⌗ Sweet Alpha | Jenlisa

8

"No durarán nada" decían algunos, "simplemente están ciegas, luego Lisa se dará cuenta de con quién está saliendo" decían otros.

A lo largo de su relación, la dulce Alfa junto con su Omega tuvieron que soportar bastantes críticas por parte de las demás personas.

Pero a la mierda, ellas no dejarían de amarse solo porque las demás personas no querían o no creían que ellas dos tenían algo.

Cuatro años habían pasado desde que formalizaron su relación, demostrándole a las demás personas que por los gustos de la Alfa no dejarían de amarse.

Claro, en su tercer año de relación Jennie no aguanto más las ganas, simplemente se arrodilló delante de Lisa con una pequeña caja.

Aquella caja contenía un hermoso anillo con un diamante rosado en el centro, perfecto para Lisa.

Jennie, delante de todas las personas en un parque, pidió la mano de Lisa, este con hermosas lágrimas cristalinas aceptó la propuesta de la Alfa.

Ambas habían tenido su boda de ensueños, cualquier matrimonio elegiría esos típicos colores blancos o negros para el día más importante de sus vidas.

Pero si ellas querían que su día fuera inolvidable, lo hicieron con sus gustos. Todo el salón e incluso los trajes de ambas estaban de un hermoso color rosa pastel.

Ambas amaban ese color, así como el blanco o incluso el negro, pero sin duda querían que su boda de llevará a cabo con su color favorito.

Fue una ceremonia hermosa, lágrimas por parte de Lisa y de Jennie, sus cabezas eran adornadas por bellas diademas de flores de varios colores, ambas tenían una pequeña diferencia, la de Lisa sostenía el velo que cubría transparentemente las hermosas facciones de la Omega.

Todo fue totalmente hermoso e inolvidable, sus amigos y familiares los felicitaron. Ambas cada vez más se unían a sus vidas.

El sexo tampoco faltaba, aunque claro, Jennie usaba condón o Lisa tomaba pastillas para evitar el embarazo, en esos tiempos aún no se sentían preparados.

No hasta que Jennie y Lisa pudieron tener una buena estabilidad económica y conseguir su propio hogar.

Ambas trabajaron duro para poder conseguir sus sueños, Jennie había logrado fundar su propia empresa, al principio no fue tan reconocida, pero luego ganaría éxito.

Era una empresa dedicada al entretenimiento, actores, modelos y cantantes salían de la empresa de Jennie bien preparados y listos para seguir adelante.

Por su parte, Lisa logro volverse maestra de danza, muy profesional en lo que se dedicaba, aquélla dulce y tierna Omega era una total bestia al momento de que la música sonaba en todo el salón.

Jennie había contratado a su propia esposa, sonara raro, pero Jennie y Lisa estuvieron ahí apoyándose en todos los sentidos. Así que eso era lo mínimo que Jennie podía hacer por su Omega.

Jennie no era celosa o algo por el estilo, no le molestaba que varios Alfas y Betas mirarán a su Omega bailar y producir ese hermoso arte que hacía con su cuerpo.

Ambas habían progresado juntas en su vida, así que ya se sentían preparadas para el último nivel. Pequeños cachorros en su vida.

—Mi amor, sabes que yo nunca te voy a forzar a hacer nada que tú no quieras.—La Alfa acaricio dulcemente la mejilla de su Omega

—Mi adorable Alfa, sabes que ambas estuvimos platicando mucho sobre tener cachorritos en nuestras vidas, sabes que yo estoy lista para eso.—Jennie sintió su corazón acelerarse más y más con esas palabras

—Mi amor, mi dulce y bella Omega, déjame decirte que yo, Jennie Kim, Alfa y esposa de Lalisa Manobal, estoy lista para dejar mi semilla en tú interior.—La Alfa cargo de manera nupcial a su Omega

Previamente ambas estaban viendo películas juntas, era su costumbre, después de todo hoy tenían un día libre en sus agendas.

De la nada, ambas se habían puesto más cariñosas de lo normal, habían muchos besos tanto tiernos y dulces como necesitados y calientes.

Ambas liberaban sus dulces feromonas, inundaron las fosas nasales de la otra con ese aroma que tanto amaban.

Y entonces ambas los supieron, era el momento indicado para engendrar su primer cachorro.

No estaban en celo, pero sentían que necesitaban la una de la otra. Su conexión era demasiado fuerte, ambas sentían la necesidad de la otra sin que hubieran palabras en camino.

Jennie sabía cuándo su Omega estaba mal y deprimido, Lisa sabía cuándo su Alfa estaba enojada y molesta. Ambas sentían lo que sentía la otra.

Aunque simplemente fuera difícil de creer, ambas estaban destinadas a estar juntas, dos almas que se encontraron y unieron sus vidas de la mejor forma posible.

Respeto, amor y entre otros valores florecían en esa relación, si ambas querían respeto y amor, tenían que dárselo a su pareja.

Jennie Kim y Lalisa Manobal estarían juntas para toda su vida, ya era hora de tener un hermoso cachorro con los mejores rasgos de ambas.

Mientras Jennie quería que su cachorro tuviera más rasgos de su Omega, Lisa quería que tuviera más rasgos de su Alfa. 

Querían que su cachorro fuera hermoso, y que mejor que sacar los rasgos de la otra.

Pero aquellos genes se verían mejor juntos, y eso era lo que iban a hacer, Jennie daría su parte y Lisa la suya.