❤︎𝐿𝑒𝑗𝑜𝑠 𝐷𝑒 𝑇𝑖❤︎

Especial de Navidad

La nieve ya comenzaba a caer, el espíritu navideño ya se sentía, a pesar de que faltaran 3 semanas para aquella hermosa época, todos comenzaban a comprar adornos y regalos.

Y _______ no era la excepción, se encontraba entre toda esa bola de gente, tratando de conseguir los regalos ideales para su familia y sus amigos.

—¡Vaya!¡Esto es muy lindo! —Extendió la chamarra y la observó.

—¡Oye Naruto, mira eso! —escuchó un grito de entusiasmo a unos metros de ella, y se giró esperando ver a su amigo.

Y dando justo en el blanco, encontró a su amigo rubio junto con su alegre y dulce madre.

Sonrió al verlo y se acercó a ellos sin borrar su alegría y saludó agitando su mano.

—¡Naruto!¡Señora Kushina! —Voltearon a su dirección, la joven pelirroja sonrió al ver a esa chica y la saludó con el mismo entusiasmo.

—¡Hola linda!¿Cómo estás? —Comenzaron a hablar, dejando de lado a el joven ahí presente, éste sólo los miraba sin hablar.

—¿Estás libre ahora linda?¿Te gustaría ir a comer a nuestra casa conmigo y Naruto? —Preguntó, mirando a la señorita frente a ella, la muchacha negó con la cabeza con decepción.

—Me gustaría mucho, pero debo seguir haciendo las compras navideñas. —Sonrió un poco, mirando a su hijo, codeó a este, guiñándole un ojo y señalando con la mirada a ______.

—¿Te parece si mi hijo te acompaña?No quiero que te pase algo malo —Sonrió "inocentemente", la joven miró a su amigo y sonrió.

—Eso estaría muy bien, pero no quiero molestar o algo por el estilo. —Sobó su nuca nerviosa sin saber cómo negarse ante eso (cuando claramente le encantaría)

—No es molestia. — Sus ojos se abrieron con sorpresa al escuchar la respuesta de su amigo rubio.

"¿En serio es Naruto?" Pensó mirando como la tomaba de la mano, guiandola por el mercado, despidiéndose de su madre y caminando junto a ella.

Sacudió su cabeza, tratando de olvidar eso y reafirmar su agarre.

—¿A dónde iremos primero?. Preguntó, observandolo con una enorme sonrisa.

—No lo sé. —Observando a su alrededor, sujetó su bufanda con fuerza y miró a su acompañante.

—¿Que te parece si caminamos sin rumbo? —Propuso, cerrando sus ojos y esperando su respuesta.

—Bueno. —su sonrisa se agrandó, para comenzar a caminar entre toda esa gente, observando a su alrededor y quedando sorprendidos por todo.

—¡Mira eso! — Con entusiasmo, gritó llevando arrastrado a su amigo.

—¡Wow! ¡Son muy bonitas! —  tomó una de las pequeñas pulseras de plata y la admiró.

— ¿Te gusta? — asintió con la cabeza, dejando la pequeña pieza delicadamente en su lugar de exhibición.

— ¡Sip! ¡Son muy lindas! — el chico rubio, miró confundido a su acompañante.

— Te noto más feliz que de costumbre. —  la señaló con el dedo, recibiendo una sonrisa nerviosa de la muchachita.

— Lo siento, es que...me emociona mucho esto de la Navidad, ¿Sabes? Los regalos, los villancicos, ¡Todo! — rió divertida.

A pesar de haber festejado muchas veces está festividad con su familia, nunca se había sentido confundido y atraído tanto.

— ¿Y, que es lo que más te gusta?

_____ frotó su barbilla pensando, todo le emocionaba mucho, pero había algo que la hacía sentir muy feliz.