D A E C H W I T A

CAPITULO XXI

NARRADORA

Ya se encontraban a unos kilómetros del pueblo, Jungkook se había encargado de conducir toda la noche pero ya se encontraba bastante cansado por lo cual comenzó a detener la carreta y cuando esta se detuvo completamente, se levantó y se acercó al mayor de los 3 el cual se encontraba dormido con su cabeza apoyada sobre la de la chica, Kook lo tomó del hombro y lo comenzó a mover lentamente hasta que este comenzó a abrir los ojos y se los restregaba con el dorso de su mano.

- ¿Que ocurre Kook? ¿Ya estás cansado? -Preguntó en un susurro el pelinegro y el mencionado asintió- Bien yo me hago cargo ahora no te preocupes, ve a recostarte -Dijo y Jungkook se colocó enfrente de ellos recargándose en la pared de la carreta para poder dormir, al cual no le tomo mucho tiempo hacerlo-

Yoongi le dio una mirada a la chica que se encontraba aún apoyada en su hombro y volvió a sonreír levemente, buscó a su alrededor algo que pudiera utilizar para poder recostarla y que se ella apoyara su cabeza, encontró un saco que estaba bastante blando y lo acercó a él. Tomo en una de sus manos la cabeza de ____ con delicadeza y acercó aquel saco hacia donde el estaba ubicado, acomodándolo para que quedara perfecto para que aquella chica quedara recostada, con unas mantas que habían por ahí la cubrió y acaricio levemente su cabello para después levantarse suavemente y caminar hacia el chico que se encontraba frente a él y de igual manera lo cubrió, dio una media sonrisa y fue hacia el asiento en el frente y tomo las riendas en sus manos para hacer andar la carreta.

[Mientras tanto en el Templo Seonjo]

- Mi señor el general Cho, ha llegado a palacio -Aviso dando una reverencia Dong-Yul-

- ¿Y qué esperas para hacerlo pasar? -Respondió el Rey cruzando sus manos sobre su rostro-

- Enseguida su magestad -El sirviente salió veloz de la sala-

En unos pocos minutos las puertas se abrieron dando paso a un hombre alto y robusto con una barba crecida, con las manos en la espalda.

- Se avisa la llegada de el general Cho Kibum -Avisó el vocero real-

- Muy buenas tardes su alteza -Se inclinó el general frente al trono del rey-

- Buenas tardes General Cho, espero que haya tenido un muy buen viaje de vuelta a palacio -Dijo el Rey con una sonrisa falsa-

- Todo es gracias a su cuidado mi señor -Respondió el general levantándose-

- No es nada, vamos a lo que nos convoca -Dijo el Rey mirando fijamente al general- ¿Como ha ido la búsqueda de la princesa? Y espero que sean buenas noticias -Apoyo su codo en el brazo del trono afirmándose la barbilla con su mano-

- Lamento no poder darle buenas noticias mi señor -Dijo el general en un tono nervioso mientras se inclinaba pidiendo disculpas-

-El Rey molesto se levantó del trono de golpe- ¡¿Como es posible que usted siendo general no haya podido encontrar a mi hija?! -Gritó mientras lo apuntaba con el dedo-

- Lo siento, mi señor -Se inclinaba repetidas veces- Es mi culpa -Dijo mientras lo miraba de reojo-

- ¡Son todos una manga de inútiles, usted y todos su grupo, debería matarlos a todos! - Gritó-

- No señor, por favor piedad -Dijo apoyándose sobre sus rodillas mientras frotaba ambas manos pidiendo disculpas-

- Le daré una ultima oportunidad-Dijo el Rey serio- Deberá encontrar a mi hija cueste lo que cueste y traerme al desgraciado que la secuestro con vida, yo mataré con mis propias manos a ese bastardo -Dijo mientras caminaba hacia el trono-

- Si señor, le prometo que con mis hombres encontraremos a la princesa -Dijo el general levantándose-

- Y no se atrevan a volver al palacio a menos que no vuelva con mi hija o si no, los mataré a todos. ¿Quedó claro? -Dijo sentándose en el trono-

- Si, su alteza -Se volvió a inclinar-

- Bien, retírate -Dijo haciéndole una señal con la mano indicándole que se fuera-

El general se retiró rápidamente, y dejó al Rey solo en ese salón el cual se inundaba de una oscura vibra....

[De vuelta a la carreta]

El pelinegro seguía conduciendo la carreta mientras, se llenaba los pulmones del limpio aire que recorría ese bello paisaje que los acompañaba, estaba tan sumergido en sus pensamientos que no se dio cuenta de que dentro de la carreta la chica que yacía durmiendo en sus hombros hace unos minutos abría los ojos lentamente mientras se movía entre la manta levantándose, restregó sus ojos con el dorso de sus manos y miró a su alrededor aún adormilada buscando al pelinegro, una gran sorpresa se llevó de que este ya no estaba a su lado, si no que se encontraba en la parte delantera de la carreta conduciéndola.

Se levantó lentamente y se acercó despacio hacia el chico para sentarse lentamente a su lado.

- Me dejaste sola -Soltó ella una vez ya sentada al lado de él mirando hacia adelante-

-El saltó de sorpresa y miró a quien se encontraba a su lado- Me asustaste -Dijo llevando una mano a su corazón-

- ¿Tan fea me veo? - Preguntó ella mirándolo-

El chico quedó pasmado ante la pregunta de la chica, quería responderle que se veía todo lo contrario a fea, se veía bellísima recién despertada y con él cabello revuelto se le hacia aún más hermosa, pero de sus labios solo salió un...

- ¿Po-por qué m-me preguntas eso a mi? -Dijo nervioso desviando la mirada hacia el frente-

- Lo que deberías haber respondido es "¿Cómo puedes decir eso? No estas viendo que eres la más linda" -Dijo ella imitando la  voz del chico-

El no dudo en soltar una carcajada no tan sonora para no despertar a su amigo el cual dormía y ella lo acompañó con una sonrisa.

- ¿De que te ríes? -Preguntó ella sonriendo-

- De ti y tu imitación -Dijo aún soltando unas leves risas-

- No deberías reírte, mejor toma nota para cuando quieras conquistar a una chica -Dijo juguetona mientras miraba hacia el frente-

Yoongi quedó asombrado por la ocurrencia de la chica y comenzó a sentirse un poco nervioso

- No necesito tomar nota de eso, es innecesario -Dijo soberbió-

Claramente lo anotó...

- Si tú dices -Dijo mientras rodaba los ojos-

- ¿Te sientes mejor? -Preguntó mirándola de reojo-

- Si, gracias por cuidarme Yoongi -Dijo ___ sonriendole sinceramente- ¿No sabia que te importaba tanto mi bienestar? -Fingió asombro-

- No es eso, es que Yang Mi me va a matar si algo te ocurre -Respondió moviendo la cabeza burlonamente-

- Gracias de todas maneras -Dijo ella mirando hacia el frente-

El chico asintió sin decir nada mientras miraba el camino...