"Dime lo bien que se siente que te necesite" pidió Jimin a la vez que rozaba sus gruesos labios por el cuello de Yoongi para provocarlo.
"¿No sabes que no soy bueno para ti?" preguntó Yoongi con una sonrisa ladina que realzaba su tono burlón mientra...
had my eyes rolling back, had me arching my back, now you love me so good —Ariana Grande (thinking bout you)
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Jimin jadeó en busca de aire al llegar al ascensor del complejo de apartamentos donde vivía Yoongi. Una mano se apoyó en su muslo —ambos ardían por haber corrido todo el camino hasta ahí— y con la otra presionó el botón del piso del mayor varias veces para que la puerta se cerrara rápido. Ya iba tres minutos tarde y estaba un tanto desesperado por llegar ya que estaba ansiando llegar para decirle a Yoongi lo que acababa de descubrir: que lo amaba.
Cuando las puertas del elevador se cerraron observó su reflejo en el espejo de este, según él iba hecho un desastre —su cabello estaba despeinado, podía sentir el sudor en su cuerpo y estaba bastante sonrojado por haberse agitado por lo que simplemente trató de arreglar su cabello para verse presentable.
Estaba ansioso por ser transparente con sus sentimientos de una vez por todas, no como cuando le dijo que le gustaba porque —aparte de que estaba un tanto seguro que Yoongi presionándolo fue lo que hizo que lo confesara— eran cosas totalmente distintas y aunque esta era más delicada aún estaba seguro por completo de sus sentimientos.
No había otra persona que le gustara de la forma en la que Yoongi le gustaba; no había nadie que lo tuviera de la forma que lo tenía Yoongi; nadie lo había hecho sentir mariposas en el estómago al pensar en la idea de estar juntos. Tenía que ser amor, algo más fuerte que lo que había sentido por alguna otra persona antes. Tenía que ser Yoongi.
Su celular sonó cuando los números del elevador empezaron a subir, Jimin contestó sin fijarse mucho en el número porque no se acordaba de ninguno del número de sus contactos. Era molesto estar de esa forma pero peor habría sido no estar sin un celular en absoluto.
—¿A dónde se supone que fuiste? —preguntó su madre con un tono irritado cuando contestó.
—Un amigo vive bajando la calle de donde estábamos, le pregunté si me podía quedar porque no quería ir de vuelta a casa y me dijo que sí. No te tienes que preocupar —contestó con un tono tierno y dócil que esperaba su madre se tragara por completo para no tener que rogar o regresar cuando estaba tan cerca de estar con Yoongi.
—Jimin... ¿Tuviste que ver con lo que le pasó a Jackson? —preguntó después de un breve silencio, casi en un susurro como si no quisiera pensar en ello mucho menos decirlo.
—No —respondió con un leve puchero y un tono lleno de inocencia mientras miraba los números del elevador ascender, sus dedos tanteando en la barra mientras esperaba que fuera más rápido y que su madre colgara de una vez.
—Entonces, Yoongi tuvo que haber sido... ¿Vas a donde él ahora? —continuó preguntando, ahora con un tono retador a lo que Jimin se atragantó con su propia saliva y empezó a toser.
