Izuku veía todo esto y solo dijo unas palabras antes de irse, unas palabras que sorprendió a la encapuchada.
"No confíes en nadie, aveces las personas tienen un traje de cordero, pero dentro de ellas esta un lobo hambriento que solo quiere comer, no estoy diciendo que desconfíes de todos, solo te estoy diciendo que no confíes en una persona que recién acabas de conocer, esto también va para todas las de aquí........No confíen en nadie"
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La encapuchada estaba sorprendida por lo dicho y cuando se volteó ya el pecoso se había ido, esta giró nuevamente su cabeza encontrándose con la hermosa vista que hacía de la ciudad, sinceramente después de lo que paso jamás pensó que un chico la aconsejaría de tal manera.
—El....fue tan sincero en sus palabras—
No era la primera vez que un chico la aconsejaba, su padre lo había hecho varias veces y ella simplemente escuchaba. Juró que vió la cara de su padre reflejada en ese chico, el la escuchó, no la interrumpió, no se burló, y la aconsejó.
Se sorprendió un poco al ver que ese chico no era igual a los otros que eran pervertidos y arrogantes, de esos que creen que por hablar de cosas íntimas y tener 3 o 4 chicas detrás se ven geniales.
—Parece que no todos sin iguales como dicen..... aunque estaría contradiciendo lo que me acaba de decir sobre no confiar en una persona que acaba de conocer—
Se río un poco por lo que acababa de decir para luego mirar al cielo y quedarse ahí por un rato.
Mientras tanto con Izuku.
Este estaba caminando por los pasillos en dirección al patio para encontrarse con cierta peli blanca.
—Como le hace Fuyumi para desaparecer de la nada— pensó el chico mientras seguía caminando —Quizás la encuentre afuera—
El pecoso siguió caminando hasta salir al patio de la academia, para su suerte no había nadie ahí así que podía caminar con tranquilidad sin ser molestado. Izuku seguía buscándola y buscándola pero no la encontraba.
—Parece que no esta aqui—
El pecoso ya rendido se sentó en una de las bancas que había en el lugar a descansar un rato, llevaba buscando y buscando a la peli Blanca pero no la encontraba.
—Bueno, de seguro está con alguna de sus amigas, mejor no entrometerse con eso—
El chico se levantó y entró nuevamente para irse a su clase, aunque estaba un poco desganado por no encontrar a su amiga.
Izuku caminaba mientras veía su teléfono, tenía algunos mensajes sin leer pero estos no eran tan importantes así que ni se molestó en leerlos y simplemente apagó su teléfono.
El chico miró hacia su izquierda y vio una puerta algo extraña, parecia que nadie hubiera entrado ahí desde hace ya tiempo ya que la puerta estaba llena de polvo, este se acercó y lentamente abrió un poco la puerta para no hacer ruido.
El chico se sorprendió al ver a la persona que estaba ahí dentro. Detrás de la puerta estaba una peli celeste tomando una taza de té mientras meditaba un poco.
—¿Que hace ella aquí?—se preguntó en voz baja
El pecoso miró un poco esa "habitación" y se sorprendió por lo bien decorado que estaba por dentro, era de color rosa con algunos stikers en la pared y un poco de brillantina.
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Cuando Llega El Amor
RomanceIzuku Midoriya, un joven aspirante a héroe fue transferido de academia, lo que no sabe es que su vida será un infierno gracias a cierta chica. Pero detrás de todo esto hubo un suceso que cambiara la forma de pensar en el peli verde hacia esta misma...