Druig y Makkari

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significante

Resumen:

Druig tiene la costumbre de besar el dorso de la mano de Makkari a lo largo de los siglos.

Creación.

La primera vez que le toma la mano, la piel maravillosamente suave debajo de la suya, piensa que nunca más encontrará nada que le quede tan bien.

Lo levanta con suavidad, le da un delicado beso en la parte posterior de los nudillos pecosos. Soy Druig.

Ella retira la mano de él y, por un momento, él se siente abrumado por la pérdida. Entonces ella comienza a crear, a comunicarse, a hacer señas, y su movimiento es tan cautivador que él descubre que no le importaría no tomar su mano, si eso significa que ella le hablará así.

Makkari.

Él levanta la barbilla, una pequeña sonrisa aparece en su rostro, y cuando ella copia la acción, con un desafío juguetón en sus ojos, él se ha ido.

2000 AC.

Se ha fundado la ciudad de Mantua, se ha descubierto el vidrio y los desviados parecen estar dándoles un respiro.

Mantua lleva el nombre de una de las historias de Sprite, el dios etrusco Mantis, y los eternos estaban sentados escuchándola contar el mito a un grupo de habitantes apiñados en la zona.

¿Crees que algún día nos convertirá en dioses? Druig pregunta, acercándose para hablar por encima del hombro de Makkari. Ella se vuelve para mirarlo, y él no extraña la forma en que ella se inclina ligeramente hacia él.

'Espero que no. No quiero ser un Dios '.

'¿No?' Él toma su mano y ella se gira para mirarlo apropiadamente con el toque. 'Diosa Makkari, contaría historias de tu belleza y gracia'.

Druig se inclina profundamente y le da un beso fantasmal en el dorso de la mano. Él levanta los ojos rápidamente, una sonrisa burlona en su rostro.

Makkari le devuelve la mano. Como Diosa, quisiera que te desterraran.

"Como Dios, me desterraría a mí mismo".

Como tu diosa, te prohibiría deshacerte de tu destierro.

'¿Mi Diosa? ¿Eres mía, Makkari?

Sus manos se quedaron quietas por un momento. A la luz del espectáculo de fuegos artificiales de Sprite, Druig casi pierde el tinte de sus mejillas.

—Un desliz de la mano.

'Estoy seguro.' No puede evitar la sonrisa en su rostro.