【 Sixth Cliche】

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Title: Cliché

Ship: Adrinette / Alyno

Genre: AU, Romance, Comedy, Fluff, Friendship

Word count per chapter: 2,400+

Word Count: 26,500+

Rating: PG-13

Chapters: 6/15

Beta: noestribar

Disclaimer: Si fueran míos, esto no sería escrito, sería vídeo :v

Music: El diablo by Fobia

Los comentarios, las estrellas y las galletitas me hacen feliz. ✨


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Marinette pensó casi una hora sobre qué ponerse. Se puso de pie frente a su closet y miró sus prendas, completamente perdida. No sabía qué ponerse.

Eventualmente, renunció a la idea de tratar de pensar qué prenda bonita usar, no tenía muchos vestidos, de hecho no tenía ningún vestido, generalmente siempre usaba shorts o jeans, y se decantó por una camisa blanca y unos jeans negros de cintura alta que se ceñían a sus piernas como segunda piel, un blazer negro y zapatillas bajas, se maquillo como siempre, simplemente delineador y brillo labial. Revisó su reflejo en el espejo de la habitación de sus padres y se sintió ridícula, antes de meticulosamente arreglar su cabello justo antes de las seis.

Sintiéndose extrañamente nerviosa, esperó en la puerta a que Adrian llegara, aferrada a su celular y a la pequeña bolsa que llevaba consigo.

Pasaron 5 minutos. Y nada de Adrian.

'A las 6, sí claro,' pensó amargamente. Si Adrian era bueno en algo, era en llegar tarde.

Otros 10 minutos pasaron, y Adrian aún no llegaba ni enviaba ningún mensaje. Marinette estaba empezando a preguntarse si esa llamada había existido o lo había soñado.

Justo antes de darse por vencida y enviarle un mensaje a Adrian, tocaron la puerta haciendo que saltara antes de rápidamente abrirla. Ahí, al otro lado estaba Adrian, vestido con su camisa celeste, jeans y con el cabello arreglado hacia atrás.

—Whoa,— Adrian dijo, mirándola. —Te ves bien Marinette Dupain-Cheng.

Marinette tuvo que aclarar su garganta antes de responder.

—Pues tú también.

Hubo un momento de silencio, y entonces Adrian sonrió.

—Bueno, um, vámonos. Dejé el auto en marcha.

Marinette asintió y siguió a Adrian, admirándolo. Podía oler el perfume de Adrian y sentía que estaba hipnotizándola. El aroma se hizo más intenso dentro del auto, y Marinette se preguntó dónde podría encontrar el perfume porque de verdad le gustaba. En especial con Adrian vestido así. Esta era una maravillosa combinación y Marinette estaba teniendo problemas al pensar bien.

Adrian miró unas cuantas veces a Marinette mientras se colocaba el cinturón de seguridad – lucía algo inseguro.

—Y, uh, ¿a dónde vamos?— Marinette preguntó.

—Ya verás.— Adrian respondió mirando la carretera.

Marinette frunció el ceño.

—¿Habrá comida? Porque aún no he comido y me estoy muriendo de hambre.

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