Cabaña

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AU vida cotidiana

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Jason estaba más que frustrado, había terminado con su novia de casi toda la vida, Piper.

Y lo más frustrante es que ella ya consiguió pareja, después de un mes de su ruptura.

Era una linda chica de su pueblo natal.

Él estaba viendo las fotos de su ex con su nueva novia, en Instagram.

Es horrible tener un corazón roto y más horrible es estar solo en navidad.

Ya que la fecha se acerca y muy rápidamente.

Él pensaba pasar la navidad con su familia, pero eso sería imposible.

Su madre está muerta, falleció en un accidente de tránsito.

Su padre estaría trabajado a pesar de la fecha.

Su hermana, Thalia, se iba de viaje junto a su novia Reyna.

Su mejor amigo Leo, estará en México para estar con su familia por parte de madre.

Así, que como un hombre desesperado por salir de su casa y por lo menos estar solo en otro lugar, comenzó a buscar en internet.

Hasta que encontró un anuncio, un alquiler de cabañas en las afueras de Manhattan.

Era lo que necesitaba, respirar nuevo aire.

Así que, hizo todo lo necesario para poder alquilar una cabaña.

Será bueno poder de salir de su zona de confort.

...

— Disculpe, vengo por las llaves de mi cabaña — Dijo el rubio.

El tipo que lo está atendiendo, era un chico de cabello rubio, sus ojos eran azul cielo, su piel estaba algo bronceada, era de una estatura más alta que el promedio y unas notorias ojeras.

— Si por favor me puede dar su factura — Pidió el joven, Jason le tendió su celular, ya que todo lo había hecho en línea.

El chico rubio, lo reviso, mientras anotaba algo en un libro.

— NICO, PASAME LA LLAVE DE LA CABAÑA 3 — Grito el chico, después de regresarle el teléfono a Jason, de la parte tracera a pareció un chico pelinegro, que cargaba a una bebé de unos 5 meses, la niña tenía los ojos iguales a los del rubio que atendía a Jason y su cabello y tono de piel, era iguales al chico llamado Nico.

— Solace, cállate que me estresas — Pidió Nico, mientras le tiraba unas llaves. — A la otra mueve tu tracero para ir por ellas.

— Yo también te amo — Dijo el rubio, mientras el pelinegro solo se dió la vuelta y regresaba por dónde vino, no sin antes de mover la mano como si no le importará.

— No te preocupes por él, solo está cansado — Pidió Solace.

— Gracias joven.

— Will, puedes decirme Will.

— Jason.

— Espero que disfrutes tu estancia — Dijo el chico de ojos celestes, entregándole las llaves y mostrandole una gran sonrisa.

One shots de Semidioses en Navidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora