, de verdad.

— Claro, no es nada. Y bueno, yo me voy porque tengo otras cosas que hacer, hasta luego. —se despidió y siguió su rumbo mientras yo me quedaba revisando esas hojas. ¿En serio debería unirme a un club? No creo que la gente esta a gusto conmigo.

Minutsuki parecía muy amable, aunque parecía un poco nerviosa al hablarme puedo ver que se esfuerza en su trabajo. Me preguntó sí tiene graves problemas con la vista, pues traía anteojos. No lo se, pero se ve veía muy linda con su peinado, me hace querer hablarle.

Continúe caminando por los pasillos sosteniendo las hojas, que ahora había doblado, para que no se me perdieran cuando de repente comencé a escuchar otra voz detrás de mí.

— Em, hola —no creo que ese hola haya sido para mí, sería raro que alguien más en el día intentará hablar conmigo.

— Oye, ignorar a las personas es de mala educación —otra vez escuché esa voz. Parecía ser masculina, sonaba amable y tranquila. Creo que esta vez si me hablaban a mí.

— ¿Qué es lo que quiere? —dije mientras daba una media vuelta pero al hacerlo me quedé en silencio de la sorpresa, era el chico castaño.

— ¡Hey! Deberías guardar un poco tu mal humor, así solo vas a espantar a la gente —rió para si mismo— Mi nombre es Jhon, un gusto.

— ¿Jhon?

— Sí. ¿Recuerdas que me pediste el libro prestado? Bueno... algo así

—Oh, sí...

— Pues, ese aún no lo termino, pero es parte de una trilogía de ciencia ficción, así que decidí darte esto —el chico me extendió un libro y yo lo tomé con cuidado— Es la parte uno, cuando lo termines me avisas y así puedo prestarte la parte dos. Además, podemos hablar sobre el libro y sobre qué te pareció. Claro, sí gustas. —sonrió mientras sus ojos se enfocaban en mí.

Estrella y su melancolía [Re-edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora