𝐃𝐢𝐛𝐮𝐣𝐨𝐬 || 𝐌𝐜𝐋𝐞𝐧𝐧𝐨𝐧

₀₀₉

Hola estoy triste
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009: Dulce
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John llegó al salón de clases solo de milagro, tenía ojeras en los ojos y también la cara más larga y cansada de la historia, lanzó su mochila a la banca más cercana y se dejó caer en la otra. Su pelirroja amiga se acercó hacia él para poder verificar su estado, o al menos ver si estaba con vida.
—Sigue vivo. ¿Te atraparon ayer?

Negó soltando un jadeo. —No... Fue horrible llegar a casa, siento que me cortaron todas las extremidades... ¿Y qué pasó contigo?

—Escapé con Maureen, la novia del amigo de tu novio, adoro a esa mujer; si no tuviera pareja ya le hubiera pedido salir conmigo.- Ella rió de forma coqueta, pero John solo pudo darle un suave golpe en el hombro, ni siquiera tenía la fuerza suficiente para ser llamado golpe.
—Entonces...¿Solo se fue?

—Si, ni siquiera me alcancé a despedir pero espero no se vaya metido en problemas, le mandé mensajes pero... Nada. ¿Crees que lo castigaron?

Jane encogió los hombros y se sentó en su asiento, el maestro llegó como Dios lo trajo al mundo; En contra de su voluntad.
—Bien, bien, ustedes no quieren estar acá, yo menos. Así que solo háganme un resúmen de la página 24 a la 27, del libro de... Estética. Listo, buenas noches.

El maestro se dejó caer en el escritorio y todos se miraron entre ellos, clase libre supongo.
—Debí quedarme en casa.- John se levantó de su asiento y salió del salón, si no está Paul McCartney entonces lo buscaría por su cuenta.

╰●╮

Paul tenía tanta flojera como su amigo Ringo, quien había perdido la mitad de las clases por darse el gusto de dormir cinco minutos más, y Paul simplemente había salido de la primera clase para probablemente jamás volver.
—No puedo creer que perdí mi celular...

—Ya te dije que está metido en tu chaqueta, debes buscarlo con más ganas, quizá salió volando cuando entraste por la ventana.- Ringo soltó el humo del cigarrillo.- ¿Te dijeron algo?

Negó. —Que suerte la tuya, hermanito.
Ringo apagó su cigarro y justo cuando estaba dispuesto a irse para seguir durmiendo en su auto, John se detuvo a su lado y se sentó de inmediato en el suelo, jadeando en busca de aire. —¿Qué carajo? ¿estás bien, John?

Asintió.
—Solo... Necesito... Aire...- Sonrió.- Paul, ¿dónde estabas?, estaba preocupado, creí que... Te habían castigado, me preocupé, incluso estaba pensando en hablar con tu papá para que no te dijera nada feo.

Ringo miró a Paul con los ojos más brillantes y emocionados de la historia, como si supiera las intenciones del castaño. Paul parpadeó un par de veces para asimilar lo ocurrido, y después de unos segundos sonrió y señaló su asiento libre.

—Eres... Muy amable con eso...- Se mordió el labio, girando su cabeza a otro lado para evitar ser visto, ¿estaba avergonzado y agradecido con eso?

—Yo los dejo solos... No hagan nada que yo no haría.- Señaló a Lennon amenazante y se fue corriendo de ahí, ambos chicos rieron y luego se quedaron en silencio.

Pero no era un silencio incómodo o algo que fuera a molestarlos, de hecho era... Tranquilidad. Paul volvió a verlo, esta vez con más calma a comparación de antes.
—Mmm... ¿Tienes tarea?- Susurró. ¿De qué se supone que podían hablar? John pensó por un momento y luego reaccionó.

—Algo de estética.- Paul hizo una mirada de extrañeza.

—¿De qué?- Comenzó a reír.- En mi vida había oído algo tan raro. ¿Qué es eso?, ¿es una materia?

Asintió.
—Uhh, estética, sí...- Pensó.- La estética es la ciencia que estudia el arte, su significado, sus representaciones, etc, básicamente estoy estudiando algo como "introducción al arte." Tipo de obras, expresiones, ya sabes... Esas cosas locas...

«Ohh» Paul se acercó más a él, definitivamente eso le había llamado la atención. —O sea, es de tu carrera.

—Sí, exacto.

—Cuéntame más de eso, entonces.

Jamás había tenido a otra persona interesada en su rutina o materias, salvo a sus compañeros pero ellos no cuentan en lo absoluto.
—¡Haha, okay! ahí hablan de las 7 bellas artes, los tipos que hay de comunicación en el arte, que si social, político... Eso lo vi en el bloque pasado de hecho, haha... Es divertido, creo. Quizá pienses que es aburrido, siempre estoy analizando pinturas y sus detallitos. Eso llega a ser tedioso.

Pensó que había hablado demasiado de sus cosas aburridas y absurdas, pero cuando dio una rápida mirada a su compañero... Supo que estuvo prestándole atención todo este tiempo. —Hah... ¿Te gusta el arte?

—Sí... Me hubiera gustado ser artista.

—Tu ya eres un artista, eres un escritor fantástico y eso es arte, eres un artista ya.- Acercó su mano hasta su cabello, aunque no sabía si esa acción sería permitida por Paul o si le molestaría, pero aparentemente no fue así.

—Supongo, me hubiera gustado dibujar pero no soy un buen dibujante.- Tosió.-—Creo que solo pensaba eso porque en secundaria me gustaba dibujar y decían que era bueno, pero mi mamá me dijo que eso no me llevaría a ningún lado; ¡pero tenía razón, dibujar no es mi fuerte!

—¿Y dejaste de dibujar?

—Sí. Soy mejor escribiendo, ¿no te parece?

—Tienes razón, pero me gustaría ver un dibujo tuyo algún día. ¿Te gusta esa idea?

Extendió la mano para que Paul la estrechara gustoso, y eso mismo fue lo que ocurrió sumando que Paul reía avergonzado.

—Pero no me hago responsable si se te caen los ojos por lo horrible que será.

—He visto cosas peores.- Recibió un golpe proveniente de su amigo.— ¡¿Que nunca viste las obras de Picasso?!, ¡son tan feas como mi trasero!

Ojalá su maestro no lo haya oído.

—Te creo. ¿Quieres venir a caminar conmigo, John?

—Claro, me encantaría.

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Era increíble la suerte que tenía, hace unas horas había deseado hablar más con Paul McCartney y ahora estaban saltándose clases juntos. ¿No es eso un lindo detalle?

John estaba comiendo una barra de chocolate que había sacado de las máquinas expendedoras, si no fuera porque Paul rechazó tener una igual le hubiera comprado también, pero no insistió.

—¿Puedo decirte algo?- Preguntó Paul con miedo.

—Lo siento Paul, no puedo corresponder tus sentimientos.- Dijo John en una pose melodramática, algo que hizo reír a Paul de una forma si bien era burlona también era sarcástica o molesta.

—No, ridículo.- Le dio un golpe en la cabeza.—- Arruinaste el momento.

—¡Sólo dilo, era broma!

—Solo estoy feliz de tener a un amigo como tú. Siento que congeniamos muy bien, ¿no te parece eso lindo...?

— Sí... Es lindo...