-¡Chicas no lo van a creer pero hablé con Dios!- suelto llegando hacia ellas.
Las tres abren los ojos y hacen una pequeña o con sus bocas.
-¿Dios está en el baño?- Lizzie pregunta cómo si fuera lo mejor que ha pasado.
Yo asiento rápidamente y Scarlett se lleva una mano a su boca.
-¡Sabía que si existía, lo sabía!
-Es un milagro-Sara se une a la conversación-Omg no me digas que...- ella me ve a mí y baja la mirada hacia mi vientre-¡Eres la elegida!
Yo niego sin poder creerlo y Scarlett dice que es un milagro, mientras Lizzie llora.
-No, no, no él me dijo que vendría por mí-me quedo petrificada al entender-¡Ay dios mío me voy a morir!- digo empezando a llorar.
>>Me voy a morir y lo último que comí fue la galleta que me dio aquel hippie-señaló al hombre-Ni siquiera comí mi última hamburguesa, ni le confesé mis sentimientos a Tom-me limpio las mejillas- Y soy tan patética que imagino que está viniendo hacia mí.
Mis amigas voltean a ver a la dirrección donde he señalado.
-Pues la galleta me afectó porque yo también lo estoy viendo y no solo a él si no al imbécil de su hermano-Sara habla.
Los dos chicos creado por mi imaginación se acerca hacia nosotras y el mayor suspira aliviado al verme.
-Definitivamente estoy loca o es un sueño.
Tom suelta un suspiro y se acerca a mí.
-Creo que la fiesta ha terminado para ustedes- habla finalmente mientras coloca ambas manos en mis mejillas evaluando que estuviera sin ninguna herida.
-Yo no voy a ir a ningún lado con este-la rubia habla llamando la atención de todos, mi mejor amigo suelta un quejido para agacharse y tomar a la pequeña chica como un saco de papas-¡Sueltame mal nacido y quita tus manos de mi trasero- dice batallando.
-Nos vemos luego chicos, hermano yo llevaré a Sara tu encárgate de Andrea- Tom asiente y ambos se marchan la rubia aún soltando maldiciones.
-Creo que tomaremos un Uber-Scarlett habla tomando a Lizzie del brazo.
El castaño niega.
-Chris está afuera, él las llevará a ambas- ellas se muestran de acuerdo y se despiden para ir hacia la salida del club.
Yo solo hago una mueca y me cruzo de brazos viéndolo mal.
Tom observa todo con diversión.
-Creí que habíamos dejado estos momentos atrás, juro que te oí decirme hace un año que no volverías a beber en exceso-me mira enarcando una ceja.
-La personas cambian de parecer-me defiendo.
-Vamos princesa te llevaré a casa.
-¿A tu casa?
-Ay un problema con eso?-pregunta.
Yo niego.
-¿Vas a caminar o prefieres que te cargue?
-Yo puedo caminar- digo para dar un paso y casi caer de cara si unos brazos no me hubieran sostenido.
-Creo que es más seguro si te llevo-dice para levantarme sin dejar que yo me muestre en desacuerdo.
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