Han pasado más de dos semanas y mi rutina se ha vuelto ya muy clásica. Aunque Ryujin aquella vez me dejó con la intriga de lo que quería decirme decidí olvidarlo y así reanudamos nuestros encuentros. Ahora voy a la escuela con Lia pero regreso con Ryujin y muchas veces se queda a comer conmigo.
Parece que al final de cuentas Lia se ha dado por vencida con sus advertencias y me deja seguir entrando en confianza con Ryujin, la cual también se ha ido sintiendo más cómoda con mi compañía...y claro, yo con la de ella.
En la escuela sigue siendo lo mismo de siempre, me molestan o ni siquiera me registran pero ya no es muy de mi incumbencia ya que paso las horas pensando solo en ella y en cómo la pasaremos juntas. Después de tanto Ryujin sigue siendo un misterio para mí, un misterio tan lindo.Llega la hora de salida y me voy casi corriendo como siempre pero no la encuentro así que sigo avanzando hasta la universidad. De repente caigo, si claro otra vez, como siempre pero ahora no ha sido mi culpa...un chico bastante grande y con cara de orgullo me ha puesto el pie para hacerme caer fuertemente el piso y todos ríen, en especial él y su grupo de acompañantes.
Me quedo en el piso no solo por el fuerte choque sino también por la vergüenza que me consume hasta que llega ella y me levanta de inmediato dándome un gran y hermosa sonrisa.
-joder siempre es lo mismo, deberías tener más cuidado-dice riendo pero en seguida cambia su expresión a una más seria cuando escucha la risa de aquel chico.
-gracias-digo nerviosa y ella me empuja haciéndome a un lado.
Se dirige hacia él y lo señala furiosamente.
-tan hombre eres para molestar a una niña-dice agresivamente y el también cambia su expresión.
-genial llegó la rara-se burla y la empuja demasiado fuerte haciéndola caer.
Intento acercarme pero ella se levanta casi de inmediato y también lo tira al piso. En seguida los demás chicos que estaban junto con él la toman por la espalda y la someten dejando que la golpee sin compasión. En total son 3 contra 1 y yo entro en gran desesperación pero no puedo hacer prácticamente nada para ayudarla. La golpean y ella no se puede defender, hasta que con la pequeña distracción de sus captores puede safarse y alejarse un poco para recuperar algo de aliento.
-muy bien Shin, ¿tuviste suficiente?-pregunta el tipo cínicamente.
-eres un bastardo, podrás matarme pero no permitiré que la molestes-dice Ryujin limpiándose la sangre del rostro.
De nuevo se le intentan acercar pero Ryujin responde rápidamente lanzándole un golpe en la cara al principal rompiéndole la nariz, los otros de nuevo quieren sostenerla pero a lo lejos se escuchan unas sirenas de policía que en un abrir y cerrar de ojos los aullentan sacándolos corriendo del lugar.
Me acerco a ella con cautela ya que se encuentra totalmente herida y apoyada sobre sus propias rodillas para poder sostener su cuerpo.
-¿estás bien?-pregunto tocándole la espalda.
-de maravilla-responde con su linda sonrisa levantando la mirada hacia mí.
-vámonos, te curaré en mi casa. ¿o prefieres ir a un hospital?-cuestiono amablemente.
-la verdad prefiero mil veces que lo hagas tú-sigue con su sonrisa que me derrite por completo.
Se endereza con dificultad y me toma de la mano para empezar a caminar, me la toma de una manera algo brusca pero me encanta sentir su calor aunque sea de esa forma...en realidad solo rodea mi muñeca con su gran mano y noto que sus nudillos están morados pero ella no dice nada al respecto.
Llegamos a mi casa y mi madre no está así que entramos sin problema, la intento llevar a mi cuarto y ella no quiere hasta que por fin accede con algo de nervios. Se sienta en la cama mientras yo atiendo las heridas de su cara delicadamente, en cuanto termino me agacho y levanto su camiseta haciéndola sobresaltarse y se para de inmediato totalmente sonrojada.
-¿qué haces?-desvía su mirada.
-tienes heridas en el abdomen, las iba a atender-explico como si nada.
-ah, bueno eso no es necesario.
-¿por qué? Ryujin por favor...no es nada solo déjame curarte-pido y ella asiente levemente.
Se sienta de nuevo pero esta vez se quita lentamente la camiseta dejando a mi vista su lindo abdomen.
Me quedo congelada ante lo que veo y ella tiene la vista desviada evitando hacer contacto visual conmigo.
-¿qué pasa?-pregunta al notar mi falta de reacción.
-no, nada. Solo que tienes muchos moretones-me excuso y comienzo a tocarla para colocarle un ungüento.
Deslizo mis manos por todo su trabajado abdomen y me estremezco a tal punto de imaginarme dejándole besos allí. Ella permanece en silencio y evitando cruzar miradas pero no tiembla como lo hacen mis manos en este momento.
-estoy cansada-anuncia en cuanto termino de acariciarla.
-lo sé, si quieres puedes descansar aquí
-¿en tu cama?-pregunta aún sin mirarme a los ojos.
-no hay problema con eso. Puedes dormir mientras yo preparo algo de comer y más tarde ya podrás marcharte-explico y ella me regresa a ver algo intensa.
-lo haré...lo siento por las molestias causadas pero en serio quiero dormir
-no es ninguna molestia, descansa-acaricio su rostro y ella me mira con sus ojos brillantes.Se levanta y acomoda las mantas para meterse en ellas, yo la observo pero una vez la veo acostada salgo para no incomodarla. Me voy a la cocina y me quedo ahí por largo rato pensando en lo que acaba de suceder.
ESTÁS LEYENDO
Love Chat
Fanfiction¿Eres capaz de encontrar el amor sincero? Shin Yuna lo descubrirá con el método menos convencional: A través de nada más y nada menos que de una pantalla de celular. Relato desde la perspectiva de Yuna. -Soft, Lemon, Ryujin G!p -Fanfic 2shin -En est...