• ⁴ •

11 2 0
                                    

• POV LAUREN

Mierda, mierda, mierda, ¿que coño hago?

Pareciera que tuviera otra persona dentro de mi.

Jajajaja, que chiste.

Todo me parece gracioso.

Oh, verdad. ¡El momento!

Piensa rápido, piensa rápido. No la cagues Lauren, Vamos, vamos.

- Tenia tiempo sin verte, Ana... - Mi voz perezosa y con una sonrisa traviesa se hicieron presente. El ceño fruncido de Camila y sus labios me hicieron comprender que sentía alguna molestia o extrañeza.

Tampoco sé que pasa por su mente, son suposiciones...

Quiero ser mago, tururur
Para poder adivinar que calzones traes tururur

Digo, pensamientos.

¡Regresa al mundo!

- ¿Ana? - Manteniendo su ceño fruncido.

- ¿No eres Ana? - Abro mi boca sorprendida y río bajo como una idiota. - Lo siento. - Me acuesto a su lado. - Estoy medio miope.

- No estas tan borracha para confundirme y menos ciega. - Coloca su cuerpo a un lado para verme mejor, yo solo giro la cabeza.

- Lo sé, quería ver tu reacción, fue la mejor. - Mentí, si quería besarla. - Parecías muy asustada. - Río casi sin gracia, sintiendo como mi alrededor se mese con suavidad.

- Eres una idiota, claro que me asustaste. - Golpea mi abdomen y me encojo un poco. - Creí que me ibas a. - Calló de golpe.

- Besar, - Complete. - sería muy malo de mi parte, tienes pareja. - Siento la punzada en mi corazón.

- ¿Si no tuviera? - Preguntó, quede pensativa por un momento. La pregunta quedó en el vacío, había cerrado mis ojos sin quitar mi sonrisa.

- Lo averiguaremos. - Intente imitar la voz de Sam de iCarly y ella se ríe.

- ¿Por qué llegaste aquí borracha? - Me sonríe, yo solo bufo.

- Ally no estaba con nosotras, Normani y yo fuimos a una pequeña fiesta, no sé como terminamos bebiendo de más poniendo retos estúpidos. Luego se me ocurrió la brillante idea de retarla a que fuera a la casa de Dinah y se quedará allá, si a la mañana no tiene pruebas deberá hacer mis deberes por un temporada y así hizo ella conmigo, me mandó contigo porque sabría que Ally me aceptaría y me mataría. Ya se lo hemos hecho varias veces...- Conté la historia recordando esos momentos.

- Pobre Normani... - Suelta apunto de reírse, mi cara llena de preguntas hizo que prosiguiera. - Te lo contaré mañana o ellas te lo contarán. Necesitan un psicólogo. - Se levanta de la cama, apenas se veía el cuarto pero ella sabía perfectamente donde están las cosas, se escucho un pequeño ruido- Vamos a dormir, quítate la ropa y te daré algo ligero. - Siento mi cuerpo pesado, poco a poco me fui quitando la ropa. Ella me pasó una camisa de tirantes y una bermuda. Ella se pone a buscar una sabana mientras yo me visto.

Su cama era tamaño matrimonial, se arropa con su sabana gruesa mientras yo con una sabana fina, mi cara debió ser un poema mal escrito.

Agarro la sabana de Camila y lo jalo hacia a mí.

-¿Qué haces, Lauren? - Se voltea desconcertada.

- ¿Quieres que me de una hipotermia?

- No hay tanto frío.

Tapa, Tapita ¡TAPON! (Camren).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora