Capítulo Treinta y Tres.

62 8 2
                                    

Baby, you're no good
for me, darling
Ariana Grande (leave me lonely)

Al llegar a comisaria, Jimin pudo notar que lo que había dicho Jay era cierto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al llegar a comisaria, Jimin pudo notar que lo que había dicho Jay era cierto. Los policías no solo habían ido a aquel lugar a buscarlo, los medios de comunicación sabían y le estaban metiendo presión a la policía para que sacaran cualquier información que se pudiera dar a conocer.

Los reporteros estaban a las afueras del lugar y por desgracia les tocaba caminar por ahí al no tener protección por haberse ido mientras los policías seguían buscando pruebas e información en la casa del lago.

Lo estaban tratando como emergencia nacional y probablemente hasta los noticieros internacionales estarían transmitiendo al respecto.

Jay detuvo el auto frente a la comisaria, obteniendo la atención de los reporteros al instante por lo que se acercaron al auto, apenas dándoles margen para salir antes de rodearlos.

—¡Jimin! ¡Unas preguntas! —exigían todos al mismo tiempo en lo que acercaban micrófonos a su cara.

—¿Dónde lo tenían? ¿Es cierto que fue secuestrado? —Jimin agachó la cabeza en lo que los destellos de la cámara pegaban en su cara, cegándolo a pesar de llevar gafas de sol.

—¿Su ex pareja lo forzó a escapar con él? —las preguntas seguían en lo que Jimin y Jay hacían su paso dentro. Jimin mordió su mejilla, no iba a contestar sus absurdas preguntas a pesar de que moría por contar la verdad.

Era sencillo; los adultos en su vida exageraron y le hicieron daño al amor de su vida.

Jimin se detuvo mientras el suceso se repetía en su mente. Podía contar todo lo que había pasado y tendrían que creerle ¿No?

—¿Lo torturaron? —Sintió la mano de Jay en su hombro en lo que lo empujaba para que no se detuviera. Jimin tanteó, moviendo su hombro del agarre de Jay y alejándose solo para continuar caminando por su cuenta.

Cuando él y Jay estuvieron lo suficiente cerca de la entrada los policías les abrieron paso, haciéndolos entrar al edificio donde finalmente pudieron estar más tranquilos.

Se esperaba que algún policía lo esposara o que lo encerraran, pero estos no los habían ni volteado a ver, de seguro porque ya estaban al tanto de la situación o al menos todos parecían estarlo.

—¿Park Minsoo? —preguntó Jay a un oficial que enseguida los dirigió a donde estaba el padre de ambos. Estaba en una sala de interrogatorio. Sentado, viendo a la nada como si simplemente estuviera dejando el tiempo pasar.

—Papá —murmuró Jimin obteniendo su atención a lo que este sonrió.

—Hijo... Ha pasado un tiempo. Que lastima que nos reuniéramos por este tipo de eventos desafortunados pero me alegra que estés a salvo —asintió regresando a como estaba antes y cerrando los ojos. Un poco más tranquilo ahora.

𝐧𝐞𝐞𝐝𝐲 | 𝐘.𝐌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora